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Jimin estuvo furioso y sin dirigirle la palabra a sus dos mejores amigos por días.

Realmente no entendían cómo podían juzgar tanto a alguien sin conocerle.

Si, tal vez Yoongi y él no se habían conocido de la manera más convencional. Y si, el pálido no tenía un historial limpio, pero él tampoco.

Se comprendían en eso, no se juzgaban por las decisiones que habían tomado. Veían más que solo la superficie del otro.

Yoongi no consideraba a Jimin un presumido egocéntrico cabeza hueca. Sabía lo inteligente que era, que solo era alguien que sabía lo que quería y cómo conseguirlo, y no planeaba dejarse aplastar como le había pasado tantas veces. Y todas sus peculiaridades (su ropa, su humor, sus cambios de humor) eran tomadas como cualidades atractivas.

Y Jimin podía ver a Yoongi, como era más atento y sensible de lo que muchos imaginaban. Que disfrutaba de cosas simples y delicadas. Sabía un montón de cosas, cosas realmente interesantes, podía hablar de detalles de arquitectura como todo un profesor de historia del arte, sabía hacer cálculos de pura memoria (había logrado hacer un presupuesto semanal para Jimin solo con darle un aproximado de las cantidades) y adoraba la música.

Yoongi no era solo otro vago convicto, y Jimin no era un mentiroso vividor. Ambos habían hecho lo que podían con lo que tenían, ya fuera cerebro y belleza, o fuerza.

Pero claro que Jimin se puso algo alerta ante las palabras de Jungkook.

Era verdad que no tenía el mejor historial.

Si había terminado con verdaderos idiotas, en si se fue de casa por seguir a uno de ellos. Y eso solo lo llevó al centro de detención juvenil y que sus padres no le dejaran volver a casa al salir.

Si, ahí conoció a Taehyung, encontró a su mejor confidente. Y luego Jungkook se les unió.

Creo su pequeña familia, pero los idiotas siguieron yendo y viniendo. Pero... realmente quería creer que Yoongi podría ser la excepción.

"¿Quién crees que consiguió los 6 meses por buena conducta?" Jimin solo pudo sonreír ampliamente.

"¿De verdad? ¿Te portaste tan bien?"

"No es tan complicado, dulzura. Solo tienes que tener paciencia, no buscar peleas, seguir los horarios. Además..." Yoongi suspiró antes de mirarlo con una pequeña sonrisa. No una de lado donde parecía casi burlón. Si no una sincera sonrisa, algo nerviosa de alguna manera "Tenía una razón para querer salir de aquí pronto"

Jimin solo pudo apartar la mirada mientras sus mejillas se sonrojaban, Yoongi pareciendo encantando con la vista del menor avergonzado.

El oficial que vigilaba siempre la sala de visitas rodó los ojos.

Llevaba meses viendo este coqueteo entre ambos chicos, prácticamente era el habla de todos en la sala de descanso. Por favor que ya terminaran el martirio de todos y hicieran algo.

"Ah... que puedo decir" Jimin se compuso, antes de guiñarle un ojo "Soy así de lindo"

"Extremadamente lindo" el pálido ladeó su cabeza antes de tragar duro "Jimin"

El oficial y Jimin agudizaron el oído, Yoongi casi nunca le decía Jimin, a menos que fuera algo serio.

"Salgo dentro de unas semanas y... me preguntaba si podía llevarte a una cita. Una de verdad. No con un maldito cristal de por medio y sin teléfonos" El pelinegro señaló el artefacto "Solo un lugar tan lindo como tú... si me lo permites"

Jimin contuvo el aliento, su corazón pareciendo querer salir de su pecho, mientras apretaba el teléfono entre sus dedos.

El oficial esperaba casi tan nervioso que Yoongi.

Please, Please, Please >Yoonmin<Donde viven las historias. Descúbrelo ahora