Pokemon Trainer Vicky

capitulo 25

Royal Road
Tooo
Entrenadora Pokémon Vicky (Pokemon SI) por Seras

"Nin-Nin". Susurré con un gruñido mientras una vez más trepaba por las vigas de la estúpida mansión ninja de Koga.

Estúpidas trampas.

Estúpidos cables trampa.

Estúpidos pasillos falsos hechos con espejos. Todavía me duele la nariz.

Pero seguí arrastrándome. Hoy Koga me estaba obligando a realizar su 'Entrenamiento Ninja' porque, según él, un Entrenador debe ser capaz de sobrevivir a cualquier experiencia. Un niño normal de diez años probablemente habría discutido con él: ¿qué tiene que ver correr a través de un conjunto de trampas perseguidas por ninjas con el entrenamiento Pokémon?

No era un niño normal de diez años y sabía lo fácil que sería evitar a un Pokémon en una batalla para matar a un entrenador si alguna vez me enfrentaba a alguien que realmente quisiera matarme.

Así que estaba trepando por las vigas de la mansión, evitando trampas y esquivando a los ninjas que me buscaban.

Estaban siendo suaves conmigo, lo sabía, pero al mismo tiempo.

¡Vicky Stronk! Mi fuerza inusual significaba que tenía algunos trucos que no esperaban.

Además, ¡Ninja-Tag fue divertido! Si es agotador.

Excepto cuando no lo fue. Casi lo había logrado, cuando la falta de sonido me alertó.

¡¿Me caí justo a tiempo para evitar los malditos shuriken?!

“¡O-oye! ¡Eso es peligroso!"

"Sería una lección importante". Ofreció el ninja. Un hombre mayor con el pelo canoso que no me había dado nombre.

"Claro Bob, digas lo que digas". Refunfuñé mientras nos enfrentamos en el pasillo. Su falta de emoción podría considerarse una buena señal, pero sabía que realmente odiaba cuando lo llamaba Bob, pero eso era culpa suya. Se negó a darme un nombre para llamarlo, y si era lo suficientemente bueno para Tom Cruise, ¡lo era para mí!

Se movió, toda la advertencia que recibí antes de saltar, golpeó la pared del pasillo, que tenía una pared giratoria para escapes rápidos. También lancé una bomba de humo. Los fuertes golpes de los shuriken golpeando la madera detrás de mí hicieron que mi loca carrera fuera aún más importante.

Lancé una Pokebola.

"Venonat!" Dijo mi pequeño, mirando a su alrededor.

"Polvo del sueño." Susurro señalando la pared falsa, observando mientras atacaba el área. Empecé a correr. ¡Casi llegamos!

"¡Ven!" Escuché la advertencia de Venonats justo a tiempo.