¡No es mi hermano! (Hyunin)

"El pasado y el precio de recordarlo"

—"Y recuerda hijo, cuando los ojos de tu hermano comiencen a tornarse más azules, es porque su cuerpo corre peligro" — Ragnar posa su grande y pesada, pero paternal mano sobre el hombro de Hyunjin.

Jeongin husmeaba por la ranura de la pesada puerta que había empujado para escuchar la conversación de su padre y hermano.

—"Entonces yo cuidaré y protegeré de él, padre" —Promete seguro y como todo un vikingo.

Ragnar le obsequia una bella sonrisa satisfecha y feliz.

—"¿Hasta dónde serías capaz de llegar por tu gente, Hyunjin?" —Cuestiona ameno y esperanzado de escuchar una noble pero valiente respuesta de un vikingo se su edad — "Por tú familia, por tu hermano".

Y Hyunjin reflexiona escasos momentos. Jeongin espera en silencio y con el corazón tomando un nuevo ritmo, una nueva velocidad que poco conocía. Sus mejillas sintieron una cálida tibieza, pero su alma se estrujó de una forma poco agradable para su joven e inexperto cuerpo.

—"Mi vida, padre" —Finalmente responde, alza la cabeza para mirar a Ragnar Lothbrok al rostro y dedicarle una inocente y despreocupada sonrisa — "Daré mi vida por Jeongin, si así es necesario" — Promete sin miramientos.

Fue entonces que, por primera vez sintió un grande odio por un hombre, el cual era de su gente y lo más importante del asunto: ese alguien formaba parte de su familia. Jeongin no pudo evitar sentir un malsano sentimiento por Hyunjin.

Accidentalmente Jeongin hizo ruido, llamando la atención de su padre y hermano. Aquella vez le descubrieron, sin embargo no fue la primera vez en la que Ragnar lo observaba o encontraba merodeando en conversaciones o reuniones ajenas al menor.

Y su sueño terminó y Jeongin comenzó a abrir los ojos, encontrándose en su cama y varios años después de aquel suceso y de lo que ahora formaba parte de su pasado.

Suspiró resignado.

Ahora Jeongin reconocía como a la palma de su mano a esa sensación malsana que se había comenzado a regar desde hacía bastantes años atrás, volviéndose en una tierra infértil y ahogada. Y no la tierra prometida. Era cuestión de tiempo para que terminara por volverse inhabitable.

Lo que en verdad significa aquello era: "Jeongin, no podría continuar alejándose de su destino y lo que ya estaba escrito. Y si ninguno de los dos hijos de Ragnar cedía ante la muerte, no habría otra opción que permitir que el amor terminara por renacer y asesinar el alma de ambos".

Jeongin y Hyunjin estaban destinados a estar juntos por el resto de sus días sobrantes, sin importar el costo que implicará aquello.

El problema de recordar el pasado era, que es demasiado costoso para aquella alma que está confundida y continúa alimentando el dolor y rencor que uno mismo a sembrado por temor al amor.