𝙎𝙚𝙣̃𝙤𝙧𝙖 𝙋𝙧𝙞𝙘𝙚

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𝙻𝚘𝚗𝚍𝚛𝚎𝚜, 𝚁𝚎𝚒𝚗𝚘 𝚄𝚗𝚒𝚍𝚘.


Luego de lo que pasó en esa habitación cada uno se fue por su lado como si nada hubiera pasado, al parecer cada uno ya había soltado lo que tenía dentro, literalmente. 

Amelia Price, con solo 35 años, se embarazó a los 18, la verdad no quería tenerlo, pero un joven John Price, le rogó que por favor lo tuvieran, ya que él siempre quiso ser padre. 

Se casaron ese mismo año para guardar las apariencias, aunque la verdad fue que todo el mundo hablaba de ello, ya pueblo chico infierno grande, el dinero nunca fue un problema para ambos ya que eran de familias acomodadas y no hay peor escandalo que un hijo fuera del matrimonio para familias tan conservadoras como las de ellos. 

Para Price esto no fue un gran cambio ya que él estaba recién entrando en el ejercito así que lo que menos hacía era pasar tiempo con su esposa o con su hija recién nacida, no era que no le importara, solo que se excusaba en que su deber era servirle a su patria. 

Pero Amelia tampoco era que esté muy pendiente de su pequeña hija, contantemente contrataba niñeras o nanas para que pudieran cuidar de la niña. 

Fue así como ella pudo terminar la carrera y empezó a trabajar yéndose fuera del país. 

Sin duda si que en su vida laboral fue exitosa, ya que ahora cuenta con su empresa, una empresa que se encargaba de hacer parecer bueno adquirir dinero "limpio". 


[...]


Hoy sería otra tarde en la casa de Emma, sentía algo de nervios por como debía actuar con ella, lo raro es que no me sentía culpable, solo me sentía con miedo de que pudiera descubrirme.  

Cuando entramos, pude escuchar movimiento en la cocina, sonreí pensando que John estaba en la casa, pero al ver a esa figura femenina de espaldas, la sonrisa de desvaneció. 

- ¡Mamá! - Emma corrió a los brazos de la mujer y esta le dio un beso en la frente. 

- Hola cariño, ¿Como te fue en la escuela?. 

- Bien... quiero presentarte a mi amiga - tomó mi mano y me hizo dar unos pasos más adelante para conocer a la madre. 

- ¿Quién es esta chica? - alzó una ceja. 

- Ella es ____ Wallas, vamos en el mismo curso y me está ayudando con mis notas en la escuela, es la mejor de la escuela. 

- ¿Notas en la escuela? Pero no necesitas eso, linda... las personas que se esfuerzan solo solo porque no tienen el dinero suficiente para poder pagarse su futuro, y tu si tienes ese dinero. 

Forbidden -𝐉𝐨𝐡𝐧 𝐏𝐫𝐢𝐜𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora