Capitulo 6.

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Pasó una semana, Jeje, ya no se que hacer, intenté de todo para volver, es un poco chistoso y penoso, me sentí más a gusto rodeado de aquellas personas que con mi "FAMILIA", les dije que intenté de todo verdad?

Bueno, esto me llevó a tratar de provocarme yo mismo un accidente, jaja, nose si decir que afortunadamente o desafortunadamente un policía me detuvo a tiempo, de verdad quiero volver, lo mucho que pude llegar son en mi sueños y eso que ni se si es real o no, porque estuve en coma y talvez todo lo que viví fue un sueño, es confuso verdad? Lo poco que pude ver y vivir en los sueños fue el "desarrollo de la historia" normal, mediante mis sueños me enteré que me estaban buscando pero sin alterar los hechos que si debían pasar, Fuutarou y su familia era los que me buscaban, estaba desaparecido, las Quintillizas hacían lo que podían, tampoco es que halla hecho un vínculo fuerte aún con alguna de ellas para que realmente se preocuparan tanto.

En tanto yo estaba ahí, en ese mundo, no podía moverme, era como estar en una parálisis de sueño

~tock ~tock

Abrí la puerta y era Fernanda, a pesar de ser mi jefa, era una muy buena amiga, venía a visitarme en estos días que trataba de volver, nose si contarle lo sucedido, jaja, me tacharía de loco

- Hola Tn, estás listo para volver al trabajo? - noté su ansias para que vuelva al trabajo, ella sabía que seguía con algunas secuelas del accidente y por aquello me dejó con descanso laboral durante estos 7 días

- no lo sé Fernanda, no quiero salir de mi casa - Le dije con un cansancio falso

- Estar encerrado de hará mal, tienes que despejar tu mente - Noté su preocupación, la verdad no lo sabía aún

- Jeje, pero si salgo... - Dije nerviosamente

- El patio de tu casa no cuenta, Tn... - Dijo aún más preocupada

- Pero porque tanta preocupación Fernanda? - Pregunté dudoso por su respuesta

- Porque soy tu amiga, o no? - Se mostró un poco feliz - bueno, salimos a dar una vuelta al parque?

- Está bien, bien - Sonreí levemente mientras suspiraba

Ella me jaló hacia afuera, las calles bulliciosas se mostraron nuevamente hacia mi, desde que la conocí es de las pocas y por no decir única persona que me apoya, aún recuerdo cuando la conocí, ese día nos hicimos amigos

Años atrás (perspectiva narrador normal)

- Oye tu mocosa, traeme unos cigarros! - Habló un hombre de unos 30 a 40 años

Aquel hombre tiró unos billetes a la pobre niña, se encontraba en un estado deplorable, tenía heridas en los brazos y alguna que otra cicatriz en el mismo brazo

- Yo... - Trataba de manter la calma, mientras unas lágrimas salían de sus ojos por los gritos de su figura "paterna"

- Hija, tráeme un poco de lechuga y tomate para hacer ensalada con la cena - dijo una mujer que a la vez habló en un tono dulce

- Está bien mami! - la pequeña mostró una leve sonrisa

Desafortunadamente el disque hombre de la casa escuchó a su mujer e hija murmurar

- Te dije que solo compres cigarros! - Exclamó en un grito que provocó nuevamente el temor en la pequeña

- Jonathan! tranquilo! Es una niña aún! - Dijo ya enojada y cansada de ser también menospreciada junto a su hija

- Cállate maldita arrimada! Solo estás aquí por mi dinero! - Dijo enfurecido mientras gritaba

- Soy tu esposa! ME DEBES TENER RESPETO IGUAL QUE A TU HIJA - Dijo en tono protector a su hija y a ella misma

𝑫𝒊𝒇𝒆𝒓𝒆𝒏𝒕𝒆𝒔 𝒓𝒆𝒂𝒍𝒊𝒅𝒂𝒅𝒆𝒔, 𝑼𝒏 𝑴𝒊𝒔𝒎𝒐 𝑨𝒎𝒐𝒓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora