Te Enamore Una Vez. Se Que Lo Hare Denuevo

Bienvenido a Casa

Cuando Hitoshi paso a la oficina de Neito para irse a casa, este no estaba. Él frunció el ceño preocupado y de inmediato le pregunto a Kendo que había pasado, a lo que ella solo le explico que Neito había salido, más no sabía a donde

Hitoshi llamo inmediatamente después de eso, no quería ser hostigoso, claro que Neito podía irse cuando quisiera y a donde quisiera, pero eso no evitaba que se preocupara, aún no sabía si sus recuerdos eran buenos o no, por eso le preocupaba, no sabía si Neito se abría perdido en algún momento

-¿Hola?

-Nei-To, Neito, je, je, je ¿Dónde estás?

-Oh, ya estoy en la casa, me encontré con cosas muy interesantes

-¿Así?

Hitoshi frunció el ceño empezando a caminar más tranquilo a su auto. Era inusual que algo llamara la atención del rubio, a menos de que eso fuera alguna travesura suya, y por su tono de voz, no podía evitar recordar a cuando Neito lo usaba antes de que empezara a molestar a la clase A

Algo estaba pasando

-Sip

-Bien ¿Y qué es?

-No mucho, bueno, si, no es mucho pero si algo bastante importante

Hitoshi encendió el auto

-¿Importante?

-Aja

-¿Por qué tanto misterio?

¿Estaría ebrio? ¿Descubrió donde guarda el alcohol? Neito sabía tomar, pero los alcoholes de su casa eran bastante fuertes incluso para él. Por eso no los bebían mucho

-Porque si

Hitoshi rodó los ojos, ya podía sentir el dolor de cabeza venir

Espera...¿Venir?. Se paró en seco, estaba tan cansado que no se había dado cuenta de Como se estaban hablando, de la nada recordando que esa no era una conversación que podría tener con Monoma porque con él todavía no tenían conversaciones por teléfono, pero si era una conversación que podría tener perfectamente en un día normal con su esposo

-¿Nei?

Pregunto vacilante, no era posible, él aún no recordaba nada. Y sabía que sus amigos no le dijeron nada, había escondido las cosas, era imposible que lo supiera... A menos, que realmente hubiera recordado, que empezara a recordar

-¿Dónde estás tú?

El rubio evadió su pregunta lo que frustro un poco al peli morado

-Voy a la casa

-Perfecto, traeme un té de mi cafetería favorita, ya sabes cuál es. Si no llegas con él, entonces duermes fuera

Y colgó

Mientras Hitoshi se detenía en seco dejando caer su teléfono haciendo que su pantalla se agrietara, pero eso no le importo al chico que seguía en shock mirando a la nada. Justo para recordar la cafetería que siempre le gusto a Neito, una que tenía un toque francés y que además, era muy cara, aparte de ser de las pocas personas que sabían de la existencia de aquel lugar porque era difícil llegar ahí

A Hitoshi se le llenaron los ojos de lágrimas

Y piso el acelerador un segundo después

....

Abrió la puerta de su hogar con el corazón latiéndole a mil por segundo, se sentía extremadamente ansioso, con las manos sudorosas, e inclusive temblaba

Apenas dio un paso al frente cuando lo noto. El cuadro del día de su boda colgado a un lado sé la puerta. Un cuadro que no tendría nada de especial de no ser porque este fue la única foto después de la ceremonia, el camarógrafo se quedó un rato más y tomo dicha fotografía cuando estaban bastante ebrios, fue la única que el mismo fotógrafo imprimió y enmarco como un agradecimiento por invitarlo también a la fiesta cuando ya no era su trabajo quedarse. Hitoshi juraba que había perdido esa foto, un día cualquiera en la que estaba ordenando, se dio cuenta de que dicha foto ya no estaba en su álbum. El peli morado la busco por toda la casa hasta buscando en las paredes, más no la encontró. Le pregunto a su esposo si él la tenía, y este lo negó

Lágrimas nublaron su vista una vez más al contemplar con admiración aquel marco, siempre supuso que su esposo le mintió, y ahora no podía estar más agradecido de eso

-¿Nei?

"Por favor, por favor, por favor. Que nada de eso sea mentira, que todo esto sea verdad, que nada sea un sueño"

Rogó Hitoshi mentalmente dando un paso más adentro y dejando el cuadro donde estaba

Y justamente lo vio. Neito cruzo el pasillo con una ligera sonrisa y lágrimas corriendo por su rostro. Tenía aquella hermosa sonrisa y ese brillo tan característico de sus ojos, llenos de recuerdos y emociones que Hitoshi con su propia vista nublada por las lágrimas, no le permitían distinguir correctamente

-No me trajiste mi té, m-maldito m-mapache

Hitoshi corrió hasta donde estaba el rubio abrazándolo y llenándolo de besos, mientras este reía y lo abrazaba con la misma fuerza

-Nei, volviste, volviste, pero ¿Cuándo?

-Cuando vi la foto de nuestra boda los recuerdos se empezaron a proyectar como videos, y cuando llegue aquí investigue más. Maldito drogadicto, cumpliste tu promesa

Neito lloro

-¿Cómo no lo haría? Dios, Shoto tuvo que casi golpearme para que reaccionara, si no fuera por el yo...

-Le debo un regalo a Shoto y Katsuki

Pero en vez de enojarse u ofenderse. Hitoshi rio

.....

-Todo va en orden, los recuerdos deberán volver con el pasar del tiempo, aunque algunos pueden ocasionar dolores de cabeza, le recomendaría algún medicamento, pero eso solo cuando los dolores sean algo fuertes o molestos, no deberían durar mucho, si lo hacen o son frecuentes ven a verme

Neito asintió

-Gracias doctor

-No hay problema

Neito salió de la consulta sonriendo al ver a Kendo y TetsuTetsu esperando afuera

-¡Kendo!

-¡Neito!

-¡TetsuTetsu!

Los tres rieron y se abrazaron. Esa noche pensaban ir a celebrar otra vez, solo que esta vez Neito entendería lo que le querían decir

Hitoshi seguía en cama, se veía tan cansado que Neito prefirió dejarle el desayuno, una nota y lo dejo dormir todo lo que quisiera. Más tarde esa noche se lo recompensaría

-¿Qué esperamos? ¡Vámonos!

Afuera del hospital, frente a un auto estaba Katsuki fumando, quien al verlo sonrió y lo golpeo por causarle dolores de cabeza. Ambos pelearon el resto del camino, compitiendo como siempre

Neito estaba contento, ahora recordaba toda su historia y estaba encantado de ahora poder traer más recuerdos a su lista

Fin.