𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐 𝒅𝒐𝒔...

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En un valle que era dividido por un gran río se encontraba el campamento bushou, varias tiendas de campaña color blanco se alzaban en el lugar, los guerreros que fueron reclutados conversaban entre sí formando amistades se comentaban de todo, en especial sobre como les gustaban las mujeres o donceles ya saben lo típico entre hombres. Y en un bosque lleno de bambú alejado de aquel lugar, el joven Housen trataba de evitar que sus "atributos" de más sean notados por sus compañeros de ejercitó, liebre roja mordía una rama de bambú observando a su dueño maldecir, suspirar y romper algo cuando no lograba su cometido.

Lü Bu había usado unas vendas en su amplio pecho que, para su desgracia, no duraron mucho pues al solo respirar inflando un poco su caja torácica las vendas se rompieron. El moreno avergonzado por su gran tamaño partió una roca en dos con su puño, sus orejas se colorearon de carmín al oír como su propio caballo y de paso su "hijo" (ya que Lü Bu lo crio desde que era un potrillo) se reía abiertamente de su desgracia. Indignado le lanzó una ramita a su cabeza haciendo que ahora su caballo lo vea mal.

─ ¡deja de reír! ─le pidió con vergüenza─ no es mi culpa que la mujer que me trajo al mundo me diera esta gran genética ─apuntó a su pecho que era más grande y blando que todos los de su pueblo.

Liebre roja bufo enojado al oír algo sobre la "madre" de su dueño, el doncel se dio cuenta de eso y acarició su cabeza viendo el campamento. Su ceño se fruncio molestó al saber que todos notarian las grandes diferencias que lo hacían resaltar, sentándose cerca de una roca ideaba un plan para poder pasar sin que nadie preguntara por su apariencia física.

─ ¿a quién quiero engañar? Necesitaré de un milagro para poder entrar ─se dijo. Una enorme luz de fuego junto con humo salió de la rocas más pequeñas y en la más grande la figura de un dragón se presentó─ ¿¡que mierda!?.

─ ¿¡escuche que alguien solicitó un milagro!? ¡¡Quiero oirte decir yo!! ─exclama el fantasma y Lü Bu atinó a solo decir “q-que!?”─ con eso me basta. ¡Preparate Lü Bu tu salvación dragonaria esta aquí yo he sido enviado por tus ancestros para guiarte en esta enmascarada! ─Housen mira desde la protección de su caballo (liebre roja jalo a Lü Bu para ponerlo detras de su cuerpo apenas vio al dragón) notando en la otra esquina de la piedra aún grillo imitando al ser fantasmal, siendo golpeado por el mismo ante la burla─ vamos si quieres quedarte trabaja ─susurro una vez en el suelo cuando empujó a su "compañero" elevándose una vez más ante las enorme brazas de fuego─ ¡asi que escucha lo que digo. Si el ejército descubre que eres un doncel tu castigo será la muerte! ─decreta Cheng sacando su lengua dándole una apariencia más terrorífica.

─ entiendo el riego, pero ¿quien eres tú? ─Housen sabe que su vida corre peligro si llega a ser descubierto. Por lo que en los bolsos de cuero de su caballo escribió una carta que esperaba le llegará a su padre, donde expresaba toda su gratitud como también una disculpa por su imprudencia y deshonra por haberle salido como doncel en vez de varón.

─ ¿que quien soy? ¡¿Que quien soy!? ─pregunta con euforia el dragón haciendo poses algo raras pero divertidas para el humano─ soy el guardián de almas perdidas, yo soy él poderoso.. Jejeje él simpático él increíble Cheng Gong ─al salir de su refugio se mostró al pequeño dragón de escamas azul oscuro, vientre rojo opacó, bigotes del mismo color del vientre y cuernos negros. Housen esta decepcionado─ que producción ¿no cree?.

Liebre roja lo aplastó con sus pezuña siendo detenido por Lü Bu, al dispersarse el polvo se notó al reptil hecho... Puré─ ¿mis ancestros enviaron una lagartija a ayudarme? ─pregunto con sarcasmos tocando al pequeño dragón que estaba bien ofendido, ya sabe que está enano no deben recordárselo, pensaba con desdén.

⚡𝕸𝖚𝖑𝖆𝖓 [𝕿𝖍𝖔𝖗𝕷𝖚̈]🐉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora