4-¿Escuchaste que trató de suicidarse tres veces?

19 3 0
                                    

Hyunjin no se quedo mucho tiempo en la celda después de eso. Retrocedió abruptamente hacia la puerta, recordando la regla de nunca darle la espalda a un preso y cerro las dos cerraduras detrás de él a toda prisa.

—Bueno, fue un placer conocerte—dijo 815 desde el interior. Hyunjin pudo ver a través de la pequeña ventana como todo ese entusiasmo era obviamente falso.

Hyunjin corrió escaleras abajo hacia la oficina, tratando de pensar con coherencia. No sabia que pensar. Llego a la oficina justo para encontrar que la hora del almuerzo había terminado y todos los oficiales habían regresado, incluyendo el chico Chan al que había conocido el otro día. Estaba sentando con los pies sobre el escritorio, moviendo su silla hacia delante y hacia atrás.

 —Hola, ¿de vuelta del almuerzo?—pregunto mientras masticaba perezosamente un sandwich a medio terminar. Hyunjin solo asintió, con una expresión indiferente. Él no sabia que pensar del prisionero, pero de algo estaba seguro, parecía un poco...fuera de sí.

Se sirvió una taza de café y se sentó en el escritorio de Chan.

—¿Puedo preguntarte algo?—le pregunto después de un tiempo poniendo su taza de café sobre el escritorio.

—Claro—Chan bajo los pies al suelo y lo miro—. Dispara, siempre estamos dispuestos a ayudar a los novatos.

Hyunjin roto los ojos. Hijo de puta engreído.

—No es nada de eso, es solo...815—los ojos de Chan se ensombrecieron al instante.

—Solo déjalo, ¿podrías? Si tú quieres saber algo acerca de él pregúntale a alguien más, aquí hay suficientes historias para cubrir todo lo que quieres saber. Solo déjame fuera de esto ¿de acuerdo?

—¿Por qué tanto miedo? — Hyunjin pregunto con mala cara —. Bien, él da miedo, pero ¿qué puede hacer? Por el amor de dios, apenas pesa como cien libras y está en prisión, no hay nada que pueda hacerte.

Chan negó con la cabeza.

—Es el demonio en forma humana, traiciona a los ojos. Es más fuerte de lo que parece, tú no sabes de lo que puede ser capaz.

—¿Y tú sí? —esto estaba empezando a irritar a Hyunjin. El chico estaba tras las rejas, tenía un cuerpo de un palillo de dientes; no podía hacer nada.

—No me preguntes más —dijo Chan bruscamente, poniéndose de pie, dispuesto a partir —Pregúntale a alguien más.

Dicho eso, huyo dejando a Hyunjin con mala cara, rascándose la cabeza a falta de la gorra que le ayuda a mantener las rastas un poco en su lugar.

Honestamente, 815 no podía ser tan peligroso.

Por lo menos dentro de las cuatro paredes de una prisión.

Termino su café rápidamente y no tuvo tiempo el resto del día para pensar en el prisionero 815, pero el tema de conversación fue sacado en el vestuario, de nuevo.

—¿Alguien se apunta esta noche para ir por unas cervezas? —pregunto Jeongin antes de salir, deteniéndose en la puerta. Hyunjin se encogió de hombros.

Él nunca había sido un gran bebedor, pero podría ser una buena oportunidad para conocer un poco mejor a sus nuevos compañeros de trabajo —. Genial —dijo Jeongin tomando su expresión como un si —. Estaba pensando que podíamos hacer una buena salida nocturna; contar algunas historias y cosas así para los novatos —dijo volteando a ver a Hyunjin y Yuqi. Esta última volteo los ojos, mirando a ver el cierre de su chaqueta.

—¿Qué tipo de historias? —pregunto Hyunjin.

—Estaba pensando en todo lo referente al 815, tengo algunos datos muy interesantes acerca de él.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 24 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Prisionero 815 |HYUNLIX|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora