3. encuentro

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Asustado.

Así era como se sentía.

Tenía muchas cosas en juego, pero tenía algo claro; no quería que la conversación acabará con una pelea, no quería ser agresivo, pero tampoco escucharía algún comentario despectivo hacía su persona.

Aunque gracias a él escucho muchos en el pasado, pero eso ya era historia vieja.

No quería desgastarse explicando sus sentimientos, tampoco quería que fueran amigos otra vez; el teñido solo quería una cosa.

Respuestas.

Quería saber por qué actuó en la manera en que lo hizo, por qué si gustaba de él lo hizo a un lado.

Como si fuera nada.

Aunque más que tener respuestas, él quería entenderlo y empatizar con su parte de la historia, era ilógico que Kenma estuviera actuando así después de todo lo que le hizo, pero no podía tenerle rencor, no después de haberle dado tanto de su amor.

Un amor que nunca fue devuelto.

Se sobresalto cuando su celular vibró en su bolsillo, mirando la hora y asegurándose que Kuroo ya había visto su mensaje de que ya estaba en donde habían quedado.

Habían pasado unos veinte minutos desde que había llegado, pero aún no llegaba.

«¿por qué se tarda tanto?»

Mientras miraba vagamente una app en su teléfono, vió como el pelinegro se acercaba a pasó lento y notando como tenía una mirada algo tímida.

Los nervios que tenía antes, aumentaron al momento de tener de frente al mayor, quiso vomitar.

— ¿Y Bokuto? — pregunta y es lo primero q dice, buscando con la mirada a su amigo.

— Aún no ha llegado, — responde, y justo cuando termina de hablar, aparece el albino, saludando cortamente y disculpándose por la tardanza.

Después de eso los sigue un silencio ensordecedor y Kenma no creé poder soportar la situación, pero se traga sus nervios y habla.

— ¿Prefieres hablar en otro lado o aquí?

— Vayamos a la heladeria de aquí enfrente — propone y el teñido asiente siguiendo al par que va dos pasos adelante de él y charlan sobre algo que poco le interesa.

El lugar era lindo y un poco cálido, con colores llamativos y una barra un poco alta para su gusto. No quiso pedir nada porque tenía miedo de vomitar por los nervios.

Así que se sentó en una mesa cerca de la entrada y espero a que terminarán de pedir sus helados, mientras él revisaba su teléfono y veía unos mensajes.

Cuando terminó de responder uno, ve como el pelinegro se sienta junto con el albino con sus helados ya en mano.

— Muy bien, te oigo — dice, el teñido alza la mirada, mirándolo y asiente pero no dice nada.

Kuroo al principio no entendió su silencio, hasta que mira a su lado y ve a su amigo sin mirar a nadie en particular, centrando su concentración en su helado. Suspira y le hace una seña al teñido para que lo siga, llevándolo hacía las mesas del fondo.

— Ahora sí, te oigo.

— Iré al grano ya, que perdí tiempo esperándote — murmura, mostrándose tranquilo aunque estuviera a punto de explotar, mientras el pelinegro le dice una corta disculpa. — Me enteré que planeas ir a la Universidad de Tokyo y si por alguna razón llegamos a pasar no quiero que las cosas se tornen incómodas, — explica, rápidamente mientras apretaba entre sus manos su teléfono.

» Quiero que las cosas entre nosotros estén en paz y para eso necesito que me digas porque actuaste así en el pasado — termina, mientras el pelinegro asentía y revolvía su helado algo derretido.

— Contaré todo con una condición, — murmura, viendo al teñido a los ojos y este solo asentía, intrigado. — Que no volvamos a sacar el tema del pasado.

— Hecho.

— Con esto claro, ¿qué quieres saber?

Lo medita por un momento, buscando en su memoria lo más doloroso y lo más confuso que le hizo el moreno, pero nada de esos recuerdos se reprodujeron en su mente, no pudo controlar el pensamiento fugaz, pero antes de hablar el pelinegro lo interrumpe.

— Si es para saber si gusto de tí, es un no definitivamente, no saldría con una niña niño — dice, y asiente escuchando sus propias palabras como si se estuviera convenciendo a si mismo de la idea.

Kenma solo siente su estómago revólver se, sintiendo su corazón traicionado y pesado.

answer ; kurokenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora