◅de campamento▻

704 79 15
                                    


(...)

Ya eran días de que Hikaru estuviera haciendo todo lo que Tenya le pedía, todo sin faltas, por que obviamente estaba asustado, aunque por el momento no hubo pedidos muy grandes de parte de Tenya, solo traer o llevar cosas, llevarlo a casa, comprar cosas etc. Nada que no fuera simple de hacer y cumplir.

—Hikaru... Oye... ¿Puedo quedarme en tu oficina contigo?— preguntó Tenya mientras fingía un drama de sufrimiento hacia Hikaru
—me siento muy cansado...— Tenya había olvidado eso de ser responsable, lo único que quería hacer era aprovecharse de estar al "mando" de aquel atractivo y aterrador profesor.

—esta ves tengo que negarte eso— dijo Hikaru mientras cerraba un libro que tenía en ese momento y se acercaba a Tenya, estaban muy cerca, pero encerio, muy cerca y Hikaru solo lo observó seriamente antes de inclinarse suavemente hacia el menor
—Te regañaran, además es mejor que vallas como delegado de tu grupo, te veré más tarde pues hay una sorpresa— dijo eso y finalmente se alejó y dio la espalda a Tenya para irse.

Tenya lo observó irse, su corazón latía muy rápidamente por la cercanía del profesor y ahora después de ver la espalda del mismo con tanta concentración. Un calor acompañado de una descarga recorrieron su cuerpo y pudo sentir una sensación... Curiosa. Inmediatamente tuvo que ir a encerrarse en una bodega de limpieza y cerrar con seguro.

Cualquiera que hubiera pasado por ahí sabría que estaba haciendo pues no parecía ser muy silencioso, aunque lo intentaba, para su suerte quien pasaba no era ni más ni menos que Midoriya, quien supo que era Tenya y se quedó para cuidar a su amigo.

Tenya salió algunos minutos después
—Esas cosas deberias hacerlas de manera más silenciosa... ¿Ya como te sientes?— preguntó Midoriya con una voz muy calmada, no hiba a juzgar a Tenya por nada de esas cosas, pues sabia muy bien lo que era tener "ganas".
Tenya casí dió un salto del susto, miró a Midoriya y sus mejillas se pusieron tan rojas como un tomate
—y...yo.... Yo...— no podía hablar por la vergüenza, pero todo eso se fue cuando Midoriya sonrió cálidamente dándole confianza a Tenya.
—no te preocupes, muchos lo hemos hecho alguna vez, no hay de que avergonzarse, tenemos que apurarnos— Midoriya tomó a Tenya del brazo y ambos fueron hacia el patio pues ahí estaba ahora todo el grupo.


(...)


Los alumnos estaban hablando entre todos, no había ningún tipo de orden y al parecer Tenya como delegado no estaba logrando nada de progreso.

De repente se escuchó el sonido de un megáfono, muy fuerte para todos.

—chicos, van a ir a un campamento, no será más que algo parecido a unas vacaciones, algo tranquilo— dijo Hikaru a través del megáfono, su rostro muy serio y frío como un iceberg, las mejillas de Tenya se llenaron de ese intenso color rojo, trató de desviar la mirada y Midoriya notó eso, así que decidió preguntar
—profesor ¿quien propuso esa idea disculpe? Por que solo nos han puesto a entrenar, me parece muy extraño que de repente nos den vacaciones en un campamento— la voz de Midoriya un poco tímida pero debía preguntar por qué sabia que Tenya no lo haría en ese momento

—yo la propuse— respondió Hikaru mientras observaba a Midoriya
—yo voy a trabajar con el héroe Artking para cuidarlos a todos ustedes, jóvenes...— Enji o más conocido como Endeavor, llegó ahí, tenía su Quirk en control en ese momento, por lo que las llamas estaban apagadas, Hikaru lo miró por un momento y sonrió para soltar una pequeña risita burlona.
—¿de que mierda te ríes? ¿Eh? ¿Te parezco gracioso?— Enji respondió con molesta mientras observaba a Hikaru quien solo sonrió un poco más y se acercó a el, ambos se acercaron y se observaron mutuamente de manera desafiante.
—si, tu cara me da risa, hombre carbón— respondió Hikaru, la cara de Enji casi se retorcio del enojo, la tensión era muy pesada y los alumnos solo observaron la escena algo intimidados, ambas figuras eran enormes, como gigantes y estaban mirándose de una manera tan pesada que era difícil no sentir el odio mutuo.

—papá tiene problemas...— dijo Shoto en silencio, estaba a nada de acercarse para intervenir en aquella pelea de gigantes, no para ayudar a Enji, sinó a Hikaru, con quien tenia una comunicación casi de padre e hijo.
—¿papá? ¿Le dices papá a Hikaru en lugar de a tu verdadero padre? Eres un irrespetuoso— Enji se acercó a Shoto casí parecía que iba a golpearlo, pero lo frenó Hikaru quien lo jaló y lo tiró al suelo, los hilos verdes hicieron aparición dibujando cintas alrededor de Enji, cintas que se materializaron de hierro puro evitando le moverse.
—deja al niño en paz, el no tiene la culpa de que tu seas un mal padre— la voz fría en el oído de Enji quien solo pudo quedarse quieto mirándolo con odio.

—¡bien chicos! ¡Todos suban al camión y prepárense para el mejor campamento!—
La atmósfera se aliviano y los alumnos subieron a los camiones para irse, en lo que hiban Hikaru se sentó encima de Enji quien solo se estaba quejando ahí tirado en el suelo.
—¡ya quítame estas malditas cosas! ¡Hikaru!— Enji no podía moverse y Hikaru no se iba a quitar tan fácil de encima de él, solo está sonriendo con travesura.
—no quiero— respondió Hikaru antes de mirarlo, podría jurar que lo observaba con un odió y desprecio tan profundo que al final decidió moverse y borrar aquellas cintas que retenían a Enji.
—Maldito maricón— pronunció  Enji mientras se levantaba del suelo, en su cara recibió un gran puñetazo en cuestión de segundos, uno que le volteo la cara casi haciéndole caer al suelo.
—eso si no te lo permito, no puedes llamarme maricón, hombrecito a medias— ¿por que le dijo así? Pues por su antigua relación, ya que para terminar todo este reguelete, éstos 2 gigantes fueron una pareja cuando eran jóvenes e inexpertos en la vida real.
—ahora vámonos, los niños nos están esperando y más te vale comportarte— Hikaru de nuevo habló muy seriamente, su tono de voz frío mientras ayudaba a Enji a ponerse de pie y ambos subieron al camión.


(...)


Durante el camino muchos platicaban, como: Sero, Mina, Denki, Kirishima, Tsuyu, Uraraka y Hagakure, otros estaban durmiendo como: Midoriya, Ojiro, Koda, Kyoka, etc. Y otros tantos más solo estaban callados observando la ventana.

Entré esos, Tenya quien en ese momento su cabeza estaba hecha un enorme manojo de sentimientos y pensamientos, se sintió extraño, algo en la atención que se prestaban Hikaru y Enji lo hizo sentir celoso, aunque también le hizo sentir algo de rabia y posesividad hacia su profesor, algo muy nuevo pues nunca le había ocurrido algo así, siempre eran celos suaves o envidias, pero nunca algo tan potente como lo que sentía ahora, observó a Hikaru y decidió acercarse a el para sentarse a su lado.
—quiero un dulce— su voz algo fría y molesta, lo que confundió a Hikaru
—¿estas bien Tenya? ¿Pasa algo?— preguntó Hikaru suavemente, su mirada se volvió suave y un poco preocupada por el menor.
—solo quiero un dulce, créame un dulce y ya— Tenya volvió a hablar de esa manera tan seca y fría que preocupaba a Hikaru, sin embargo no se negó pues en un punto pensó que también lo ayudaría a sentir mejor si le daba ese dulce.
—esta bién— dijo antes de utilizar su Quirk y dibujar unos cuantos dulces, recordó el sabor, los componentes y finalmente los creó, cayendo todos en las manos de Tenya.
—gracias— dijo Tenya mientras se levantaba y volvía a su asiento, se quedó observando la ventana y Hikaru solo lo observó durante un rato, preguntándose que era lo que le ocurría en ese momento al menor.

Aun faltaban algunas horas para llegar al campamento, al final ¿que podría salir mal?






⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋⚋

Bueno aquí otra actualización. Éste me pareció más corto, eso creo yo

¿Que creía que hiba a ver gogogo? Pues aún no.

Lo de Enji con Hikaru lo saben quienes me siguen en tiktok, tal vez muchos vengan de allá, tal vez no.

Les agradezco el apoyo y sus comentarios, muchos me hacen el día más feliz lo prometo

🌻los quiero🌻

 🔞a mi oficina🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora