{PAUSADA} Dulces Sueños

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Los días pasaban y como vecino que tenía en la habitación de al lado, no ayudaba a que yo durmiese bien. Antes de esto que os estoy contando, no pasó nada extraño fuera de lo normal actuaba como si fuéramos hermanos. Menos por la noche, claro estaba.

Los ruidos de la cama y su voz grave emitiendo gemidos se incrementaban y cada dia eran mas fuertes. Yo no se como mi madre y su amante no lo oían porque siendo sinceros, era un ruido estremecedor. 

Un dia, que ya me canse de escucharle, me levanté de la cama malhumorado por el cansancio hacia su habitación. Piqué a su puerta. Tardó un rato en abrir. Apareció sin camiseta, donde se podían apreciar sus abdominales un poco definidos y la "v" 

Sandy: -Oh hola León. - se rasco sus ojos.-¿Que te trae por aquí?

León: -Vengo a decirte que pares quieto de una puñetera vez, que no hay quien duerma. -comencé a explicarle por que.- entre tus gemidos a un tono demasiado alto y los ruidos de la cama no hay quien puede echar una cabezadita.

Sandy: -Pero camaleoncito, es mi rutina.-se disculpó

León: -Pues hazla a un tono más bajo

Sandy: -O puedes acompañarme tu. ¿Qué te parece Camaleoncito?

León: -No tengo razones para hacerlo. Eres un pervertido de mierda

Sandy: -Lo se Leon, lo se. 

Hubo un cortante silencio entre nosotros dos. Por un momento olvide a lo que había ido y solo tenía ojos para Sandy. Tenía una mirada muerta, ahora mismo distante, pensativa. 

Leon: -¿Por que estas todas las noches así? -la curiosidad me picaba

Sandy: -¿Debo ser sincero o ya lo sabes?

Leon: -¿Saber el que?

Sandy: -Mira que eres corto de mente. 

Leon: -Gracias. ¿Entonces pararas?

Sandy: -Solo si mañana me haces un pequeño favor

Leon: -Esta bien, ¿Que necesitas?

Sandy: -Mañana aquí a las 4 de la tarde. Se puntual o si no veras

Salí de su cuarto, curioso por el favor. igual me mandaba comprar algo o no se. Es un tipo tan raro...

***

Leon: -Mama, me voy con unos amigos de Amber

Nita: -Llega para la hora de comer. - se dio la vuelta.- y llévate a Sandy. 

Leon: -Mama tiene 20 años ya, puede hacer lo que quiera

Sandy: -Venga Leon vámonos ya

León: -ugh

Nos marchamos de casa los dos. Habíamos quedado en casa de Amber con un tal Fang y un Edgar. No me digas quienes eran.

Subimos hasta el piso de Amber. Nos abrió la puerta ella y dentro de la sala había un chico con cabellos morados, atados en una coleta, que vestía muy informal, pero tenía pinta de ser un tipo agradable. A su lado, su contrario en persona. Un chico de unos años menos que el otro, con pelo de color azabache y con el flequillo por la cara. Vestía muy gotico para mi estilo, entero de negro. Una bufanda de rayas rodeaba su cuello.

Fang: -Hola soy Fang, vosotros debéis de ser León y tu no lo se.-que chico mas extrovertido.- este de aquí es Eddy, mi novio

León: -Si, soy leon y este de aquí es mi hermanastro Sandy