Bond| Omegaverse [Young Miko]

Capítulo 10: come here, puppy

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"¿q-qué?" parpadeo disipando las lágrimas de excitación que se acumulan en mis cuencas, suspira relamiéndose los labios separándose de mi encima "a-alfa" no quiero que se separe

"espera aquí cachorra" sin evitarlo lloriqueo al sentir la ausencia de su calor en mi piel "sé buena para mí" aguanto el quejido solo porque quiero obedecer su orden. La veo desaparecer en la oscuridad de la sala y aprovecho estos segundos para pensar en sus palabras

¿castigo?

No sé cuáles son los castigos

Sé que es una costumbre habitual entre los alfas aplicar ciertas medidas conductuales con sus omegas cuando desobedecemos recurrentemente a una orden pero nunca se me ha especificado la naturaleza de dichas medidas

Que no sean nalgadas

Nunca han aplicado castigo físico sobre mí, pero aún tengo el recuerdo de Glynn corriendo por toda la casa huyendo de mi padre evitando su palma sobre su trasero desnudo

"alfa" me mareo por el pequeño miedo que nace en mi estómago al verla llegar con un bowl

"shh" mi corazón late con fuerza contra mi pecho y ya estoy comenzando a preparar mi súplica, solo una oportunidad, prometo no volver a desobedecerla, no celos, no berrinches "Bonnie, tranquila, hueles a miedo" apoya su rodilla en el borde de la cama dejando lejos de mi vista el pequeño tazón de aluminio "mami ¿confías en mí?"

"no" la miro a través de mis pestañas pero me arrepiento de pasarme de sassy al verla fruncir los labios decepcionada de mi respuesta "lo siento. Sí, con mi vida"

"bien. Entonces" nuevamente el nudo en mi estómago se tensa provocándome nervios viendo cómo se levanta caminando hasta sus jeans doblados en el sillón individual, cierro los ojos de golpe al escuchar la hebilla de su cinturón cuando los saca de sus pantalones "confía en que estoy haciendo esto por tu bien"

"Vicky" atrapo mi labio entre mis dientes al verla envolver el cinto en su mano derecha "soy buena, soy buena. No volveré a ser grosera, lo prometo, t-te, te trataré como lo mereces, sé que he sido ma-"

"oh" chasquea la lengua llegando nuevamente hasta mí a horcajadas. Puedo convencerla de no hacer esto, sé que puedo "lo siento mucho"

"no quiero que me duela" la voz me sale llorosa y con los dedos temblorosos acuno su rostro "yo nunca..." me callo cuando besa mi mano un par de veces

"lo sé" su intenso aroma cítrico me marea volviéndome mansa ante ella y me relajo cuando baja sus besos a mi cuello "pero tiene que doler"

"¡Vicky!" lastimo mi garganta en este grito y pateo como puedo su cuerpo sin embargo no se separa "¡Vicky, Vicky! ¡d-duele!" llevo mis manos a mi cuello pero su gruñido me detiene, hunde sus dientes aún más rompiendo mi piel y el dolor se vuelve tan insoportable que a los segundos la sensación seda mi cuerpo "n-no..." apenas puedo musitar esto en un hilo de voz cuando se aleja solo para usar su lengua comenzando a curar esta nueva herida. No es esa mordida. Pero es el infierno. No sé cómo sentirme "p-perdóname" sollozo porque me lo merezco y me nace ofrecer disculpas por mi mal comportamiento hasta ahora "y-ya no" limpio mi nariz con mi dorso y quito un poco de mis lágrimas con ayuda de mi puño viendo por fin estas dos líneas bermellón escurrirse por su comisura

"te perdono" relame sus labios y no me puedo mover ni un centímetro porque esta punzada me atraviesa desde mi cuello hasta el final de mi espina dorsal "pero aún debes terminar tu castigo" sus ojos azules brillantes casi me confunden. Porque parece que le cuesta, como si no quisiera hacerme pasar por esto, pero tiene qué.