˗ˏˋ INFECTO ˎˊ˗
︶꒦꒷♡꒷꒦︶
Su corazón reacio a la racionalidad, negando con todas sus fuerzas creer en todas las explicaciones escupidas por su cabeza, bombeaba con fuerza, agitado y emocionado.Sus cabellos albinos casi grisáceos por la suciedad en la que se encontraban.
Era difícil no reconocerlo. Es difícil no desearlo.
Intentó correr, sin mucho éxito puesto que la horda de zombies finalmente estaba a su vista. Entendiendo la razón por la que, aquel protagonista de sus noches en vela y pesadillas, corría a otra dirección sin escucharlo.
"Tch, mierda..." Agresivamente acomoda su arma en su espalda en busca de permitirse correr sin obstáculos en su cuerpo. Avanzaba junto al sonido de sus pisadas y charcos de agua salpicando en sus botas.
"¡HORDA! ES UNA HORDA" Gritó ni bien vio las camionetas y vehículos maltratados utilizados por su grupo.
"¡Spreen!" Exclamó un hombre robusto de cabellos castaños, su mirada severa viajó por todas direcciones finalmente bajando de un salto del vehículo e interrogando al azabache una vez estaban de frente. "¿¡En dónde mierda te metiste en un momento así!?"
"Después te doy explicaciones, pero ahora necesitamos irnos y avisarle a Revil y a los demás."
1 2 : O O P.M.
13 de Julio de 202X
Institución médica abandonada.
3 hrs 45 minutos antes.
¡Bang! Resonó incesantemente desde la izquierda, ¡Bang, Bang! Le siguió el ala derecha, ¡Bang, Crack! Continúo desde el piso debajo de ellos, en un eco. Estallidos golpeando las paredes de aquella base, junto con los pasos apresurados del grupo de sobrevivientes.Era una orquesta de ensordecedores estallidos, golpes y desmembramiento.
Finalmente el acogedor y, a su vez, inquietante silencio mostraba su presencia entre aquellas paredes. Cadáveres putrefactos yacían en el suelo, y los habitantes del lugar respiraban agitados sosteniendo con fuerza sus armas.
Spreen había logrado distraerse con aquella masacre. Incluso ahora, de una forma retorcida, se mantenía tranquilo al ocupar su mente en otro tema, la culpa y el asco seguían presentes, pero no eran tan persistentes como antes al despertar.
Toma la libreta de su pequeño bolsillo en su cintura, limpia su mano diestra en sus pantalones tomando con una mano temblorosa el bolígrafo, escribiendo sus pensamientos.
No quería admitirlo, pero realmente apreciaba el regalo del chico francés y le era útil en momentos como estos.
Entonces es que siente como el toque de una mano en su hombro le jala fuera de su ensoñación, ocasionando una reacción inmediata de cerrar bruscamente aquella libreta y observar con fastidio al dueño de la mano.
"Amigo, llevo casi media hora hablándote, ¿qué escribís que no queres que vea?" Expresando un rostro picaro con una sonrisa burlesca, Cris posa su brazo alrededor del cuello de Spreen.
"Las formas en las que me cogí a tu hermana, ¿Querés ver?" Cuidadosamente esconde dentro de su bolsillo la libreta.
Pese al comentario ácido del azabache, el de pelo rosa suelta una carcajada dedicándole una sonrisa alegre al chico.
"Dejá a mi hermana, hijo de puta" Insultó aún entre risas para en un movimiento rápido dejar caer su mano en la cabeza de Spreen y alborotar su cabellera. "Ahora en serio... Ded y su equipo quieren que nos reunamos en el comedor, solo venía a avisarte."

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| 𝐑𝐈𝐆𝐎𝐑 𝐌𝐎𝐑𝐓𝐈𝐒 | ˢᵖʳᵉᵉⁿᵗᵉʳ!ᵃᵘ
ФанфикConter no recuerda nada más aparte de su nombre o el que cree que es su nombre. Su cuerpo magullado, lleno de heridas podridas y tonos grises le daban una idea de lo que había sucedido pero, muy aparte de aquello, realmente no sabía nada de lo que s...