Desperté por un sonido fuerte, estaban abriendo el mercado, así que como pude, me puse en pie, sentía mucho frío, tenía que salir de ahí cuanto antes
X: ¡Hey tú! ¿Qué hacías adentro?
Escuché una voz detrás de mi, pero no me detuve, el suelo estaba frío, sentía que mis piernas flaqueaban y me costaba sostenerme
No tardé mucho en caer al suelo, raspando mis rodillas en el proceso, sin contar con "otra cosa" que me había lastimado, no lo soporté más y comencé a llorar
X: Niña ¿Estás bien?
Intenté ponerme en pie para salir corriendo, pero fallé y volví a caer
X: No te haré daño, déjame ayudarte
Solo pude voltearme, de tal manera que ahora estaba boca arriba y recargada con mis codos, era una señora bastante grande, pero no tan vieja, tenía expresión de preocupación
X: Niña, tus rodillas y...
Se quedó en silencio por unos segundos, mientras miraba hacia un punto en particular de mi cuerpo, de inmediato puse mi mano, cubriendo mi entrepierna
X: Perdona niña, no quise ver
Lisa: N-no se preocupe, yo...
X: Déjame ayudarte
Lisa: No, e-estoy bien
X: Claro que no estás bien, te ayudaré a levantarte y te llevaré a mi auto, es ese de allá
Señaló hacia un lugar y pude ver un auto blanco, no sabía si podía confiar en la señora, pero me dolían bastante las rodillas y así no llegaría a ningún lado
Lisa: D-de acuerdo, gracias
Con la ayuda de la señora, me puse en pie y caminamos hacia el auto, una vez cerca, abrió la puerta del copiloto y me sentó, sí me dolía bastante y me ardía
X: Espera un poco, voy a la cajuela, tengo un botiquín
No estaba segura si era el momento de intentar huir o solo esperar
La señora regresó con un pequeño botiquín y puso alcohol en un pedazo de algodón
Lisa: No, me va a arder
X: Pero te ayudará a sanar pronto
Lisa: Mejor no, así estoy bien
X: Niña, se te puede infectar ¿Sabías?
Lisa: Ah... bueno... está bien
Acercó suavemente el algodón a mis rodillas, no pude evitar soltar un grito de dolor
X: Aguanta un poco
Lisa: No, ya no, arde mucho
La señora no me hizo caso y siguió pasando el algodón suavemente, hasta que decidió que era suficiente
X: Ves, era solo un momento
Lisa: Igual arde
Sacó unas gazas y las puso en mis rodillas con algo de micropor y solo hasta ese momento me sentí un poco mejor
X: Lisato
Lisa: Gracias
X: No hay de qué, por cierto, mi nombre es Romina
Lisa: Mucho... gusto
Sabía que llegaría la pregunta y no sabía qué responderle
Romina: ¿Y tú cómo te llamas?
Lisa: Yo...
Bajé la cabeza
Romina: ¿Qué pasa niña? ¿No me dirás tu nombre?
Lisa: Yo... no... no sé cómo me llamo
Romina: ¿Qué?
Hubo silencio unos segundos
Romina: Esa es una bata de hospital ¿Verdad? Espero no equivocarme
Levanté la mirada hacia ella
Lisa: Sí, yo...
Romina: Espera, te llevaré a mi casa, no has parado de temblar, debes tener frío
Lisa: ¿Qué? No, no
Romina: Por favor, ya te dije y te aseguro que no te haré daño, solo quiero ayudarte
Lo pensé por un momento, solo esperaba que de verdad me ayudara, aún me dolía todo y tenía mucho frío, sin contar el hambre que comenzaba a darme
Lisa: E-está bien, gracias
La señora Romina sonrió amablemente y me ayudó a acomodarme en el asiento, cerró la puerta y subió del otro lado, dándome una chamarra que me puse sobre mí, puso el cinturón y arrancó el auto
El camino fue corto, como 10 o 15 minutos y habíamos llegado a su casa, se veía bastante grande para que la señora viviera sola, lo que me dejó con esa duda ¿Habrá alguien más en la casa? ¿Estaré a salvo?
La señora Romina me vio dudar y se acercó a mi
Romina: Confía niña, vivo sola, no te haré daño
Lisa: Es... es que...
Romina: ¿Prefieres que te lleve a algún lugar? ¿O que llame a la policía?
Lisa: ¡No! No por favor
Romina: Ven, te ayudo
Bajé del auto con su ayuda y caminamos hasta la entrada de la casa, abrió y entramos, era hermosa por fuera y por dentro era mejor, muy hogareña
Caminamos hasta una habitación y me senté en la cama
Romina: Toma un baño mientras traigo algo de ropa para que te cambies
Lisa: Gracias
La señora salió del cuarto y me metí en el baño, sin duda, el agua tibia me ayudará a relajarme
No sé cuánto tiempo tardé en el baño, pero me sentí mucho mejor, en la cama había ropa de hombre, incluso había un bóxer en una bolsa, lo único que no había, era un sujetador/bra, pero igual era lo de menos, la playera me quedaría bien a pesar de eso
Al terminar de cambiarme, abrí la puerta y salí, me llegó un delicioso aroma de comida, mi estómago gruñó, tenía mucha hambre, me acerqué a la cocina
Romina: Veo que te quedó bien la ropa
Lisa: Sí, muchas gracias
Romina: Toma asiento, ya está listo el desayuno
Me quedé en mi lugar, la señora me había ayudado demasiado y no sabía cómo pagárselo
Romina: Vamos niña, no te quedes ahí
Lisa: Es que... ¿Cómo podré pagarle todo lo que ha hecho por mí?
Romina: ¿Quién te dijo que quería que me pagaras?
Lisa: Pero...
Romina: Nada de peros, vamos a desayunar
Puso los platos en la mesa y dos vasos, había una jarra con leche y una con jugo de naranja, tímidamente me senté en una silla y la señora hizo lo mismo
Romina: Provecho
Lisa: Gracias, igualmente
Romina: Gracias
Al terminar de desayunar, intenté recoger los platos
Romina: No es necesario
Lisa: Déjeme ayudar al menos con eso, ha hecho mucho por mí
Romina: De acuerdo
Lavé los trastes y luego nos sentamos en la sala
Romina: ¿Estás lista para contarme qué te pasó?
Lisa: S-sí, yo...
Estaba nerviosa, espero que después de contarle la verdad, no llamara a la policía
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Alice (JenLisa G!P)
FanficHistoria contada en primera persona por Lisa Lisa debe descubrir ¿Quién es? y ¿Por qué está sola?