One-Shot's (Mikannie).

She Wolf (Falling To Pieces) Parte tres.

Nota 1; Buenos días, tardes o noches. ¿Cómo están? Espero muy bien.

Debí subir esto, hace una semana, pero aja. La animación (que salió horrible, por cierto), me dejó con ganas de aventarme de un puente. Pero leer lo que iba a publicar me hizo sentir un poco mejor, por tres cosas; La primera; El equipo se reúne, gente. Historia conoce a Mikasa y hace un desmadre, normalmente es Ymir la que hace esa idiotez. Los chicos ya saben que buscan de Kasa y le dieron una santa putiza a Annie que de alguna manera terminó huyendo a su cuarto, excitada. Leer más abajo. Y hay un momento entre Bertholdt y Annie que me pareció particularmente lindo.

Estamos a una parte de terminar esta historia, toda rara. Disfruten de esto. Muchas gracias por leer. 

(..)

"La emoción de matar que tú sientes, es pecado. Me acuesto con los lobos sola, parece; Pense que era parte de tí..."

Me recosté suavemente en el asiento del auto observando las luces blancas del hospital. Hay un tono frío en esta noche particularmente helada y siento un suave temblor que pasa de mi estómago hasta mi cabeza. La anticipación aumentó a medida que el reloj marcaba los segundos y el tiempo parecía tortuoso. Quisiera decir que mi ansiedad no viene de la felicidad pero estaría mintiendo. Y es que bien, se que he estado últimamente preocupada por los zoquetes pero a final de cuentas, la Mamá de Reiner es tan importante para mí, como lo es su hijo y su novio. El hecho de que esté bien y en pocos minutos que salgan de entre esas puertas de vidrio dejando atrás esa sensación de entumecimiento mezclado con preocupación, crea un alivio dentro de mí. Lo perdí todo cuando mis padres murieron, la parte más importante de mí, que me hacía sentir amor materno, se evaporó por mucho tiempo. Y aunque en menor medida, pude recuperar eso y me estoy aferrando como la mierda al zapato.

—- Me provocas un poco de ansiedad. — Berthold dejó caer su mano en mi hombro para sacudirme suavemente. —- Todo está bien, Reiner me dijo que están firmando los papeles de salida ¿Por qué estás tan tensa?

Suspire y recargue mi rostro en el asiento para mirarlo.

—- No quiero que nada malo pase ¿Ok? .---- Me removí inquieta y tomé su mano entre las mías. —- Vivir todos estos años con ustedes, fue lo mejor que me pudo pasar y siendo sincera. La calma ya duró mucho.

—- Has vivido todos estos años y aún le temes a la muerte. —- Berthold acaricio mis nudillos con el pulgar. —- Las cosas pasan por algo. Nosotros no somos inmortales, así que Reiner y yo vivimos todos los días como si fuera el último. Sí algo pasa Ans, ten por seguro que nosotros no vamos a rendirnos y que tampoco será tú culpa. — Él me dio una mirada comprensiva que se iluminaba vagamente con las luces fuera del auto . —- Se que no pasamos mucho tiempo juntos últimamente, y que tienes a unos chicos que proteger, averiguar quién quiere acabar con la vida de la chica que te gusta...— Me sonroje por sus palabras y él soltó una suave risa. —- y la Universidad te está pasando factura. Te tomas el tiempo para estar con nosotros. Diría que hasta estás comenzando a vivir realmente.

—- ¿Perdón?

Berthold me acarició la cabeza con cariño y soltó un suave resoplido.

—- Tendrás quien sabe cuantos siglos y dios, cada que te veo. Solo veo a una chica de veintidós años intentando desesperadamente no morir, guardar luto a su linaje y conservar lo que sus padres le dejaron. Hace unos años, no hubiera podido captar las emociones en tus ojos, a veces cuestionando sí nuestra amistad era válida y dándome de sapez cuando tus acciones eran el reflejo mismo de tus emociones que tus ojos no podían capturar y me di cuenta que nosotros no somos amigos, somos familia y agradezco tanto eso. El mundo es enorme, has viajado tanto y aun te pones nerviosa con las cosas tan mínimas, como si fueras una niña. Te burlas de esos chicos por ser inmaduros, pero la madurez no viene con la edad, viene de cómo interpretaste lo aprendido...—- Hizo una pausa, como si temiera que me fuera a molestar con sus palabras. —- Y si soy sincero, pareces un poco más sensata desde que conociste a esos chicos, desde que estás enamorada de Mikasa. —- Trague saliva. —- Porque hay un brillo en tus ojos que antes no podía ver, que se ilumina cada día más, y estoy seguro de que ya averiguaste que la vida tiene sentido. Si esta es tu última vida, si este es el final del juego. Vamos a jugarlo juntos y si perdemos, que así sea y si ganamos, iniciaremos otro juego hasta que nuestros pulmones fallen o en tu caso, hasta que la muerte te alcance.