Dos

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Al nada más entrar en el restaurant, me encuentro con el amigo de mi padre y siento que me sonrojo hasta las orejas, eso no ha cambiado a pesar de todo el tiempo que ha pasado.

~Hwang Hyunjin hijo del socio y mejor amigo de mi padre, vivía en el extranjero, por eso nunca en mi vida lo había visto, pero volvió al país debido a la precaria salud de su padre, y ahora se había mudado a Suwut, porque junto a mi padre iban a comprar algunas otras propiedades para seguir ampliando el negocio.~

Hacía poco más de tres meses que lo conocí, y fue una situación muy incómoda. Había llegado a Suwut y estaba disfrutando de un caliente y furtivo encuentro con Minho en la bodega del restaurant, cuando fuimos descubiertos por el imponente y desconocido hombre.

Luego de las presentaciones del caso, me sentí demasiado avergonzado y por algunas semanas, ni siquiera podía mirarlo a la cara.

Pero obviamente sentía las miradas que el atractivo hombre me daba. Había descubierto mis gustos y desde entonces cada vez que veía un hombre mayor y me imaginaba que podría estar follándome en el baño o en la bodega del restaurante, volteaba a mirar al amigo de mi padre y éste, estaba observándome como si estuviera metiéndose en mi mente y supiera exactamente lo que estaba pensando.

Diablos, no había visto a Minho y no me había enrollado con nadie desde que me descubrió y seguía poniéndome más rojo que un tomate, cada vez que me lo encontraba cuando mi padre visitaba el restaurante y él lo acompañaba para que hablaran de negocios. Y es que al parecer no solo me avergonzaba porque Hyunjin supiera mi pequeño y sucio secreto, sino que el hombre era demasiado atractivo, a sus treinta y cuatro años, poseía un rostro de rasgos suaves y un cuerpo musculoso, cintura relativamente estrecha, un torso en forma de V y hombros anchos, siempre iba vestido de manera formal, con camisa y saco, aunque raras veces lo había visto con corbata. El hecho es que me sorprendía a mí mismo, mirándolo a escondidas, prácticamente babeando por él, e incluso había tenido que salir corriendo al baño, para masturbarme a causa suya.

El hombre me tenía mal.

Un día, mientras almorzábamos, Hyunjin nos dijo que había tenido problemas con los aparatos electrónicos de su departamento, debido a los voltajes, había hecho volar algunos de ellos, como la secadora y la cafetera, e incluso pensaba que la consola de videojuegos se había dañado y no encontraba quien pudiera revisarla, a lo que mi padre sugirió que yo le echara un vistazo.
Claro, los ojos de Hyunjin brillaron en el acto y pude ver como su ceja se levantaba más de la cuenta mientras me observaba y hacía un barrido de todo mi cuerpo. En ese momento tragué grueso y me sentí desnudo frente a sus ojos —no es que antes no hubiera sucedido, porque sí, en varias oportunidades lo había pillado desnudándome con la mirada—. Así que, ese mismo día, cuando mi padre se fue, Hwang Hyunjin me llevó a su departamento. Y sip, me dejé follar por él.

El amigo de mi padre ❤️‍🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora