31 de Octubre
Corea del Sur.Había algo que Lee won odiaba, y mucho.
Que su padre fuera el jefe de una empresa.
Y no hay que malinterprarlo. Agradecía poder tener un padre con buenas oportunidades económicas que le pudiera dar una buena vida en la que no tuviera que preocuparse más que por la escuela.
Sin embargo, odiaba tener que asistir a eventos que fortalecía los lazos de la empresa de su padre con la de otras empresas igual o más importantes.
Aún peor, en halloween.
Él podría estar paseando por las calles de itaewon u otra cosa más divertida.
—¿Y yo tengo que ir?— preguntó por quinta vez en el día, esperanzado de recibir una respuesta que lo librara de asistir a dicho evento.
—Sí, Lee, como te lo dije esta mañana te lo repito de nuevo: Si tienes que ir— Mikhail revolvió los cabellos de su hijo, sonriendo.
El chico frunció el ceño y se cruzó de brazos.
—¿Qué tiene de malo? Es una fiesta de disfraces, se escucha divertido— Suyeon sonrió con emoción mientras se acomodaba los aretes frente al espejo.
Lee asintió sin estar convencido aún.
Miró la máscara que se suponía que debía usar; una máscara de zorro que sólo cubriría la mitad de su rostro.
"¿Se supone que estos son los disfraces de la gente rica?" Pensó, soltando un suspiro.
—¡Nos vamos!— el Sr. Lomonosov aplaudió con notable emoción y se encaminó a el auto que ya los estaba esperando.
"Será una noche muy larga"
Lee detestaba que cuando su padre le presentaba su familia a los demás empresarios, algunos con una hija en su familia insinuaran un matrimonio.
¿Por qué? Él solo tiene 15 años, no a terminado ni siquiera la preparatoria.
—Es un muchachito muy guapo, seguro conseguirá una mujer muy linda— la mujer de avanzada edad sonrió en su dirección—. ¿Qué edad tienes, querido?
De nuevo la misma pregunta. Ellos preguntaban su edad, el les respondía y ellos se sacaban una hermana, hija, sobrina, nieta o lo que fuera de la manga, solo para decirle que quedarían muy lindos juntos.
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◤𝑨 𝑺𝒕𝒐𝒓𝒎 𝑻𝒉𝒂𝒕 𝑻𝒖𝒓𝒏𝒆𝒅 𝑰𝒏𝒕𝒐 𝑳𝒊𝒈𝒉𝒕 𝑹𝒂𝒊𝒏◢
FanfictionLee Won era un adolescente coreano que, en su búsqueda por convertirse en un gran abogado, tejía su vida con hilos de esfuerzo y dedicación. Su existencia transcurría en la rutina de lo cotidiano, hasta que un día, aparentemente insignificante, un m...