Khao.
Tenía miles y millones de sentimientos encontrados. Podia recordar con claridad todos los momentos vividos. Podia escuchar la risa de First tan clara, su voz, su aroma tan peculiar. El tacto suave de sus manos, su mirada fría cuando cometía algún error, la manera en la que fruncía el ceño cuando se concentraba.
Podia recordarlo todo.
Pero solamente eran eso. Recuerdos.
Ser consciente de que nunca más volverás a ver a una persona es un sentimiento terrible.
Destrozado, herido y muy arrepentido me acerque a la cama donde yacía First.
Tome delicadamente su mano, estaba fría, muy fría, coloque mi mano encima de la suya para calentarla.
Tenía que dejarlo ir, todos sabíamos que no era vida depender de muchos aparatos para seguir "vivo".
Con un nudo en la garganta trate de encontrar las palabras para despedirme del que habia sido el gran amor de mi vida.
—Se que ambos lamentamos muchas cosas First. Yo personalmente lamento haberme ido. Pero estaba tan cansado de no tenerte por completo, que simplemente me deje llevar por mis impulsos y tome la mejor decisión para mí, me dolió en el alma dejarte atrás, y ahora entiendo que jamás debí de haberlo hecho. Tenía que ser yo quien estuviera a tu lado, cuidándote, apoyándote, tratando de animarte. Perdóname First.
Mis ojos se llenaron de lágrimas y comenzaron a correr por mis mejillas.
Estaba muriendo por dentro.
No quería soltarlo nunca.
Me acerque lentamente a First, admire su bello rostro por algunos segundos para despues depositar un tierno beso en su frente.
Ese sentimiento de dolor infinito me invadió por completo.
El corazón me dolía de tal manera que sentia que se hacía miles de pedazos.
Era un dolor que no podia compararlo con algo que se le parecia.
Tenía que decirle adiós.
Tenía que dejarlo ir. Pero no podia hacerlo.
Desde un principio tenía claro que en algún momento debía decirle adiós, pero nunca pensé que ese momento llegaría tan pronto.
Mi egoísta yo quería aferrarse a First por siempre y para siempre.
Ambos habíamos cometido muchos errores, habíamos tomado caminos erróneos y todas esas decisiones nos habían llevado a donde estábamos ahora.
Aun no terminaba de entender el por qué First nunca me habia confesado lo que padecía, no comprendía el por qué lo habia ocultado todo ese tiempo. ¿Por qué? ¿Por qué callarlo? ¿Por qué sufrirlo en silencio? Tenía tantas preguntas y nadie podia respondérmelas.
—Perdóname First.
Era lo único que podia decir en ese momento, el pensamiento de perdón invadía todo mi ser.
—Te amo.
Las palabras que nunca dije con claridad. Lo que calle por temor a arruinarlo todo ahora no significaban nada. El no podia escucharla.
—Te amo como nunca habia amado a nadie. Te ame a cada momento. Te espere. Te anhele. ¿Por qué no me dejaste estar contigo First? Las cosas hubieran sido tan fáciles.
Me acerque a la mano de First y le dio un pequeño beso.
Lleve su mano hacia mi mejilla, era la última vez que podría sentir su tacto, su piel tocando la mía.
