La noche era más oscura de lo normal, como si la luz de la luna no estuviera ahí. Sinceramente nunca le había gustado la oscuridad, muchas de las cosas malas que le habían pasado eran en lugares que tenían muy poca luz. Aunque ahora no podía centrarse en eso.
-Ah, ah, ah-a la luz de una fogata, una mujer y un joven peliverde se encontraban haciendo el acto sexual.
La mujer gemía con una cara de completa lujuria, el chico apretaba los dientes concentrado en acabar con aquella mujer.
-AAAAAAAH...SÍ-dijo entre gemidos la mujer a la vez que se empezaba a transformar en una criatura infernal. Su boca se hizo más grande y ancha, en la cual ahora sobresalían unos enormes y filosos dientes, también de esta salía una gran y viscosa lengua. Su pelo había sido remplazado por tentáculos y cuernos que se agitaban muy hiperactivamente, el tamaño de la mujer había aumentado, llegando a ser más grande que el chico, su tono cambió a uno verdoso. A pesar de toda esta transformación, al peliverde poco le importo eso, él cual seguía embistiendo a lo que antes era una mujer...estaba decidido a terminar su morbosa tarea.
-¡TE TENGO!-gritó esa aberración mientras tomaba al chico por la cintura.
-¡TE IRAS AL INFIERNO CON UNA PROBADA DEL PARAÍSO!-le siguió gritando ese monstruo a la vez que le lamía el rostro.
El chico le respondió agarrándola del rostro con una mano, y la otra cual parecía ser metálica, la metió en la boca de esa cosa (que huevos)
-Parece que soy yo el que te tiene-habló por fin el peliverde, quien la miraba con una sonrisa que no se le lograba ver completa, debido a la gran oscuridad que los rodeaba.
El mirar la luna siempre lo llenaba de paz, le hacía olvidar por todo lo que está pasando. Volteó a ver incómodo el cadáver de la "mujer" que había asesinado, la cual tenía un gran agujero que le traspasaba la boca. Aunque pareciera lo contrario, no había disfrutado nada de esa sesión, por lo cual decidió mejor retirarse y seguir con su camino.
El sol había salido al mismo tiempo que nuestro particular amigo llegaba a un pueblo cercano. Era mirado por todos ya qué traía puesto una vestimenta peculiar, llevaba una capa con capucha que le cubría casi todo el cuerpo, unas botas marrones, un pantalón negro, una pechera y camiseta del mismo color. También traía consigo un porta armas que le llegaba de la cintura para arriba, en la parte del pecho tenía varios cuchillos pequeños, en la cintura llevaba un cuchillo más grande que los otros, y dos bolsas donde seguramente guardaba más armas. También a sus espaldas traía consigo algo que parecía ser una espada más grande de lo normal.
Otra cosa que les llamaba la atención del chico eran dos cicatrices en la parte del ojo izquierdo de este, una en horizontal y otra en vertical , que ambas formaban una cruz la cual no se veía debido al ojo abierto.
Él simplemente ignoró todas las miradas y siguió con su camino. En un momento al lado suya pasó un pickup con carpa que se dirigía afuera del pueblo, nuestro pelo brócoli volteó a ver el vehículo, y en la parte de la carpa iban varias mujeres y niños...pero no le dió importancia.
Nos encontramos ahora en un bar de mal aspecto, donde todo transcurría con normalidad...a excepción de algo.
-¡AH!-gritó una pequeña hadita, la cual estaba amarrada con una soga y su grito fue porque un cuchillo casi la atraviesa. Ese cuchillo fue lanzado por un sujeto acompañado de otros, que se divertían con el sufrimiento de la pobre criatura.
-Que mal, fallaste.
-¡Y como quieres que le atine si no se deja de mover!
En una mesa un poco alejada del alboroto, dos clientes hablaban por lo bajo.
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Deku en Chainsaw man
De Todo¿Es el destino del hombre retorcerse y esperar a que alguien más lo saque de la oscuridad? ¿O está destinado el hombre a hundirse en la desesperanza mientras todo se derrumba ante él? El hombre toma la espada para proteger la pequeña herida en su co...
