O9.

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El lugar era enorme, toda una isla hermosa y un hotel espectacular, la playa justo al frente, pasillos largos y hermosos y una vegetación extraordinaria. Jake jamás se sintió tan maravillado con todo lo que veía, él nunca había ido a Hawái, así que fuera de lo que era una mentira trataría de disfrutar un poco del lugar.

—¡Genial! Me robaron, tenemos habitaciones— dijo el pelinegro.

—¿Quién quiere ir a nadar a la playa? — preguntó Jungwon a los dos niños, quienes en seguida gritaron emocionados mientras corrían a sus habitaciones para cambiarse.

—¿Quién quiere alcoholizarse? — preguntó el alfa, Jake y Gyuvin respondieron fingiendo ánimos mientras gritaban un "yo".

Ambos niños corrían de un lado a otro por la arena, persiguiéndose entre ellos y soltando carcajadas, mientras tanto Jake estaba sentado en un camastro vigilando a ambos niños. La verdad es que había olvidado el porqué odiaba la playa, la arena pegándose a tu cuerpo, el agua salada tan incómoda y la manera en la que dejaba tan tieso el cabello, además del insoportable calor.

—Para la próxima hay que pedirle a Ni-Ki que pida ir a Canadá— dijo observando como ahora Jungwon jugaba felizmente con sus hijos.

—Ja ja, gracias por el apoyo cuando dijo que quería venir a Hawái— respondió el mayor.

—Sigo sin comprender porque no le dijiste la verdad— habló Gyuvin. —Tan solo mira todo esto, has gastado tanto dinero en el viaje, cuando en realidad te salía más barato asumir que no podías superar a Sunoo.

—Eso es mil veces peor.

Jake lanzó una risita al escuchar aquello, siempre vio a Heeseung sufrir por Sunoo, a veces en el consultorio sacaban el tema a flote y el mayor terminaba con los ojos cristalizados y desprendiendo un aroma a tristeza muy potente.

—A veces me preguntó, ¿Qué habrá sido de ese tipo?

—Cállate, no lo menciones, estamos de vacaciones en familia— mencionó el alfa mientras se alejaba.

—Sí, te robaste a la familia de alguien— respondió.

El tiempo transcurrió más largo de lo normal y a lo que no estaban acostumbrados, pero fue suficiente para ellos cuando cada quien estuvo en su habitación.

—¿Y en donde dormiré yo? — Gyuvin preguntó, el de cabellos grisáceos se le acercó con unas cuantas mantas en manos y un cojín.

—En el baño— respondió, mientras le entregaba todo.

—¡Oye! Es imposible que quepa ahí— se quejó rápidamente.

—Pues mis hijos dormirán aquí conmigo, tú en el baño, he dicho— volvió a protestar.

El castaño bufó haciendo un leve puchero, Jake solía caerle muy bien, era tierno y cariñoso muy pocas veces, eso era lo que más le agradaba, pero otras veces Jake sobrepasaba la locura, era cruel y despiadado. Y solía comprenderlo, después de todo era un padre soltero que tenía que aprender a ganarse todo por sus propios méritos.

Aunque había algo en toda esa situación que no dejaba tranquilo a Gyuvin.

Jake parecía cómodo, pero también muy abrumado con toda la pequeña mentira que llevaban a cabo con Heeseung, y él sabía porqué.

—¿Puedo preguntar algo? — dijo desde el baño, acomodando las mantas en la gran tina.

—Si.

—¿No te duele?

—Gyuvin, si vas a salir con una tontería mejor cierra la boca— amenazó el omega.

El castaño rió con gracia, definitivamente Jake lo conocía bien a pesar de que no se llevaban del todo. Negó lentamente mientras salía del baño para poder ver al omega.

—No, no es eso— respondió —Me refiero a que ¿No sientes siquiera una pizca de tristeza por todo lo que estás haciendo por Heeseung?

No entendía en absoluto lo que aquel chico quería decirle, ¿Por qué debería sentirse triste por estarlo ayudando?

—Digo, yo no me sentiría bien sabiendo que estoy fingiendo ser el ex esposo del alfa que me gusta, para hacer que se quede con otro omega. — terminó de decir.

Jake desvió la mirada del menor en cuanto escuchó aquello, imposible.

—¿De qué carajo hablas? — preguntó haciéndose el indiferente mientras fingía acomodar su cama para dormir, los niños no estaban en la habitación con él así que no podían escuchar su discusión.

—Oh Jake— habló Gyuvin. —No es tan difícil adivinarlo, ¿Sabes? Llevas trabajando con Heeseung años, se conocen perfectamente bien, él conoce a tus hijos y tú conoces su más grande dolor— se acercó poco a poco al mayor. —Y yo puedo ver perfectamente que él te gusta.

— Estás loco, Lee Gyuvin.

—Deberías decírselo, antes de que sea demasiado tarde. — dijo para después sentarse en la cama.

—¡Ah! Claro, claro, se lo digo ¿Y luego qué? — preguntó alterado y un poco abrumado. —No puedo simplemente verlo y decirle: "Oye, Heeseung, fíjate que me he sentido atraído por ti desde hace años y quiero que dejes a tu omega para formar una familia conmigo" — habló rápidamente. —¡Eso es estúpido!

Jake guardó silencio por unos largos minutos, sintiendo un nudo en su garganta, nunca se imaginó que diría algo como eso, ni siquiera se imaginó que Gyuvin se daría cuenta.

—N-no, no podría decirle eso cuando se nota mucho que está enamorado de Jungwon— respondió un poco más tranquilo.

Gyuvin lo observó durante varios segundos, dándose cuenta de que realmente Jake había guardado aquel sentimiento durante mucho tiempo, sin dejarlo salir para que nadie pudiera verlo. Se sintió mal por aquel omega, porque no podía imaginar la fuerza tan grande que Jake tenía que hacer para que todo eso no le afectará.

Incluso pudo ver perfectamente como se tragaba aquel nudo tan amargo en su garganta, para después mirarlo y decir.

—Heeseung está enamorado de Jungwon, él tiene a su omega y yo tengo a mis hijos, eso es todo lo que importa.

¡no es mi alfa! 𐙚 heejakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora