Perro.

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Soy la extensión de una carne que no pertenece, de una piel que me es desconocida, de un vientre que aún no soy capaz de recordar.

Mi cuerpo, adolorido y contracturado, extremadamente pesado, vive a través de expectativas; vivo a través de palabras que no he podido aprender a pronunciar, de memorias que no sé diferenciar de mi realidad.

Acostumbrado he estado a comer directamente de un plato que no se colocó para mí sobre la mesa, a levantar mi pata y rodar sobre mi espalda sí es lo que requieren.

Estoy dispuesto a correr hacia ti si es mi nombre el que sale de tu boca, aún si después de murmurarlo, decides olvidar que estuve esperando desesperado por tu llamado.

Puedo arrastrar tus desgracias en mi espalda, aún si estás cada vez me pesan más y me hacen difícil avanzar.

Soy el remanente de tus lágrimas, de lo que no pudiste crear y de lo que aún añoras cada noche que te recuestas a mi lado.

Respiras a través de mis pulmones, corres con mis piernas y lates con mi corazón.

Poeta Perdido.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora