Athos, Un Dios Distinto

Capitulo 18: Vuelta Atras

-Era una nueva mañana, los rayos del sol alumbraban, unas pocas aves cantaban, todo parecía estar tranquilo... con nuestro prota, el lentamente estaba despertando de su sueño, unos pocos rayos de sol le golpeaban la cara mientras comenzaba a sentir el peso de su hermana sobre el-

Athos: "hm..."

-Se quejaría levemente el Causquesio, al ver a su hermana sobre el no quiso despertarla, así que cuidadosamente, movió a su hermana hacia un costado de la cama, una vez hecho eso, Athos se levantaría de la cama, el ojiazul se pondría a revisar la habitación, y así encontrar su ropa y armas, este encontraría su "Polera" y sin dudarlo se la pondria, pero esta tenía una parte deztrosada cosa que dejaba expuesto su estomsgo, a lo cual, Athos solo usaría unas ventas café que habían en una mesa y con ellas cubriria esa parte, y parte del hombro hasta el antebrazo-

-Athos comenzaría a buscar sus armas, encontrando las garras del Olimpo en una mesa, el iría a agarrarlas, pero en cuanto las toco, estas se moldearon con su muñeca, igual que paso contra la Hidra, Athos no se vería tan sorprendido ahora, luego, el Causquesio comenzaría a buscar su espada, no la encontraría en la habitación así que saldría de ella, la sala de la casa sería algo normal, no habían mesas ni sillas, a lo cual Myra habría encontrado la casa en medio de la nada, Athos vería su espada cerca de una fogata ya apagada, Athos agarraria su espada y la colocaría en su espalda-

Athos: "hm... Myra hiso bastante por mi..."

-Diria Athos mientras miraba a su alrededor-

Athos: "Creo que se le tengo que devolver..."

-Diria Athos para después caminar a la puerta y abrirla para salir-

-En cuanto salió, el tiempo de inmediato se detuvo, Athos vio como una flecha se detuvo a centímetros de su rostro, junto a varias más-

Athos: "¿Que demonios...?"

-Athos al levantar la mirada, observarla a varias cazadoras de Artemisa suspendidas en el tiempo congelado, apuntando sus arcos a la puerta por donde salió Athos-

Athos: "Hm... parece que ya no piensa en dejarnos o dejarme tranquilo..."

-Diria Athos, para después mover las flechas, redireccionandolas hacia las Cazadoras, y en caso de que no tuvieran impulso, las golpearia, viendo como una corriente de aire se abrió al paso de su puño y se detuvo cuando golpeó la flecha, le dio a entender a Athos que su fuerza era mucho mayor en el tiempo suspendido, Athos golpearia cada una de las flechas, pero aún así el tiempo seguiría quieto, al mirar a los árboles se dio cuenta de que algunas cazadoras con espadas aguardaban en caso de que las arqueros fallarán, entonces, el Causquesio se movió para estar detrás de todas, aun así el tiempo seguiría suspendido-

Athos: "Carajo, ¿Como cuantas hay?"

-Una vez Athos dijo eso, se le ocurrió una idea, este con las garras del Olimpo comenzaría a cortar de todas formas los árboles, estos no se verían afectados en el tiempo suspendido, pero si el plan de Athos funcionaba, el y su hermana estarían a salvo-