La Nina... {Cochi y Luisina}

capitulo 18

Nueva aliada?

Narra
Luisina

Al entrar a la habitación mire a Josefina, estaba desvestida, y de espaldas un pibe que seguramente se estaba poniendo un condón. La mire súper enojada y ella automáticamente se tapo con la manta.

-que pas- -el pibe no termino de hablar que me le lanze arriba, lo di vuelta y comenze a pegarle piñas en la cara sin miedo, intento pararme pero la china se acercó y le sostuvo las manos

-¡Para Nina! ¡Para!- decía Jose desde la cama vistiéndose pero no le di importancia y le seguí pegando

-hijo de puta! Es una pendeja, una ¡Niña!- ya tenía las manos llenas de sangre que provenía de su cara, estaba inconsciente

-nina! Me iba a pagar! Necesitaba la plata!- me di vuelta y la mire a la Jose

-te lo encargo china- me miro con una sonrisa, yo me acerque a la Jose y la saqué de la habitación tomándola del brazo

Cuando seré la puerta de adentro se escucharon dos disparos

-ahora sos prostituta?- le dije intentando calmarme, pero no respondió -te estoy hablando Josefina! Sos o no sos-

-si! Soy prostituta, una puta del barrio- dijo enojada entrando a lo que era antes mí pieza

-ya tomas todas tus mierdas y salís de acá, ¡Ya!- me miró rencorosa y tomo una bolsa de consorcio en la que supongo trajo sus cosas y comenzó a guardar todo

-no hacía falta matarlo..- dijo en un susurro que si escuché

-si, si hacía falta, si yo quiero voy y le disparó a el, a la Fátima, a cualquiera no te voy a pedir permiso- salí de su pieza cerrando la puerta y en eso la china me miró

-que hacemos con la concheta- sabía que si fuera por la china le pega un tiro, por mí cero problema pero era la madre de Josefina y después tendría que aguantar el llanto

-dejala, cuando se vuelva a llevar a la niña la damos vuelta sin muchas palabras- la puerta de al lado se abrió y salió José -lista?-

Me ignoro y comenzó a caminar a la puerta llevando la bolsa de consorcio en sus manos, mire de reojo a la china y ella solo se rió yo también era chistoso verla, la bolsa era más grande que ella

-dejen de reírse pelotudas- dijo abriendo la puerta de la casa

-pelotuda tu vieja- le dije yo, ella solo me miró mal y salió con nosotras atrás.

•••

Íbamos caminando tranquilas hasta llegar a la casa de la china, entramos y el padre de la china estaba acostado, seguramente se avía cansado de más. Entramos a su pieza y comenzamos a acomodar las cosas de jose a como estaban antes.

Estaba más tranquila, ahora Jose estaba conmigo y la podría vigilar de que no se mande ninguna cagada.

-y el uru?- jose levanto los hombros restándole importancia -ya no se hablan?-

-no Nina, ya no- parecía arta de que le hable -ni siquiera me preguntas como me siento con lo que acabas de hacer y me preguntas por ese pelotudo-

-bueno perdón, solo pensé que si se hablaban aparte el uru es buen pibe- dije guardando parte de la ropa