┃Cuando Jisung y Minho están más que desesperados por sexo, no tienen más opción que darse placer entre ellos mismos. Iniciando una busqueda de nuevos placeres, en clases de sexo.
❝ ─Podremos iniciar con unas clases de sexo. ❞
↻Fic +18
↻Minho top...
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Había pasado exactamente una semana desde que Minho le propuso su idea a Jisung, y no había tenido una respuesta exacta.
Han no sabía que responder. La respuesta en si era fácil, tenía que decir solamente 'Si' o 'No', pero no estaba seguro de que decir. Por una parte tenía curiosidad de que es lo que su amigo tenía planeado, y por otra parte se sentía aterrado y avergonzado.
Ambos habían dado un gran paso solo con besarse y masturbarse literalmente juntos. Tener esas 'Clases de sexo', como Minho decía, implicaba hacer muchas más cosas, las cuales Jisung tenía vergüenza de hacer con su mejor amigo.
Lo que sí, era que como ya habían experimentado besarse y un nuevo método para masturbarse, ya no era tan vergonzoso hacerlo. Quizás si era algo raro, pero eso no impedía nada.
Claro, después de ese día, las cosas cambiaron. Ahora ambos se reunían en casa de alguno y repetían lo mismo que aquella vez. Les había gustado tanto que no pudieron parar, era muchísimo más placentero y ninguno tenía problema en hacerlo.
Jisung no tenía problema en que esa fuera su nueva manera para pajearse, se sentía mejor que solo usar su mano. Podría usar ese método hasta cansarse. En cambio Minho... le gustaba, sí, pero quería algo más. Quería experimentar más cosas, descubrir nuevos placeres sin llegar al sexo. Aunque claro, si se le presentaba una oportunidad para tener sexo la tendría, no con Jisung, eso si.
Por eso mismo, Minho estaba ansioso por saber la respuesta de su amigo. No quería presionarlo, no le había vuelto a preguntar, y eso le hacía pensar que se le había olvidado.
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Habían terminado por segunda vez, la mano de Jisung estaba manchada del semen de ambos. Se dio la vuelta para poder tomar un pañuelo y limpiarse los fluidos de la mano.
─ Creo... Creo que es mejor hacerlo acostados. ─ articuló entre cortos jadeos.
En la semana, era la primera vez que hacían su "rutina de masturbación" acostados. Les era más fácil relajarse y no se cansaban de estar sentados.
