Destino Destrozado

Capítulo 22 - Olvidado en el ayer.

Había pasado un día y todavía no había noticias sobre el veredicto.

No es que el mundo estuviera al tanto del resultado inmediato a pesar de la persecución que habían exagerado en medio de la noche. Con el tiempo, otras noticias barrerían lo sucedido bajo la alfombra, aunque la Liga de Villanos fue una de las palabras de moda de los medios para provocar un frenesí. Sin embargo, por algún milagro, tal vez por intervención divina, su nombre no se había hecho público: sólo el alias que había utilizado en la Liga.

Japón conocía a "Deku" sólo como un formidable joven villano con un trasfondo oscuro. No tenían idea de que era Izuku Midoriya, una persona desaparecida que el sistema simplemente olvidó y en la que la sociedad no pensó mucho. Quizás alguien dentro de la ley lo mantenía en secreto o la policía era tan densa como para no establecer una conexión entre los dos a pesar de las características y la edad similares.

Si alguien del pasado se atreviera a identificarlo, a delatar quién era cuando a ellos les importaba un comino excepto recibir una palmadita en la espalda por informar al público, él sería el primero en...

"Ah, Bakugou-kun, ¿verdad?"

Katsuki levantó la vista desde donde estaba con la espalda contra la pared, sacado de sus pensamientos. Con una sudadera con capucha puesta sobre su cabeza y las manos metidas en el bolsillo delantero de su sudadera, no esperaba ser reconocido. Todos tenían mejores cosas que hacer en la comisaría; incluso si lo notaban e intentaban redirigirlo, todo lo que tenía que hacer era mostrar su licencia. Era domingo y nadie realmente se preguntaba por qué un estudiante héroe acechaba en los pasillos traseros sin compañía y con ropa informal.

"¿Sí?" Su voz era tranquila, con un atisbo de cansancio mientras miraba escrutadoramente a la persona que se dirigía a él.

"Soy Aino Shinsuke." La mujer de cabello corto violeta y una visera oscura que cubría sus ojos sonrió, profesional pero con una genuina sensación de calma y calidez. "Tenía la sensación de que estarías cerca".

"¿Eres policía?" Katsuki mantuvo su tono civilizado pero continuó con su mirada evaluadora, observando su apariencia y comportamiento. Ella sabía quién era él, posiblemente por numerosos medios, aunque era revelador que se dirigiera a él por su nombre en lugar de su apodo de Héroe, incluso si todavía estaba en entrenamiento.

"No, solo soy un consultor. Actualmente soy parte del caso Midoriya".

Se retorció levemente, reprimiendo la frustración y la culpa que sentía. No se trataba de él mismo, sin importar sus vínculos y su participación en lo que había ocurrido, por las repercusiones que vendrían después. En este momento el que estaba en el banquillo era...

"¿Hay algo que quieras? ¿Ayuda? Esto no parece un enfoque oficial".

"No, aunque creo que puedo ayudarte." Ella le tendió una tarjeta de presentación y él la tomó y la hojeó. Aino Shinsuke, psiquiatra. Consejero Personal, Especialista en Memoria. "Espero que ustedes dos, en realidad. Me gustaría estar en contacto si están dispuestos".

"¿Qué van a hacer con él?" Preguntó después de un momento, agarrando la tarjeta mientras su otra mano estaba firmemente acurrucada en el bolsillo de su sudadera con capucha. Dejar que el material absorbiera su sudor ayudó a prevenir pequeñas explosiones accidentales, aunque su control era impresionante en comparación con cuando era un niño reactivo. Necesitaba mejorar, mantenerlo bajo control.

"Dado que es una investigación en curso, no puedo decirles eso". Shinsuke le dio una sonrisa triste y comprensiva. "Pero todavía están deliberando sobre qué hacer. No puedo decir nada más ya que es confidencial y ambos estaríamos en problemas".