No todo el mundo tiene que quererme
No todo el mundo tiene que quererme o sentirse bien conmigo. Me encanta gustar y ser querido, pero si a laguien no le agrado, me sentiré igual de bien y seguiré contento conmigo mismo. No puedo cambiar a la gente para gustarle, como los demás no pueden cambiarme para que a mi me gusten ellos. No necesito la aprovación continua.