Capitulo n°21

166 15 0
                                    

-Por lo que veo en las cámaras, viniste con Julián, y también por lo que vi en twitter, estas muy enamorada de él- Estaba más estúpida de lo que era antes.

-Y a vos que te importa con quien vine, es mi primo, y tu primo, por si no te acordas. Y obviamente que lo amo, es el único que me sacó de toda la basura que estaba viviendo, el único que me hizo sacar sonrisas, el único que a pesar de todo lo que pasó, siguió a mi lado. No como otras, que se hacen llamar hermanas, y ni se preocupan si están bien o mal.

-¿En dónde estás viviendo? Podes venir a vivir con mis papas y yo, si queres- Cuando me dijo eso Tiziana, pensé que estaba jodiendo.

-Primero, prefiero vivir en la calle, antes que vivir con vos y tu familia.
Segundo, estoy viviendo con Julián en un departamento, así que no te preocupes tanto por mí.

-Bueno, perdón. ¿A qué venías a la fábrica?

-Vengo cuando quiero- Me rio- Venía a buscar trabajo sinceramente, pero cuando me enteré que estas vos, no me dieron más ganas de trabajar, la verdad.

-No seas chiquilina Oriana, podes trabajar en diferente área, y no me ves, no armes líos.

-Me parece cualquiera trabajar como una empleada más- Dije desafiándola

-Si sos una administradora más, me vas a ver todos los santos días.

-Bueno, yendo a lo serio, voy a ser una administradora más, no me importa verte todo los días, es lo que me merezco.

-Te mereces esto y mucho más- Me vino una nostalgia tremenda cuando me dijo eso, pero no puedo perdonarla después de tanto.

-Gracias.

-Sos una nueva administradora, podes asignar vos donde va a trabajar Juli- Me dijo Tiziana.

-Julián para vos, y si, va a trabajar conmigo.

-Perdón, Julián. En el pasillo 4 hay una oficina, esa es tuya. Fue la de mamá toda la vida, y está intacta desde el último día. Siempre la guardamos para el día que quieras volver. Es tuya y de Julián.

-Gracias Tiziana, por todo, por darme esta oportunidad, y por dejarme esa gran oficina, es muy importante para mí. Aunque te tenga un odio profundamente, gracias, enserio.

-De nada, creo que después de tantos pleitos, te mereces, y entiendo tu enojo a veces. No debió haber sido fácil para vos, por eso te perdono, y también te pido perdón.

No dije más nada, y me fui directo a la oficina de mamá. Sin mentir, cuando entré había olor a ella, tenía un aroma particular.
Entré, abrí las ventanas, empecé a abrir cajones, a mirar los estantes, y encontré una cajita, muy linda, toda decorada. Adentro tenía una carta, y decía "Para: Ori", mis ojos se llenaron de lágrimas, al recordar su letra, y tenía miedo de abrirla.
Entonces llamé a Julián.

-Juli, vení por favor al pasillo 4, a la oficina donde dice "Catherine Fulop"

-¿Te paso algo gorda? Ya estoy yendo.

-Nono, nada malo, pero vení.

Corté la llamada, y me puse en un rincón, esperándolo a Julián.
A los 5 minutos, entró rápido y agitado como que si corrió todo el camino.

-¿Qué paso amor? ¿Por qué lloras?- Me dijo limpiándome las lágrimas.

-Revisando la oficina de mamá, encontré una cajita, que tenía esta carta, pero no sé, tengo miedo de abrirla, dice que es para mí.

-¿Queres que la lea por vos?- Lo miro, y le hago que si con la cabeza.

"Bueno ori, esta carta supongo que la vas a ver muchos años después de mi muerte. Sé que no va a ser la mejor decisión que voy a tomar. Las voy a dejar en un reformatorio de confianza. Aunque sos muy chiquita, te dejo a cargo de tu hermanita, yo sé que van a poder salir adelante, son fuertes. El motivo de mi muerte, va a ser la violencia que recibo de tu papá, de esa basura. No puedo vivir más con esto Oriana, yo no sé cómo más manejarlo, y aunque esté yendo a psicólogos, y de más, no puedo. Me siento perdida, necesito terminar con todo esto. Te amo a vos, a tu hermana. A un futuro espero que puedas seguir tu vida como una chica normal, y que cumplas todos tus sueños. Que conozcas al hombre ideal, que te haga feliz, y nunca te dejes pisotear, ¿Si? Cuidate muchísimo, sos fuerte, peleá y luchá por todo en la vida. No te quedes con los brazos cruzados.
Te amo con mi vida entera, esto es por ustedes, cuídense mucho.

Con amor, mami."

Me quedé helada, Julián me abrazo con fuerza, yo no paré de llorar en ningún momento, osea que todo lo que pasó fue por culpa de ese hijo de puta. No sé cómo sigue vivo, es una mierda de persona.

-Julian, ¿Vos entendés todo lo que pasó?- Lo miro y él también estaba llorando. Me pone tan mal verlo así.

-Mi amor, no estes mal, pensá que tú mama hizo todo para dejarles un futuro mejor, y no seguir sufriendo. Vos no sigas sufriendo. Y no estás sola, estoy yo ¿Si?, por siempre amor, te amo.

-Yo también te amo y gracias por todo. Me da vergüenza tener su apellido, me da repugnancia más que nada. Que gente tan basura, pegarle a una mujer, no entiendo cómo pudo haber hecho eso.

-Vení, levántate, y sonreíme, no estes triste amor, me pones muy mal a mí.

Le sonreí forzadamente y le dije- Te amo.

-Yo también te amo, tenes que acomodar y limpiar un poco acá, yo te ayudo si queres.

-Ahora vamos a casa, ¿Queres? Quiero despejarme un poco, bañarme y acostarme.

-Bueno, vamos, cerrá con llave, yo te espero en la recepción.

-Dale, ahora voy.

Me quedé mirando un rato más la oficina, y pensando en esa carta, que fuerte enterarte todo de golpe. También es feo enterarte que tu mamá falleció creyendo que yo iba a cuidar de Tiziana, y no fue así.
Bajé a la recepción y lo vi a Juli hablando con Martín.

-¿Vamos Juli?, nos vemos Martín, gracias por la atención y por todo.

Nos subimos al primer taxi que vimos, y fuimos directo a casa.
Un viaje bastante largo, estaba apoyada en el hombro de Julián, mientras el me envolvía en sus brazos, y me decía cosas lindas al oído como "Siempre te voy a cuidar" "Nunca te voy a hacer mal" "Siempre juntos". Lo amo, por todo eso, por todo lo que hace por mí, creo que nadie lo haría.
Llegamos y fui directo al ropero a buscar ropa para irme a bañar, iba a hacerme un baño de inmersión para relajarme. Tarde bastante en buscar mis cremas, la ropa y todo eso.
Cuando voy al baño, la tina estaba llena de agua calentita, con sales marinas, y muchas velitas alrededor. Es un amor este pendejo, no lo puedo creer. Lo llamo, y viene corriendo.

-¿Te gustó?- Me pregunta con carita de bebé.

-Me encanto mi vida, no hacía falta igual, te amo, gracias por esto. Salgo y nos acostamos a mirar películas.

Me metí, y me acosté, cerré los ojos y traté de relajarme un poco. Estuve aproximadamente 1 hora, ya lo extrañaba a Juli, así que salí. Me sequé, y fui en bata hasta la habitación. Estaba durmiendo, así que me cambié ahí.
Me acosté al lado de él, y le acariciaba los cachetes, le daba besos en su brazo, deposité un beso en su frente y me acosté pegada a él, para dormir un rato, no daba más.

Sácame de este mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora