❛️004❜️

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YeoSang se negaba a salir de la cama.

La noche había sido de lo más cómoda, San no intento propasarse en ningún momento, que YeoSang haya sentido un brazo en su cintura y un pecho en su espalda, solo lo ayudó a dormir.
Efectivamente hizo un frío de muerte anoche.

Pero ahora con el sol subiendo, no había posibilidad de salir.

¿Y si alguien lo reconocía? No estaban tan lejos de Riks y seguramente su padre ya sabía de su huida, era de sentido común que comenzará la búsqueda en las ciudades y pueblos más cercanos. ¿Y si lo encontraban? Sería una muerte segura.

La puerta de la carroza de abrió y San subió.

─ Desayuno, despiértate.

─ Gracias. ─aceptó el plato de avena, pero sin ninguna intención de comer, su estomago esta revuelto de nervios─ ¿A-a qué hora actuaremos?

─ Aww cosita, "Actuaremos" es para cuando estés listo. ─le toco la punta de la nariz con un dedo, burlándose un poco─ Nosotros tendremos un show llegando el anochecer, podrás ver todo en primera fila.

─ Oh...

─ Por tu cara, pareces muy aliviado.

─ No quería usar el traje.

─ Sí no usas el traje, no hay lugar para ti.

─ Mi lugar ciertamente no es con mi familia, ni con quien quieren casarme, asi que tu carroza es mi lugar por ahora ¿si?

¡Eso era! ¡Justo ahí, en ese momento! YeoSang no titubeaba en sus palabras, ni su mirada se volvía débil, todo lo contrario, era un chico fuerte y con la frente arriba en orgullo. A San le gustaba ese destello.

─ Okey, lo lamento. ─camino a su baúl, a sacar una de sus camisas y tirarla en la cama─ Ponte esa y dame la que traes puesta.

Yeo dudo, pero le hizo caso. Olvidándose de que se encontraba en cama ajena, levantó su camisa y la cambio por la de San, olia a limpio e instantáneamente quizo un baño.

─ Ten. ─al levantar su mano, se fijo que San tenía la vista en su pecho, como si la capa de lino no existiera─ ¿Qué?

─ Te verías excelente bailando, estoy seguro. Y esto...─tomo la camisa─ es para mis niños, come rápido y ven a verlos.

Y se fue, dejando un silencio nervioso en Yeo.

(...)

─ Vaya, pareces bien compuesto ¿San no fue salvaje? ─esos eran los buenos días de Camile.

─ Quizá el si le gusta ¿no crees? ─la señorita EunHa no disimulo el tono de reprimenda mientras desenredaba las cuerdas de tela qué seguramente eran parte de su show.

─ Respétame más mocosa.

─ No haga comentarios innecesarios, señora.

─ Yo lo predije. ─WooYoung pasaba con baldes de agua, caminando hacia los caballos─ Buenas tardes YeoSang, hey no duermas hasta tan tarde corazón, se enfadan las brujas. ─la última frase fue un susurro bromista.

El chico siguió con su camino, dejando a Yeo otra vez en medio de la tormenta.

─ Ee... d-disculpen, eh...

─ ¿Ahora qué? ¿Me contarás de tu linda noche? ¿O quieres que te de el almuerzo? ¡Ahh, ya sé! Me pediras-

─ ¡Camile! ─la voz de EunHa se volvio a alzar─ Hablo en serio, las demás personas no son como tu, dudo mucho que este chico quiera hablar de lo que pase en su espacio con San.

Wonderland Circus | SanSang | ATEEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora