꒰⁠🔥꒱ Capitulo 32.

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PAVEL






Limpiar baños era asqueroso, jamás en mi corta vida pensé que tendría que limpiar vómito de un retrete.

Pero aquí estaba, saliendo adelante con este trabajo de medio tiempo y sintiéndome angustiado por el partido final del viernes.

¿Ganaríamos o todo nuestro esfuerzo sería en vano?

-¿Pavel trabajas aquí?

Volví mi vista hacia atrás y dejé caer mi trapeador al encontrarme con First y demás jugadores del equipo en el restaurante.

-Ven, les dije que lo había visto- Presumió Jun sonriente- Hermano, en serio, ¿no pudiste conseguir algo menos humillante?

Me enderecé en mi lugar y acomodé mi sombrero de calamar, este tenía tentáculos que llegaban a mis hombros.

-No todos tenemos el privilegio de ser hijos de papi- Le copié la sonrisa.

Los jugadores se quedaron mudos, pero luego compartieron una gran carcajada.

-Oh, esa fue buena- Jun palmeó mi hombro.

-Déjanos ayudarte- First tomó varias esponjas y las repartió entre los chicos.

Se los agradecí y mientras ellos se encargaban de lo demás, yo me dediqué a trapear el suelo.

-Oh, no, Leones hambrientos a las cinco y media- First indicó con su cabeza una de las mesas.

Allí estaban sentados los jugadores del equipo al que nos enfrentaríamos en la final y tenía sentido, pues este restaurante de mariscos era más cercano a su universidad que a la nuestra.

-Sí, ya los había visto.

Ellos habían llegado hace rato y desde que lo hicieron, no pararon de molestarme, llamándome con apodos desagradables y obligándome a limpiar más de cinco veces ese sitio.

-¡Ey, hombre calamar!

El capitán del equipo me llamó y cuando menos lo pensé, me arrojó su hamburguesa en la cara mientras sus amigos reían.

-Lo siento, debí recordar que atrapar no es lo tuyo-Se burló- Esa hamburguesa estaba horrible, mejor tráeme algo decente.

Conté hasta tres y luché por no dejar escapar la cantidad de groserías que deseaban salir de mi garganta.

No, no, no perdería este trabajo por su culpa.

Me decidí a comunicarle su pedido a otro mesero y al volver con los chicos, alguien entrando al restaurante llamó mi atención.

Pooh...

Pooh entró luciendo su típica ropa que era una combinación de elegante y casual que no llegaba a comprender como le quedaba tan bien. Lucía una camisa a cuadros colorida, pantalones ajustados negros y mocasines del mismo color.

BOOBS!🥀Poohpavel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora