Kleiner Bär (HopeNam)

» C a p i t u l o c i n c o «

Hoseok admitiría ante todos que estaba obsesionado con el omega, no sólo con él sino también con su lobo. ¿Cómo terminó el omega con él? Honestamente tenía miedo, su omega era demasiado lindo, ardiente, inteligente, cariñoso,  con una voz sexy y atractiva que lo dejaría babeando, todo en Namjoon es atractivo. Su miedo no es que el omega lo dejará, su temor era que otras personas se sintieran atraídas por su pareja, era el omega perfecto, ¿quién no se sentiría atraído ante gran belleza?

       Ese era el problema, Hoseok es muy posesivo con sus cosas, si alguien toca a su omega con otras intenciones lo mataría en cuestión de segundos pero también quería que quisieran a su omega como a él y luego mostrarles que Namjoon es suyo. ¿Loco, verdad?

       Luego de hablar con su omega, lo dejó solo para que hiciera sus cosas y se arreglara, mientras le ordenaba a la cocinera que les preparara el desayuno, se sentó en la mesa mientras jugaba con su celular. En eso, se percata en el teléfono de Namjoon quien estaba en un estado muy deplorable.

       — Tendré que comprarle un celular a mi omega — pensó Hoseok.

       En eso, pudo escuchar a su omega susurrar sobre usar su ropa, sonrió al pensar en él usando una de sus grandes camisas, ¡se vería lindo y sería un gran problema para su pobre corazón! Cuando el cocinero terminó de preparar el desayuno, guardó su celular en su bolsillo antes de levantarse y caminar hacia el segundo piso, tocó la puerta de su habitación dos veces escuchando al omega decir "entra".

       Vio al omega parado en medio de la habitación, usando una de sus camisas y usando aretes de esmeraldas, levantó las cejas al no verlo usando pantalones cortos.

       — ¿No vas a usar ropa debajo? — Cuestionó Hoseok.

       Namjoon se levantó la camiseta y mostró los pantalones color beige pegados a su cuerpo. Tuvo que apartar la mirada antes de que se le pusiera dura y arruinara los planes que había planeado para hoy sólo para follar al omega, tosiendo levemente, continúo.

       — Ah sí… Bajemos a desayunar antes de irnos. — Ordenó Hoseok a su pareja.

       No esperó a que el omega respondiera y salió por la puerta, unos pasos apresurados lo siguieron hasta la cocina. Se sentó en la misma silla de antes, al ver que el omega iba a sentarse en otra, rápidamente agarró una de sus manos y lo atrajo hacia él, haciéndolo sentarse en su regazo. No quiso especificar para no arruinar el momento, pero el trasero del omega encajaba perfectamente en su polla.

       Antes de que pudiera levantar el plato, el omega se levantó de su regazo y se sentó nuevamente, esta vez frente de él con cada una de sus piernas abrazando mi cintura. Namjoon infló sus mejillas y con un adorable puchero en sus labios comenzó a hablar.

       — Alfa, ¿no te gusta? — preguntó Namjoon.

       Diosa, pudo haberle dado un infarto con la ternura de esa omega, no pudo responder ya que Namjoon habló antes que él

       — Puedo quitarme la camisa si te molestó tanto, tenía tu olor... — El omega desvió la mirada avergonzado, sin terminar de hablar.

       Y no hacía falta, con sus manos sostuvo el rostro del omega haciéndolo mirarlo, le sonrió antes de hablar.

       — ¡Juro por la diosa que tú serás el motivo de mi infarto! — La mirada de sorpresa del omega le hizo reír — Pero no son malas noticias. No podía decírtelo antes pero verte usando mi camisa me hizo sonreír como un tonto, pero fue un golpe bajo que usaras esos shorts que resaltan aún más tus muslos calientes —

       Apartó la mirada del omega sintiéndome avergonzada, toso antes de continuar

       — ¡No te negaré nada, Namjoon, nada de nada! Pero me temo que si sigues usando esa ropa linda y sexy te voy a follar tan fuerte y profundo que no podrás caminar durante tres semanas. — Miro al omega viendo sus mejillas rojas y lo beso en la mejilla. — Ahora comamos antes de que te coma. —