009. ☆⌒(ゝ。∂)

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— Disculpa, ¿sabes dónde está el salón 3-B? — una dulce voz llamó la atención de Taehyung, que asintió, apuntando a una dirección. — Muchas gracias — 

El pelinegro asintió, siguiendo leyendo su libro, esperando a Jimin. No lo veía desde el viernes donde pasó eso y estaba nervioso sobre cómo el chico iba a comportarse con él. Ante todo, no quería que se comportara seco, no quería que lo ignorara y no quería que se comportara diferente. 

Si él no lo iba a hacer, tampoco Jimin.

— Estás leyendo Demian? Es mi libro favorito

— Es de una tarea de literatura

— Oh — el chico frunció sus labios al mismo tiempo que se quedaba junto al pelinegro, y este volteó a verlo. llamando su atención.

— Disculpa, ¿necesitas algo más?

— La verdad es que soy nuevo y no sé dónde apuntaste — mirada baja, manos
juntas y postura regida. Taehyung recordó cuando volvió a repetir año y todos se sentían atemorizados con su presencia. Cerró su libro, miró la puerta, verificando que Jimin todavía no venía, y tocó el hombro del chico, que sus ojos rápidamente se guiaron a esa mano.

— Si quieres te llevo, salón 3-B, ¿verdad? — la sonrisa del chico, más que
comenzaron a caminar fue lo que formó un silencio incómodo, y más para el pelinegro. —¿Y? — la voz preguntó y Taehyung sólo hacía pequeñas muecas con sus labios, presentando la incomodidad.

— ¿Cómo te llamas?

— Jeon JungKook-

—Yo soy Kim Taehyung — una risita por parte del chico, y ahora el pelinegro bajó la mirada. Era bueno socializando, sólo que no sabía que hacer junto a un chico lindo, no quería parecer un completo idiota, no quería hacer saber eso. Relamió sus labios al mismo tiempo que seguía caminando inundado en un silencio incómodo. Y realmente se cuestionó si así había sido una sola ocasión con Jimin. Los silencios con Jimin jamás existían porque se la pasaban hablando ambos. Cuando uno no quería hablar, el otro hablaba y hablaba para hacer sentir mejor a la otra, sea contando chistes o contando anécdotas graciosas, y siempre lograban sacarse una sonrisa. Ese día no era así con JungKook.

Llegaron hasta el nombrado salón, haciendo a Taehyung parar, pero el castaño sólo lo miró.

— ¿Crees que podamos comer juntos hoy en el receso? Soy nuevo y no conozco
a nadie, ¿puedo? — la boca abierta del mayor señalando sorpresa, sus ojos bien abiertos y sus cejas alzadas hicieron a JungKook reir, sacando otra risita de Taehyung.

— Claro, no hay problema, ¿en qué salón estarás antes de receso?

✰ ✰ ✰

— No puedo creer que hoy llegué tarde, tuve que entrar por la ventana — se quejó el menor, y Taehyung solo veía los salones por los que estaban pasando, llaman la atención de su mejor amigo. 

— ¿Buscas algo?

— El salón 6-H–

— Está por allá, ¿para qué?-

— Hay un chico nueva y le invité a almorzar con nosotros —Jimin  sonrió, asintiendo.

—Nuevos amigos, me agrada, te acompaño por él — asintió, y guardó sus manos en los bolsos de su sudadera, caminando con un Jimin hablador, que sólo contaba sobre su día, haciendo al pelinegro sonreír nuevamente.

— Así que entraste por la ventana

— No me podía levantar porque me duelen las piernas, no pude caminar por todo el fin de semana — había veces en las que el menor no tenía filtro y muchas veces apenaba al mayor, porque sin darse cuenta, muchas veces contaba cosas privadas de ellos dos. 

Muchas veces Jimin terminaba contando varias cosas en voz alta, llamando la atención de otras mesas, y siempre terminaba diciendo algo que incomodaba al comensal del lado, haciéndolo marchar. Cosa que ambos encontraban divertidas, y apenado. 

Apenas llegaron, alguien saltó de alegría al ver al pelinegro, quitándose los audífonos para pararse frente a los dos chicos, que los veían con una sonrisa.

— Hola, soy JungKook, mucho gusto — el menor había aceptado el saludo con
gusto, sonriendo, y Taehyung sonrió más fuerte al ver esa sonrisa, sintiendo de nuevo esas mariposas en su estómago.

— Soy Jimin, el gusto es mío — volteó a ver al pelinegro, que tenía una sonrisa estúpida, y luego la codeó, sacándolo de su trance. —Vamos a nuestro lugar, hoy hace buen clima

Ambos asintieron, viendo al menor caminar lento, mientras JungKook se acercaba a Taehyung, sonriendo pícaro.

— Oye, a ti te gusta Jimin, ¿verdad?

— ¡No, es mi mejor amigo! ¿Por qué dices? —abultó sus labios, entrecerrando sus ojos y alzando sus cejas, y luego rio, volviendo a susurrar.

— La forma en que lo miras es como todo hombre desea ser mirado– comenzó a contar. —Sólo lo ves a él, sonríes en cuánto sonríe, y suspiras cada que él se mueve, si eso no es amor no sé qué es— 

—¿Por qué todos se dan cuenta menos él? — ver a JungKook suspirar, verlo
fruncir sus labios y luego fruncir su ceño hizo a Taehyung repetir su acción.

— Debes decirle

— A él le gusta alguien más

— Dile que tienes un crush con él

— Es más difícil de lo que crees — el menor río, y luego volteó a verlo.

— Me gustas

El sonrojo golpeó a Taehyung, sus mejillas sonrosadas, sus ojos bien abiertos y sus labios fruncidos, aparte de que comenzó a verificar varias veces si Jimin no había escuchado las palabras de JungKook. 

— Me acabas de conocer

—Eso no me impide estar enamorado de ti, Kim Taehyung — el otro torció sus ojos, y luego resopló. — ¿Nunca intentaste darle celos? —

— No le gusto, sería estúpido

— No sé, juntarte más con alguien, pasar más tiempo con alguien, ya sabes, celos
en todo su resplandor

— Esplendor — corrigió. — Y no, jamás —

— Inténtalo

Ver a Taehyung pensar, verlo fruncir sus labios junto con su ceño, significa que estaba tomándolo en cuenta.

— Los celos son algo feo, no me gustaría

— Vaya, llegamos- JungKook sentándose a su lado, dejando a un Jimin con el ceño fruncido, que se sentó frente al pelinegro. —¿Qué dices del poder de los celos? —

— Oigan, dejen de secretearse — el rubio haciendo un puchero fue más que suficiente para que Taehyung  empujara al menor centímetros de él, y luego Jimin sonrió, y JungKook lo miró con una sonrisa.

diet of sexㅤㅤ੭ㅤㅤvminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora