Siempre a tu lado

Extra

En una sala de hospital se encontraba un Omega pujando para que sus dos hijas finalmente pudieran nacer y venir al mundo.

Mientras que del otro lado de esa sala se encontraba un Alfa que estaba a punto de ser padre, estaba histérico y muy ansioso, pues no sabía cómo iba todo ahí dentro, todo esto hasta que escuchó llantos y antes de que los Médicos le dijeran que podía entrar él ya estaba dentro con su esposa y sus dos hijas.

Eran dos niñas preciosas, una de ojos color miel y la otra de ojos color azul intenso.

Eran hermosas a pesar de que recién nacidas parecieran renacuajos a los ojos de los padres primerizos eran hermosas.

Luego de unos cuantos días Luffy llegó a su casa completamente bien de salud, su esposo lo esperaba mientras que su hermano no podía estar allí ya que se encontraba en un viaje hacia Europa, pero no importaba.

Su querido esposo le dio la mejor bienvenida que pudo, llena de postres, regalos caros entre otras cosas.
(En fin, cosas de ricos)

Sus hijas se encontraban plácidamente durmiendo en sus cunas mientras que los dos padres se encontraban besándose y amándose mientras pasaban tiempo juntos antes de que los presuntos llantos de las recién nacidas los interrumpieran.

Sabo: Luffy me alegra que de una buena vez estés aquí acompañándome, te amo.

Luffy: Yo también te amo mi vida, te eh extrañado mucho en estos días.

Pasaron unos cuantos minutos y ambos esposos se encontraban en un sofá dándose pequeños besitos suaves y caricias para demostrarse su amor, aún no podían tener sexo debido al parto que el Omega tuvo hace poco, pero eso no les impedía amarse de otras maneras diferentes.

A pesar de que ambos si se encontraban desnudos, no era precisamente para tener relaciones, simplemente era para que las caricias se sintieran más íntimas y los besos no fueran únicamente en el cuello o partes del rostro ajeno.

Sabo: Mi precioso, te amo, ¡¡Te amo tan jodidamente que no podría vivir sin ti!!

-El menor solo se sonrojó y plantó un beso en la nariz del rubio-

Luffy: Yo también te amo, no podría decir hasta donde, ya que está fuera del razonamiento lo mucho que yo te adoro.

Sabo: Te prometo que en todo el transcurso de tu vida y la de nuestras hijas yo los protegeré con mi propia vida.

Luffy: Yo se que si mi querido Alfa.

Ambos comenzaron a besarse y repentinamente se escucharon los llantos de sus hijas, rápidamente se vistieron de nuevo y fueron a socorrer a sus pequeñas.

Definitivamente esto de ser padres no iba a ser fácil, pero los dos juntos superarían cualquier desafío...