Entre curvas y Amor//Charlos

Final

El sol filtraba sus cálidos rayos por las cortinas del dormitorio de Carlos y Charles, anunciando otro día juntos. Carlos despertó primero, sintiendo el calor reconfortante de Charles a su lado. Se giró con cuidado para no despertarlo y acarició suavemente su cabello y también dándole un suave beso en sus cachetes, antes de levantarse para preparar el desayuno.

Charles se despertó poco después y se unió a Carlos en la cocina, donde él ya estaba ocupado haciendo café y cortando fruta fresca para acompañar el cereal. Mientras compartían el desayuno, planearon su día: una caminata por el parque cercano y quizás una visita a la librería local.

Después del desayuno, salieron de la mano hacia el parque. Durante la caminata, se detuvieron ocasionalmente para admirar los árboles en flor y se tomaron fotos el uno al otro. Charles mencionó lo emocionado que estaba por una nueva novela que había estado esperando, y Carlos le prometió que pasarían por la librería más tarde como habían coordinado antes de salir de la casa

En el parque, encontraron un banco bajo la sombra de un árbol y se sentaron juntos. Charles sacó un libro de su mochila y comenzó a leer en voz alta un pasaje que le gustaba. Carlos escuchó con atención, disfrutando de la forma en que la voz de Charles daba vida a las palabras en la página.

Después de un rato, Carlos sacó de su mochila una pequeña sorpresa que había estado guardando: un par de pulseras idénticas con una inscripción personalizada que decía "C&C♡". Charles se emocionó al verlas y le dio a Carlos un beso suave en los labios antes de ponerle la pulsera.

Después de su momento en el parque, caminaron hacia la librería, donde Charles encontró su novela y Carlos compró un libro de cocina que había estado investigando. Se tomaron de la mano mientras recorrían los pasillos, intercambiando sonrisas cómplices cuando encontraban un libro que les gustaba mutuamente Y se daban besos y uno que otro toqueteo subido de Tono, ambos parecían unos adolescentes pero ellos sabían que ese amor que tenían nunca cambiaría

Al regresar a casa, prepararon juntos una cena sencilla pero deliciosa. Carlos cortó verduras mientras Charles preparaba el pollo al horno, riéndose mientras discutían sobre cuál de los dos era mejor cocinando. Mientras cenaban, compartieron anécdotas del día y hablaron sobre planes futuros no tan futuros, como una posible escapada de fin de semana a la playa Después de las prácticas en sus autos.

Después de la cena, se acurrucaron en el sofá para ver una "película" que habían estado esperando ver juntos. Carlos descansó la cabeza en el hombro de Charles haciendo que este se acomodara más pero antes le dio un profundo beso a Carlos y vio como este sonrió enamorado, Carlos metiendo su mano por adentro de la camiseta de Charles, escuchando como este suspiraba, ambos hicieron el amor como una y mil veces lo habían hecho y siempre era igual de significativa,eran una pareja muy activa sexualmente y para ambos eso siempre era más que perfecto, asta luego de dos horas que se dieron cuenta que ya la película había acabado, rieron y prometieron que pa la otra si verían la película

Antes de irse a la cama, se dieron un baño juntos, al salir se secaron sus cabellos y luego se sentaron juntos en el balcón, con Charles recargado en el pecho de su novio, disfrutando de la brisa nocturna y mirando las estrellas. Carlos tomó la mano de Charles y lo miró con amor en los ojos.

"Charles," comenzó suavemente, "solo quiero decirte lo agradecido que estoy por tenerte en mi vida. Eres mi roca y mi felicidad, y cada día contigo es un regalo."

Charles sonrió con ternura, apretando la mano de Carlos con cariño. "Yo también estoy agradecido por ti, Carlos. Eres mi amor y mi mejor amigo, y no cambiaría nada de esto por nada en el mundo y tampoco te compartiría "

Carlos río y descubrió poco a poco avanzaba su relación que Charles era un celoso de primera, aún así lo adoraba y adoraba que cada cuanto tiempo, Charles marcara territorio besandolo frente a miles de camaras–Te amo precioso, Vamos ya a la cama, mañana es otro dia y tenemos practicas–

Se abrazaron con cariño antes de ir a dormir, sintiéndose tranquilos y completos en el abrazo mutuo. Así, cada día, Carlos y Charles seguían construyendo sobre la base sólida de su amor, compartiendo cada momento con la gratitud y la alegría de haber encontrado el uno al otro.