Capitulo 3

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La primera línea no es como esperaba. Era similar a las pequeñas confortaciones entre aldea. En especial los ninjas de iwagakure que tenían cierto resentimiento hacia su aldea y en algunos casos hacia el.

Las tácticas eran grandiosas, y no carecían de coraje para tomar vidas. Pero simplemente ver a personas hacer una especie de danza para manifestar su poder, lo enfermaba.

Lo primero que hizo en sus primeros meses en el frente fue búsqueda y recolección de información sobre las tácticas de la nación de Tierra.

Por mucho que haya sido entrenado para asesinar, seguía siendo un niño y la nación del fuego iba aprovechar esa edad. Su infiltración no fue ningún problema, Ba Sing Se consistía en un asedio altamente protegido. Pero su fachada de niño traumatizado por la guerra y aparentemente prisionero de la nación del fuego fue más que suficiente para lograr caminar por Ba Sing Se sin muchas miradas hacia el.

Su cabello amarillo fue ocultado por un genjutsu de bajo nivel. Sus distintivas marcas en las mejillas fueron removidas y sus ojos azules cambiaron a unos más oscuros.

Ese fue su primer paso, después de una semana, logro despojar de su puesto a un guardia que custodiaba las murallas. Con muchos métodos de interrogación logro mantener su fachada.

Ahora solamente necesitaba replicar eso en todo el muro norte de Ba Sing Se para una invasión exitosa. Solo esperaba que Lu Ten mirase su valor y lo recomendara con el actual líder de la nación del fuego, azulon.

Fue triste tener que fingir ante la mujer del hombre que estaba enterrado bajo tres kilos de excremento de caballo.

Tuvo que fingir ansiedad por un posible ataque, logrando mantener nerviosos a todos los guardias que custodiaban la zona. Necesitaba dar una imagen mala de esta persona, necesitaba que ese día lo catalogaran como alguien incapaz de seguir ahí.

Pero no solo fingió ser otra persona, lentamente sus clones iban haciendo lo mismo con otros guerreros. Lentamente todo el muro norte estaba repleto de sus clones. Solamente tenia que esperar tres semanas más para el golpe final y Ba Sing Se caería sin siquiera intentarlo.

Tuvo en mente hacer lo mismo con los guardias reales. Pero posiblemente le tome más tiempo debido a su tiempo que están alrededor del gobernante de este lugar.

Sería más sencillo hacerse pasar por el gobernante que tomar la apariencia de cientos de soldados, la carga mental sería estresante en un futuro.

Aun era joven para sentir remordimiento. Pero si la invasión sale exitosa, no abra ningún tipo de bajas, exceptuando a los que se interpongan. Así era en su viejo hogar. Si pudo sobrevivir a esa vida, cualquier cosa que haga en un futuro será un paseo por el parque.

Miro las estrellas del cielo, eran diferentes. No estaba el Dios de lo Shinobis ahí. Mucho menos la sombra del Hokage como Hiruzen le dijo.

Hacia falta el abanico de los Uchiha's. Además el sol salía del lado contrario. Se recostó en la paja de un establo de guardias mientras sus clones vigilaban los alrededor en un Genjutsu.

Posiblemente tendría dolor de cabeza hasta su próxima vida, pero si quería alcanzar la cima. Este era el método más fácil y doloroso de hacerlo.

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Finalmente fue el día. Vistiendo con un traje rojo y diseños dorados se paro al lado de Lu Ten, príncipe de la nación del fuego y posible gobernante en unas próximas décadas. Observó su mano temblar, aun era joven. Posiblemente en sus quince. Dejo que su aliento escapara de sus pulmones.

"No es necesario que estés nervioso"-Comenzó con un murmulló, miro el casco que le hicieron en el ultimo mes. Era el diseño de la nación del fuego pero mucho más pequeño. Con desagrado se lo coloco.-"Te mantendré con vida Príncipe Lu Ten, así puedes cumplir tu promesa"-Sonrió descaradamente mientras alzaba la vista hacia el chico el cual lo miraba.

Voluntad MayorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora