×Capítulo 3 -Muerte.

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Me escondí como pude en el baño, cogí mis cosas e intente vestirme.
- ¡Llamaré a la policía! ¿Cuanto te pagaron por hacer esto?-Gritaba el serio.
Me sentía extrañamente llena pero dolida.
¿Había podido pasar la noche con un desconocido y no con John? ¡Soy una zorra! Y encima que tipo, me llama estafadora cuando yo no le hecho nada. Es más el es quien me ha violado, no entendía nada como ha pasado todo esto.

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No tardo en llamar a los de seguridad debían de llevarla a la carcel. A ella y a esos tipos me visto y llegan.
Abren la puerta del baño dejando ver a una llorona mujer.
Yo la agarro de la mano y la llevo con los de seguridad.

- ¿Como coño me explicais esto? ¿Como ha entrado en mí habitación? Les pienso demandar lleven a esta estafadora a la carcel.
- ¡Mire! Puede estar enfadado conmigo pero yo no he hecho nada malo. Pare de acusarme sin pruebas.
- ¿Sin pruebas? Apuesto que no estas registrada en este hotel, muerta de hambre. -Digo con odio.
- Váyase al diablo. Pregunte a estos señores estoy registrada 'Erin Jones' habitación '309'. -Dijo seria.
- Me temo señor que la muchacha tiene razón. -Responde uno de los hombres del hotel.
Salimos a fuera y maldije a todos los dioses al ver que la 306 ahora era la 309.
- Entonces....Entonces ¿Como cojones explica que...Entro en mi habitación? Quien la contrato ¿Max Dunant? ¿Steve Parker? -Pregunto mirandola duro.
- La puerta ya estaba abierta. Y no tengo porque responder a su mente paranoica como dije antes ¡Vayase al diablo! -Grita seria.
- Esta bien. -Digo haciendo que esos hombres se marchasen y ella se fuera.
Sus gafas estilo Harry Potter aún estaban en mi recamara.
No entendía como ha pasado esto. ¡Dios!

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Entro a mi suite, caigo de rodillas. Era John muerto, la cama estaba totalmente roja. Dios. Lagrimas se asoman por mi rostro. Por culpa de ese idiota he pasado la mañana en la dirección del hotel. Que maleducado que era.
Me acerco al rostro de John, estaba muerto. Muerto. Su sonrisa, ya nunca la vería.
¡Ven como soy una un amuleto de la mala suerte! El unico hombre que se ha interesado por mi muerto. Siento unas ganas de meterme el cuchillo que esta cerca de la cama.
No pude aguantar más cuando vi los paramedicos volver a entrar.
- ¿Es la novia del señor Foster? -Pregunto uno de ellos apenado.
Yo asentí sollozando.
- El señor Foster fue asesinado ayer por la noche. -Dijo un policía serio.
- ¿Muerto? -Dije casi en un susurro, me salío una sonrisa amarga. Si yo hubiese estado aquí me abría muerto con él. Caigo de rodillas al suelo.
No se como ni cuando pero caí de rodillas al suelo, mi mundo se venía abajo. Todo mi mundo se había roto en mil pedazos.
No me lo puedo creer.
Siento unas manos en mis hombros. Levanto la mirada para encontrarme con la implacable mirada del señor estúpido.
- Levantese. Se olvido sus gafas. -Dice serio.
Yo me levanto. Me las coloco y me acerco a John y me aferro a él en un abrazo quedando totalmente manchada.
El desconocido me aparta de John para llevarme a sus brazos.
- Tranquila.. -Susurra acariciando mí pelo. Y me siento extrañamente reconfortada. En los brazos de ese desconocido que se ha llevado mi virginidad. Bueno, des de lo que me sucedío han pasado 10 años y en esos años nunca he estado con un hombre.

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La saco de la suite serio. Ella sigue llorando desconsolada. Ni siquiera me hizo falta ver quien era.
Me sentí tremendamente mal. Pobre mujer. Se veía que quería a ese rubiales.
La abracé y la lleve a bajo. Para que tomará aire. Ella sigue llorando sin consuelo.
- ¿Porque cojones amamos si duele tanto? -Pregunto serio.
Ella me mira llorando.
- No lo sé. Quizá eso es lo único que nos hace humanos; sentir. -Dice ella entre un sollozo.
Se me partio el alma al verla llorar.

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Fuimos a un río artificial que quedaba a las afueras del hotel. Aún no podía con todo esto. John, estaba muerto.
- ¿Sabe? ¡Es verdad lo que dicen solo soy un puto post-it! ¡Y encima que da mala suerte! -Grito desesperada.
- Erin... -Parece una melodía en sus labios. -¡Cállese de una jodida vez! ¡Pare de decir bobadas! ¿Me entendio o no? ¡Pare de llorar! Por mas que solloze ese tal John no volverá a vivir, y el pobre solo se sentirá peor al verla sufriendo. -Me ordena autoritario.
Yo me callo, el con un panuelo con M.Grey bordado con ilo plateado, limpia mis lagrimas. Me sentía como una niña pequeña regañada por un adulto.
- Debería darle vergüenza. -Me dice el serio.
- ¿Que paso con ru chica? -Pregunto calmandome.
- Se fue. -Dice el huyendo de mi mirada por primera vez.

Casada con el Sr. ArroganteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora