Esta historia no es mía es de @theilliterateironman yo solo hago la traducción :)
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"Soy un hombre lobo, ¿no lo sabías?"
"¡No, vaya, no lo sabía!"
+*★*+.
En el que un hombre lobo encuentra a su pareja en una bruja, y en el camino se cumple una pr...
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Un joven con un mono de Seabrook Construction caminaba por Zombietown, y quienes lo rodeaban desconocían por completo lo que era. Irónicamente, sonaba una alarma mientras un mensaje de advertencia se repetía una y otra vez, aconsejando a la gente que se refugiara.
"Atención a todos los ciudadanos. Se han restablecido las leyes sobre monstruos. Todos los toques de queda se aplicarán estrictamente. Atención a todos los ciudadanos. Se han avistado hombres lobo en el área. Cúbrase de inmediato. Mantenga a los niños y las mascotas adentro".
Aunque Wyatt tenía la misión de conocer las secuelas de que su manada se revelara a la chica de pelo blanco, eso no significaba que no se distrajera fácilmente. Entonces, cuando pasó junto a una especie de carrito de metal con golosinas coloridas llamado 'fro-yo', se despertó su interés. Sin embargo, tan pronto como se acercó para intentar conseguir algo de comer, el dueño del carrito, que estaba vestido de rosa de pies a cabeza, sacudió la cabeza con furia.
"Oh, no, no, no, no, no, no. Estamos cerrados para siempre. Los sueños del éxito del fro-yo se desvanecieron", dijo el entrenador mientras cerraba su carrito, escondiendo el yogur helado del lobo que había nunca lo he intentado. "Con monstruos por todas partes, me gustan los zombis. A ellos les gusta el fro-yo. Pero a los hombres lobo les gusta la carne humana. Tal vez con chispas. A todos les gustan las chispas".
Wyatt frunció el ceño profundamente, sabiendo con certeza que nunca había comido carne humana. Claro, eran criaturas depredadoras, increíblemente territoriales y sí, a veces parecidas a perros, pero ya mataban gente. Pero no pudo decir eso mientras el entrenador seguía gritando.
"Solo corre. ¡Rodillas altas, corre!" gritó mientras empujaba su carrito a toda velocidad.
Wyatt estaba preparado para regresar al bosque y contarle a la manada el alboroto que habían causado. Pero mientras continuaba avanzando por Zombietown, captó un olor por segunda vez en un día, uno que provocó un frenesí en su interior. Wyatt se encontró siguiéndola sin siquiera decirle a sus pies que se movieran.
Carson sostenía a Zoey sobre sus hombros, dándole altura para clavar uno de sus carteles de 'Se busca: hombre amigo' en un poste telefónico de madera. Había estado a su lado mientras recorría la ciudad, colgando muchos carteles dibujados a mano. Casi regresaron a la casa de Necrodopolis, lo cual fue bueno, ya que Zevon quería que Zoey volviera a casa mucho antes de que oscureciera.
"¿Cuántos te quedan?" Preguntó Carson, continuando caminando con Zoey sobre sus hombros mientras buscaban lugares más adecuados para los voladores.
"Sólo uno", dijo Zoey, agitando su dibujo. "¿Podemos ponerlo junto a la parada del autobús? Así todos podrán verlo mañana en el camino a la escuela".
