"Amor en las Sombras" (Jenny x Adri)

Capítulo I: El debate

Después de su primer encuentro y su primer plática después de el incidente con el casillero su segundo encuentro sucedió durante una competencia de debates en la CQ, un evento que atraía a estudiantes de diferentes facultades por su prestigio y el reto intelectual que representaba.

Jenny, conocida por su mente analítica y su capacidad para argumentar con precisión, representaba a la facultad de Derecho. Su objetivo era claro: demostrar la superioridad de su equipo a través de la lógica y los hechos. Su enfoque era meticuloso y su estilo, implacable.

Adri, por otro lado, había sido seleccionada para representar a la facultad de Artes. Aunque no era una debater experimentada, su pasión y creatividad la hacían una oradora sorprendentemente efectiva. A menudo usaba ejemplos poéticos y metáforas, lo que hacía sus argumentos tanto convincentes como emocionalmente resonantes.

Durante el debate, las chispas volaron casi de inmediato. Jenny atacó los puntos de Adri con precisión quirúrgica, desmontando cada argumento con hechos y lógica. Adri, lejos de intimidarse, respondía con ingenio y pasión, contrarrestando con ejemplos vivos y una retórica envolvente.

 El público estaba absorto, viendo cómo dos fuerzas opuestas chocaban en un duelo intelectual electrizante.Al final del debate, aunque el equipo de Jenny fue declarado ganador, muchos en la audiencia quedaron impresionados por la elocuencia y la creatividad de Adri. 

Jenny sintiendo una mezcla de respeto y molestia, se acercó a Adri después del evento.

—Buen trabajo ahí— dijo Jenny con un tono que intentaba ser neutral, aunque un tanto desafiante.

Eva sonrió, una sonrisa amplia y desarmante. 

—Gracias. No estuvo mal para alguien que cree que todo en la vida puede resolverse con reglas y hechos, ¿verdad?— Jenny levantó una ceja, sorprendida por la respuesta. 

—Las reglas y los hechos son importantes. Nos mantienen en línea.— 

—Tal vez— respondió sin perder la sonrisa. —Pero un poco de caos y creatividad también hacen falta. Sin ellos, la vida sería bastante aburrida, ¿no crees?— 

Ese primer intercambio fue el comienzo de una relación tensa y competitiva. Aunque parecían estar en desacuerdo en casi todo, ambas comenzaron a darse cuenta de que había algo más profundo en juego. Lo que comenzó como una rivalidad se convirtió, poco a poco, en un camino hacia la comprensión mutua y, eventualmente, en algo mucho más significativo.

Después de eso, Jenny y Adri comenzaron a encontrarse con más frecuencia, tanto en la universidad como en eventos sociales y académicos. Aunque sus interacciones eran a menudo tensas y competitivas, cada una no podía evitar sentir una curiosidad creciente por la otra.

Un par de semanas después del debate, fueron asignadas al mismo grupo para un proyecto interdisciplinario. La tarea era desarrollar una propuesta que combinara elementos legales y artísticos para revitalizar un parque abandonado en la ciudad. Jenny ,con su mentalidad estructurada y lógica, se encargó de la parte legal y de la planificación estratégica, mientras que Adri con su creatividad y visión artística, se dedicó a diseñar las instalaciones y actividades culturales.

Al principio, trabajar juntas fue un desafío. Jenny insistía en la precisión y la practicidad, mientras que Adri defendía la importancia de la estética y la experiencia emocional. Sus reuniones de grupo eran una mezcla de debates acalorados y momentos de tensión, pero poco a poco comenzaron a encontrar un equilibrio.

Un día, mientras discutían sobre el diseño del escenario para eventos en el parque, Jenny tuvo una idea. 

—¿Y si combinamos tus ideas sobre la luz y el color con una estructura más funcional? Podríamos crear algo que sea tanto bello como práctico.

Adri se sorprendió al escuchar a Jenny considerar una perspectiva artística. 

—Eso podría funcionar— respondió, sonriendo. —nunca pensé que te interesaría tanto la estética.

Jenny se encogió de hombros, un poco incómoda. 

—Supongo que empiezo a ver su valor. Además, tus ideas tienen un impacto emocional que no había considerado.

Durante una de sus sesiones de trabajo en el proyecto del parque, Jenny y Adri se encontraron discutiendo sobre los detalles del diseño del escenario. Jenny estaba firmemente convencida de que necesitaban una estructura más robusta, mientras que Adri defendía un diseño más estético.

—No puedes simplemente poner algo bonito y esperar que no se caiga a pedazos, Adriana— dijo Jenny, exasperada.

—Y tú no puedes pretender que solo porque algo es funcional, también es atractivo, Jennifer, respondió Adri, con igual frustración.

Después de una larga discusión, Jenny se dio cuenta de que Adr tenía un punto.

—Está bien, aunque no me llamo Jennifer, ¿qué tal si encontramos un compromiso? Una estructura robusta con los elementos estéticos que propones

Adri miró a Jenny, sorprendida y agradecida.

—Eso suena razonable, Jennifer, sabía que había una persona razonable detrás de esa fachada de abogada

Jenny sonrió, aunque con un toque de sarcasmo.

—No te acostumbres a que ceda tan fácilmente. Esto no es una costumbre

Adri se acercó y le dio un ligero empujón en el hombro.

—Lo tomaré como una victoria, por ahora

Desde ese momento, su colaboración mejoró notablemente. Comenzaron a pasar más tiempo juntas, trabajando en el proyecto y discutiendo sus ideas. Entre las largas horas de trabajo y los debates apasionados, empezaron a conocerse mejor. Adri descubrió que Jenny tenía un sentido del humor agudo y una dedicación implacable, mientras que Jenny comenzó a apreciar la profundidad y la sensibilidad de Adri.

Una tarde, después de una intensa sesión de trabajo, decidieron tomar un descanso y caminar por el campus. Mientras paseaban, Jenny abrió su corazón por primera vez. 

—Nunca pensé que terminaría disfrutando de un proyecto como este. Siempre he sido tan enfocada en lo práctico, en lo tangible... pero trabajar contigo me ha hecho ver las cosas de una manera diferente.

Adri la miró con una mezcla de sorpresa y gratitud. 

—Me alegra escuchar eso. Yo también he aprendido mucho de ti. Tu enfoque y tu disciplina son algo que admiro. Creo que, a pesar de nuestras diferencias, nos complementamos.

Ese paseo marcó el inicio de una amistad tentativamente más cercana. Aunque aún discutían y tenían diferencias, las barreras entre ellas comenzaban a desmoronarse. El respeto mutuo que habían desarrollado se transformaba lentamente en una comprensión más profunda y, sin que ambas lo supieran aún, en una atracción silenciosa y poderosa.

El proyecto interdisciplinario no solo revitalizó el parque abandonado, sino que también sembró las semillas de un vínculo que crecería más allá de las expectativas de ambas. Su historia, aún en desarrollo, se convirtió en un testimonio de que incluso las diferencias más marcadas pueden dar lugar a conexiones inesperadas y significativas.