parte 2

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El día en el que Jungkook dejó el bosque fue el más triste de todos ya que el fue atacado por el propio alfa al tratar de defender nuevamente a su madre la cual lloró suplicándole que no se fuera.

El simplemente hablo con ella para calmarla y le dijo que regresaría pronto, su madre entre lágrimas lo dejo ir y con tan solo 17 años recién cumplidos se encontraba caminando a quien sabe donde, sólo esperaba encontrar un lugar donde pueda encajar.

Los días pasaron y él sobrevivió cambiando de forma a cualquier animal, pero la mayoría del tiempo era un lobo.

Cuando se hizo de noche logró encontrar una cueva donde pasar la noche y se instaló ahí, sin pensar que luego de unos minutos alguien más llegaría.

-pero que carajos! que haces aqui- un chico de pelo plateado y ojos rojos se sorprendió al verlo en la cueva que usaba él para descansar después de cazar y alimentarse.

El lobo asustado por el chico simplemente se encogió en su lugar en forma de miedo, ya que aunque él no le temía a nada, los ojos rojos del otro chico le intimidaba, el chico de pelo plateado al notar esto solamente se alejó de él y se sentó casi a la entrada de la cueva.

Cuando el chico parecía dormido el lobo con curiosidad se levantó y empezó a olerlo por todas partes pero con cuidado para no despertarlo.

-no estoy dormido pequeño lobo- al escuchar su voz el lobo se alejó- mira, no te voy a hacer nada, solo quiero descansar mis ojos y cuerpo por un rato y me iré, si quieres dormir hazlo pero no me molestes a mi- y sin más volvió a cerrar los ojos.

Esta vez el lobo se sintió más calmado y logró conciliar el sueño, bueno, al menos por un rato ya que unas horas después se despertó por un peculiar olor… olor a humano. 

-mierda! otra vez ellos- el chico de pelo plateado se levantó de prisa eh iba a salir pero después recordó que no era el único en esa cueva- tienes que irte de aquí, si ellos te ven te matarán-

El lobo se asustó ante esa palabra y se escondió detrás del chico.

-¿Qué haces? tienes que irte, no te llevaré conmigo, largo- trato de empujarlo pero no podía hacer que el lobo se despegue de el- mierda! bien te llevaré pero después que ellos ya no estén te irás por tu cuenta, vale!- el lobo agacho la cabeza en forma de afirmación.

Entonces el chico con mucha habilidad lo cargo y saltó a los árboles, saltaba de árbol en árbol y volaba con el viento, el lobo nunca se sintió más vivo que ese momento, volaron por los árboles hasta que llegaron a una cabaña que parecía abandonada y fue ahí cuando lo bajó y entró a la casa, el lobito simplemente lo siguió.

-claro, debí suponer que no harias casó, eres un tramposo dijiste que te irías y mirate, entrando a mi casa como si fuera la tuya- el chico se encontraba sentado en un mueble marrón que parecía muy cómodo para el lobo.

El simplemente bajó la cabeza y emite un sonido pidiendo disculpas.

-no importa, me hacía falta un amigo, nadie había venido desde más de mil años así que me conformo contigo pequeño lobo, esperame aqui te traeré un poco de agua para que tomes- y sin más fue a hacer lo dicho.

El lobito se sentía agradecido con el chico así que para poder agradecerle correctamente paso a su forma humana, lo que no esperaba es que el chico regresara y al verlo tirara el pozuelo con el agua que traía.

-pero que mierda! que paso con el lobo, quien carajos eres!?- 

-yo soy el lobo, no te asustes por favor, solo quería agradecerte por salvarme, si quieres regreso a mi forma de lobo- frente al muchacho se transformó nuevamente en lobo.

-pero que-como es que-tu, tu te transformaste?- el chico estaba tan confundido.

El lobo solo asintió.

-ha-haber vuelve a humano- 

Y como él pidió, el lobo se transformó en humano.

-como carajos haces eso- se acercó el chico y lo cubrió con una mata ya que estaba desnudo, y el solo se dejó hacer.

-no lo se, siempre he podido hacerlo, me imagino que tu no, verdad?- los dos se sentaron el sofá- wow esta muy suave-

-¿entonces los cambiaformas si existen?-preguntó sorprendido.

-no lo se, soy solo yo, nadie en mi manada puede hacerlo más que yo, tu eres humano? hueles muy rico- el otro chico se sonrojo al oír eso.

-yo no soy humano, soy un vampiro- respondió.

La Leyenda del Cazador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora