Capítulo 16: Libro 2 Capítulo 0 - Luciérnaga en la noche

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Descargo de responsabilidad: One Piece y Harry Potter no me pertenecen, cada uno pertenece a su respectivo autor.

Desafío de TheBlackSeaReaper.

Beta: Soñador poco ortodoxo

-.- Luciérnaga en la noche

A Snape no le gustaba mucho regresar a casa en verano. Hogwarts siempre había sido su verdadero hogar, no su segundo hogar, sino su verdadero hogar. Aquí en esta pequeña casa, cubierta de libros y polvo, no había mucho que hacer, la única actividad entretenida era leer los libros que tenía, nuevos y viejos.

Pero esta noche su mente estaba en otra parte, mientras su cuerpo permanecía en un sofá con un libro abierto y sin leer en su regazo, mientras sus pensamientos se mantenían enfocados en uno de sus alumnos: Harry Potter, mejor conocido como Portgas D. Ace.

El chico había sido un problema incluso antes de entrar a Hogwarts; Hace dos años el mocoso había decidido huir de casa. No es que culpara a la niña, si Petunia era la misma que recordaba de su infancia, estaba seguro que la primera reacción de cualquier niño sería salir corriendo de esa casa.

El niño resultó más esquivo de lo que esperaba, en un solo momento lo perdieron de vista y el niño desapareció, trasladándose a otra ciudad sin dejar rastro.

Luego llegó a Hogwarts y desde la primera noche dio problemas, empezando por la ceremonia de selección. En el momento en que lo llamaron para que se presentara y lo solucionaran, él se negó, según Minerva McGonagall; no seguiría adelante hasta que lo llamaran con el nombre de Portgas D. Ace.

¿Por qué Portgas D. Ace? Dumbledore tenía cientos de teorías, algunas tan probables como el resto. Pero para Severus esto sólo significaba una cosa: Ace se negó a reconocer el nombre y apellido que le dio James Potter; entonces Ace se negó a reconocer a James Potter como su padre. Y mientras Severus intentó resistirse a complacer al niño con tal moda, no fue difícil seguir la acción de Ace para negarle a James; era imposible ver su antiguo colegio rival en Portgas D. Ace; el niño no se parecía en nada a James Potter. El color del cabello era quizás el mismo, negro, pero todos sus rasgos no eran los de Potter, ni siquiera los de Lily; Los ojos que todos decían que eran los de Lily eran de un verde apagado. Era como una persona completamente diferente, un estudiante más, sin relación con Potter y Lily.

Desde el primer día todo lo relacionado con el niño fue sorpresa.

Portgas padecía narcolepsia. ¿Dónde había heredado una extraña enfermedad cuando nadie más en su familia la padecía? Eso era un misterio. Todo el personal había leído un libro de medicina muggle moderna (Hermione Granger se lo había dado a McGonagall), solo para entender esa enfermedad, y decía claramente que quienes padecen esta enfermedad, también padecían depresión. Pero el niño no padecía ningún tipo de depresión, Severus había buscado en secreto información adicional y había confirmado que la depresión era uno de los síntomas y una recomendación era que no se debía comer demasiado, algo que Portgas no siguió.

Ace comía el doble de lo que comería un adulto, se estimaba que todo lo que las niñas de grados superiores no comían al hacer dieta, era toda la comida extra que comía Ace, incluso más. Una prueba más de ello fue la gran cantidad que tuvieron que pagar al Caldero Chorreante por un mes de estancia.

Quizás era por eso que tenía tantos problemas con los muggles, mantener un apetito así seguramente le salía caro. Ante este escenario, la idea de hacer una gira en verano por Inglaterra no sonaba tan descabellada como muchos podrían haber pensado.

En ese momento, pensó Severus, Ace debía estar con Minerva McGonagall. ¿Quién se volvería loco primero? Snape no sabía a quién apostar. Pero una cosa era segura, con esto confirmó que el profesor tenía un punto débil con los estudiantes revoltosos y disruptivos, como ocurre con Potter y Sirius Black. Mientras tanto Severus prefería a aquellos que se esforzaban por superarse y seguir adelante.

De repente dejó caer el libro y gimió de exasperación mientras levantaba la cabeza para mirar al techo, intentando borrar la imagen que había llegado a su mente sin previo aviso.

Durante casi seis meses, Severus Snape había sido atormentado por el recuerdo de la visión que había tenido en ese armario justo antes de las vacaciones de invierno. La imagen de Portgas D. Ace, con el rostro cubierto de lágrimas, había quedado grabada en su mente más profundamente que la marca que llevaba en el brazo. De vez en cuando, esa imagen resurgió en su mente y esos ojos verdes apagados, que no eran los de Lily, lo atormentaban con las palabras que había leído en la mente de Ace.

Todo lo que había pensado o esperado de Harry Potter era completamente diferente a lo que era Portgas D. Ace; como si fueran dos personas diferentes. Se podría resumir que Ace era un misterio que intrigaba a Severus Snape, lo que llevó a la pregunta:

¿Quién era Portgas D. Ace?

Sólo el tiempo lo dirá.

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