Capitulo 34.

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Pov: Thomas.

Llegamos a mi casa justo a la hora de comer, mientras pedía una pizza familiar por teléfono, Dylan prendía la televisión buscando algún canal que podríamos ver.

—Vale, gracias— digo lo último para luego colgar la llamada de lo que viene siendo la pizzería.

Me siento en el sofá al lado de Dylan que se encontraba mirando el móvil.

Dylan al sentir que me siento, deja el móvil y me mira.

—Vale... cuéntame lo de __— dice Dylan directamente para posicionarse más correctamente en el sofá.

—Bueno... eh...— empiezo a hablar nerviosamente, dejo de mirar a Dylan y miro hacia la televisión, no sabía ni lo que se estaba proyectando en la televisión, estaba sumergido en el momento concreto en el cual __ y yo nos dimos el beso.

—Habla— habla Dylan con el fin de sacarme de mis pensamientos y saber cómo ocurrió eso.

—Ella ya se iba a ir a su casa... y...— trago saliva y miro a Dylan —Hablamos lo de Talulah... y cuando se iba a ir... pues, simplemente nos besamos— digo calmadamente como si __ no tuviera novio, y mucho menos ese día me habían herido por mi ahora actual ex.

Dylan se me queda mirando y resopla

—Estáis mal de la cabeza— es lo único que Dylan saca de su boca mientras mira hacia la televisión y se vuelve a recostar mejor en el sofá.

Trago saliva sintiéndome como un niño pequeño al cual justo su padre acaba de regañarlo por hacer una tontería.

—No sé qué hacer— digo sin más, sin mirar a Dylan, solo estaba mirando al suelo mientras mi mano derecha se posaba en mi nuca frustrada mente.

—Lo que debes de hacer es, o luchar por ella o dejarla ir— habla Dylan —Una de dos, y la debes de elegir cuanto antes, quien sabe lo que puede pasar más tarde—













Dylan tenía toda la razón del mundo, si no elegía cuanto antes dolería aún más o la perdería por siempre, depende de la elección que elija.
Dylan se había ido hace menos de 5 minutos, ya habíamos comido, también habíamos hablado de otros temas (algo que lo aprecio ya que por esos minutos valorosos olvide todos los problemas que tenía)

Estaba tirado en mi cama sin saber que hacer, perdido mirando al techo intentando elegir una opción de las dos que tenía.

Si elegía la primera (que era luchar por __);
Tendría quizá suerte y podría recuperarla, o que salga todo mal y podría perder a __ definitivamente.

Si elegía la segunda (que era dejar ir a __);
Traicionaría mis sentimientos y quizá este mal, porque yo solo la quiero a ella.
Y quizá nunca más en mi vida pueda saber algo de ella a no ser que le pregunte a Dylan, aunque estaría bien, ella ya no tendría más problemas conmigo...














Me quede pensando aún más rato sin saber que hacer... pero creo que ya me decidí por una de las opciones, y debería de seguir fuertemente con esa.





Pov:__

Estaba leyendo un libro en el sofá de mi salón mientras música resonaba por mis audífonos.
Era un día tranquilo después del ajetreo de ayer, muchas cosas pasaron, y solo quería paz.

Esa "paz" no duró tanto ya que sentí como la música paró de sonar y empezó a sonar la musiquita del tono de llamada.

Agarre el móvil y vi quien me estaba llamando... era Thomas.

Confundida, desconecto mis audífonos del móvil y atiendo la llamada.

—¿Si?— digo simplemente esperando escuchar a Thomas al otro lado de la llamada.

—Hola __... ammmm, te quería decir algo— habla Thomas al otro lado de la llamada.

Confundida dejo el libro en la mesita más cercana al sofá y me dispongo a contestar.

—Eh, claro ¿Qué ocurre?— digo mientras espero su respuesta.

—¿Estarás ocupada hoy para la hora de la cena?— habla Thomas soltando un leve suspiro después de acabar con la pregunta.

—Mmm...— digo mientras intento recordar si tengo algo que hacer a esa hora —Pues...no, no estaré ocupada— le digo

—Vale, perfecto... ¿te gustaría venir a mi casa a las 20:30? Prepararé algo exquisito y además tengo algunas cosas que hablar contigo— dice Thomas.

Sonrío aunque sigo un poco preocupada y confundida por lo que deberíamos de hablar en la cena, no sé lo que es pero ya han comenzado mis dudas y mis pensamientos de algo.

—Clarooo, estaría genial, me encantaría— digo mientras sonrío, el no puede ver mi sonrisa pero seguro que sabe que estoy sonriendo.

—Perfecto, entonces te veré a esa hora a mi casa... si quieres puedo venir a recogerte— habla Thomas rápidamente.

—Oh...no, no, no, no hace falta de verdad, puedo venir en mi coche— digo —pero gracias de todas formas—

—No hay de que, y aquí te esperare— dice por último Thomas, no le podía ver la cara pero sabía que estaba sonriendo, lo conozco demasiado y lo sabia.

Nos despedimos después de unos segundos y colgué la llamada.

Eran ahora mismo las 17:09 tenía tiempo para prepararme así que me puse una alarma para las 19:00 para a esa hora prepararme y ahora mismo poder seguir leyendo, aunque ni bien agarre el libro de la mesita y escucho como alguien me llama por teléfono.

Suspiro y miro el móvil abriéndolo para saber quien era, y era Chandler.

—¿Si?— digo como siempre.

—Amor... holaa— habla Chandler con su típica voz dulce cuando me habla.

—Hola amor ¿qué ocurre?— digo mientras me recuesto mejor en el sofá con el móvil puesto en altavoz.

—Quería invitarte hoy a cenar en algún restaurante— dice Chandler.

—Ouuu, esta noche no podré, cenaré con Thomas— hablo un poco apenada.

—¿Con Thomas?— dice Chandler confundido.

—Si... con él ¿por qué?— digo.

—No... por nada, bueno, entonces mañana si quieres podemos ir a cenar— dice Chandler con un tono un poco más duro.

—Valee, me parece bien, ya hablaremos entonces— le digo feliz para luego despedirnos y él colgará.

Sin esperar que alguien más me moleste, agarre el libro y empecé a leer nuevamente.













Y hasta aquí el capítulo 34, espero que os haya gustado...

Amor entre actores. [Thomas Brodie-Sangster y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora