Love and sweetness.「Kiyoomi Sakusa.」

Capítulo 12.

Los juegos olímpicos se celebraron en Tokyo, Japón, en el mes de Julio del 2021 porque un año anterior a ese no se pudo por culpa de la pandemia del COVID 19, en el sitio donde se jugarían los juegos ni siquiera habría muchos espectadores, además tuvieron que pasar por muchas pruebas médicas antes de ir ahí, lo cual para Kiyoomi resultó ser de cierta forma un gran alivio.

Se quedarían como huéspedes en el lugar donde celebrarían los juegos, la llamada Villa Olímpica, se les llevó a él y a los otros jugadores a sus respectivas habitaciones en las cuales para su mediana sorpresa las camas eran de cartón, la razón ya la intuía, en todo caso esperaba que sus compañeros no intentaran romperlas para “Probar su resistencia” como los grandísimos idiotas que eran algunos.

Cuando terminó de desempacar y acomodar sus cosas sacó su celular con intención de enviarle un mensaje a Hikaru, quería decirle que ya estaba en la Villa Olímpica y lo hermosa que se veía seguramente leyendo lo que él le decía, también que estaba en la misma habitación que su primo y Atsumu.

Sonreía al mismo tiempo que le enviaba mensajes a su novia, luego se dió cuenta de que su primo Motoya Komori y su compañero de equipo Atsumu Miya estaban con él, viéndolo. Les dió curiosidad, ambos sabían muy bien de quien podría tratarse, pero querían que Kiyoomi se los dijera.

—¿Le estás enviando mensajes a tu novia, Omi-kun?—interrogó Atsumu con una sonrisa pícara.

—Eso no es de tu incumbencia, Miya.—contestó Sakusa intentando ocultar su sonrojo por la vergüenza.

—Kiyoomi, ¿Cuándo podré conocerla? Ya tiene mucho tiempo que me hablas de ella, pero no nos has presentado, ¿Por qué?

—La conocerás, Motoya, pero primero ella debe estar de acuerdo, no quiero que se sienta incómoda.—le respondió Kiyoomi ya comenzando a enojarse y queriendo también fastidiar a su primo.

—Y, ¿Cómo es que se siente cómoda contigo entonces?—cuestionó Motoya de vuelta con intención de molestar a Kiyoomi también.

—Porque yo la amo y me ama, no espero que lo entiendas tú, que no tienes a nadie.

Después hubo un silencio corto en el que parecieron darse cuenta de que debían parar aquella discusión para ahorrarse palabras hirientes que a ninguno de los dos les iba a gustar escuchar. En situaciones así ya habían estado muchas veces en el pasado, discutían y antes de que aquello pudiera volverse peor le ponían fin para después darse una disculpa.

—Estoy seguro de que a ella le encantará conocerte, Motoya. Tiene una buena imagen de ti.

—¿En serio?

—Sí, en serio.

Mientras los tres chicos pasaban el rato conversando sobre voleibol y su vida en general cada uno sentado en su cama de cartón, Hikaru desde su hogar organizaba su horario para poder equilibrar su trabajo con ver todos y cada uno de los partidos que su amado tendría. En algún momento dejó de mensajear con Kiyoomi, supuso que se habría quedado dormido u tal vez se había ido a hacer algo con sus compañeros, durante un momento miró con ternura el chat que tenía con su novio, todo lo que tuviera que ver con él le provocaba aquello, fue a su galería a ver las fotografías que tenía con él y de él, deslizaba viendo con cara de amor todo, se detuvo en una en particular para darle un largo beso a falta de estar el muchacho con ella, necesitaba imprimir unas cuantas.

Había conseguido comprar la camisa con el número 15 igual a la que Kiyoomi portaría durante los juegos, sería lindo poder sentirse cerca de él aunque sea de esa manera, además era de la misma talla del muchacho, detalle que para ella lo hacía mejor.

Se fue a dormir, pues sentía mucho sueño, al mismo tiempo que no veía la hora de ver a Kiyoomi jugando en las olimpiadas al día siguiente.

Despertó temprano en la mañana, preguntándose cómo estaría Kiyoomi, quizá tuvo que haberse levantado mucho más temprano que ella para prepararse por la cuestión del calentamiento, entre otras cosas. Procedió a vestirse, arreglarse, desayunar, ordenar un poco su hogar, entre otras actividades, aquello iba a durar días, mientras organizaba los asuntos de su trabajo encendió su televisor para sintonizar el canal por el que pasarían los juegos olímpicos, tardarían un poco en comenzar, se sentó junto a sus documentos y demás, comenzando a ver con atención aquello minutos después, a pesar de que no era la primera vez que Kiyoomi salía en televisión no impedía que se sintiera de cierta forma emocionada, más tomando en cuenta que aquel evento lo vería una buena parte del planeta, se sentía emocionada por él, de ver a su novio en televisión y que todos vieran lo talentoso que era.