RIVALS TO ROOMIES

Capítulo 10

MAX

Habían pasado dos semanas desde la discusión que había tenido con Bradley; claro, si es que se puede llamar discusión a Bradley siendo todo despectivo y cruel, insultándolo a él, a sus amigos y a su papá cuando él solo estaba siendo amable. Aún recordaba cada palabra salida de la boca de Bradley, y la sangre le hervía por las venas. ¿Cómo fue tan imbécil para pensar que la convivencia podría resultar? Era evidente que no. No importaba si se habían impuesto reglas; Bradley había roto la primera regla y, pese a lo que habían acordado, Max no tenía ningún interés en hablar con Bradley sobre lo que pasó, sobre todo porque estaba seguro de que el castaño no se arrepentía ni un poquito.

Ese día, después de que Bradley se encerrara en el baño, Max agarró su skate y salió de la habitación, dirigiéndose al parque de skate. No recuerda cuánto tiempo pasó patinando, mientras intentaba botar toda su ira y frustración en cada vuelta que daba. Cuando por fin se detuvo y se fue a una de las esquinas, se dio cuenta de que ahí estaban Bobby y PJ. Al parecer, se habían dado cuenta de su estado y habían preferido esperar para acercarse.

Max no dudó en contarles todo lo que había pasado, excepto el hecho de haberse dado cuenta de que Bradley había estado llorando. Siendo honesto, sin importar lo muy enojado que estuviera con Bradley, le parecía que eso era muy personal para contarlo. Obviamente, sus amigos, después de escuchar todo, no se detuvieron en decir lo imbécil que era Bradley y que Max no podía seguir conviviendo con él. Max no sabía qué pensar. Después de haber creado las reglas, realmente había pensado que podrían llevar la fiesta en paz; es decir, sabía que no sería fácil, pero nunca pensó que llegarían hasta ese punto.

Ese día, Max durmió en la habitación de Bobby y PJ. Sus amigos le habían prestado un saco de dormir y se quedaron conversando hasta tarde, como en los viejos tiempos. Aunque sus amigos le habían propuesto quedarse más que solo esa noche, no era una opción para Max. Y si bien se había propuesto evitar a toda costa a Bradley, eso no quitaba el hecho de que esa seguía siendo su habitación y no se iba a rendir tan fácil. Uppercrust estaba muy equivocado si piensa que puede tratar a la gente como la mierda y salirse con la suya. Después de todo, eso era lo que quiso Bradley desde el inicio, que Max se fuera de la habitación.

Durante esas dos semanas, Max se mantuvo ocupado con sus estudios, pasando tiempo con sus amigos y con el skate. Cada vez que volvía al dormitorio, lo hacía tarde y esperaba que Bradley saliera de la habitación por las mañanas para levantarse e irse, evitando cualquier tipo de interacción con Bradley. Sin embargo, eso no había evitado del todo el haberlo encontrado algunas noches todavía despierto, mayormente en su computadora o a punto de dormir. Cuando lo veía, no podía evitar que una ola de resentimiento lo envolviera. Lo que más le había molestado a Max era que se metiera con su papá.

Él siempre había pensado que su padre era demasiado bueno e ingenuo, incluso un poco tonto. Lo había llegado a avergonzar muchas veces, como cuando se inscribió en la universidad junto con él para que no se separaran. Siendo honesto consigo mismo, Max por mucho tiempo había deseado que Goofy no fuera tan Goofy. Al menos eso había pensado gran parte de su vida, pero después de terminar los Game X y pasar el verano juntos, Max se había dado cuenta de que el tonto había sido él. Tenía al mejor papá; Goofy lo amaba más que a nada en el mundo y siempre se lo había demostrado. Y sin importar cómo Max se hubiera comportado en el pasado, Goofy siempre había estado ahí, perdonándolo y haciéndolo sentir bien. Goofy nunca se enojaba con él. Por eso, cuando Bradley lo llamó "patético", cruzó una línea en la mente de Max. No soportaba que alguien se refiriera así de él. No después de cómo el mismo Max había sido un completo idiota con su papá.

Una noche, después de haberse quedado hasta tarde en el dormitorio de Bobby y PJ, Max volvió a su habitación. Al abrir la puerta, encontró a Bradley sentado en su escritorio, trabajando en su computadora. Max sintió una mezcla de irritación y cansancio. Ignorándolo, se dirigió directamente a su lado de la habitación, dejó su mochila con un golpe y se dedicó a ordenar sus cosas para el día siguiente.