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"Era la única forma de estar contigo"
Entre a la habitación de Scott sin tocar, me sorprendí por un momento al ver que no estaba solo, pero mi sorpresa no duro mucho al ver que se trataba de Stiles quien parecía que ahora vivía aquí.
—¿Puedes tocar?—dijo Scott alto molesto.
—No creí que estuvieras haciendo algo tan importante.
—Hola _____— me saludó Stiles con una gran sonrisa.
—Hola Stiles— lo saludé para después volver a dirigirme a mi hermano—. Mamá te está buscando.
—¿Para qué?— preguntó Scott.
—No lo se.
Ya había cumplido con mi parte del trato en decirle a Scott que mamá lo estaba buscando, así que solo me fui y cerré la puerta detrás de mi.
—Es tan molesta— se quejó Scott.
Stiles solo se quedó mirando la puerta.
Habían pasado unos días, estaba en el baño de mi habitación cuando escuche un sonido que me alertó al instante, tenía miedo, salí del baño y tome un bate de béisbol que tenía y me acerqué a mi cama donde escuché algo, estaba a nada de golpearlo hasta que ambos gritamos.
—¿STILES?—le grité al darme cuenta que era él quien había irrumpido a mi habitación en medio de la noche.
—¿______?— me miró confundido—. ¿Qué haces aquí?
—¿Tu qué haces aquí? Casi me matas del susto idiota—le dije molesta.
—Uy, me equivoqué de ventana, perdón creí que era la de Scott.
En eso mi mamá y Scott llegaron a mi cuarto muy asustados.
—¿Qué paso?— me cuestionó muy asustada mi mamá—. ¿Stiles?
—Scott sácalo de mi cuarto— dije molesta.
Scott parecía que lo estaba disfrutando, pero cuando mamá lo miró como si estuviera apunto de matarlo bajo la mirada y sacó a Stiles de mi habitación.
—¡Lo siento!—gritó Stiles cuando ya estaba fuera.
Otra semana paso y ver a Stiles se había hecho una costumbre en mi día a día.
