13. Slow dancing in the dark

173 20 0
                                    


Capitulo 13:

Slow dancing in the dark
-Joji

-When I'm around slow dancing in the dark
-Don't follow me, you'll end up my arms
-You done made up your mind
-I don't need, no more signs

-Can you?
-Can you?

-Give me reasons we should be complete
-You should be whit him, I' can't compete
-You looked at me like, I was someone else, oh well

Narra Ari…

Juan besaba mi cuello, estaba tan caliente pero al mismo tiempo un poco cuerda.

-Subio con no sé quién al segundo piso”

Oh Dios las palabras de Nuvia.

-“Ve por ella que ya llevan cinco minutos arriba y si pasa más tiempo te roban a tu mujer”

Esas palabras no salen de mi cabeza, están prácticamente en bucle en mi mente.

—Juan— Dije haciéndome a un lado.

—¿Qué pasa linda?— Dijo de forma ¿Cariñosa? —Todo va a salir bien no te preocupes— Dijo acariciando mi muslo.

—No… hazte para allá— Quite su mano bruscamente.

No podía dejar que específicamente Samantha estuviera haciendo lo mismo que yo, no podía. No me cabía en la cabeza si quiera imaginar ella con alguien más. No podía.

—¡¿Qué te pasa?!

—Perdón, necesito irme— Me levanté de su cama, acomode mi ropa y él seguía desconcertado.

—¿Perdón? No Abril no puedes hacer esto.

—¿Quieres ver qué sí?

—Estupida, prendes el boiler y no te metes a bañar.

—¡¿Qué?!— No me iba a dejar, claro que le dí una cachetada.

—¡¿Qué mierdas te pasa?! Ya vete si no quieres que haga algo de lo que te arrepentirás— Me levantó la mano igual, pero no se atrevió a golpearme.

Me fui, tanto por su advertencia como porque no podía perder mas tiempo en discusiones estúpidas, necesitaba detener a Samantha ya.






––––––––––––––––––––––







Okay.

No pensé bien las cosas.

Estoy medio borracha no puedo conducir así, y aunque pudiera no tengo mi auto, está en casa de Vicky lo deje porque Juan me trajo.

Estoy idiota.

Eso es un hecho, y ahora que hago.

No sé si Dios me ama o solamente si Nuvia se preocupa por mí pero justo el auto de Nuvia se acaba de estacionar frente a mí.

GOLDEN HOUR | Rivari Donde viven las historias. Descúbrelo ahora