Llego a casa dos horas y media más tarde, con las cuerdas vocales hechas puré de tanto usarlas y la mandíbula desencajada de tanto moverla al cantar. Y sin embargo, nunca me había sentido mejor. Estoy cansada, pero al mismo tiempo me siento completa, feliz, satisfecha. Como si hubiese sido el día más productivo de mi vida. Aunque, echando la vista atrás, probablemente haya sido uno de los días más productivos desde que estoy en Londres.
Luke y los chicos se han tenido que quedar ensayando así que Dave me ha dado dinero para que cogiese un taxi hasta casa puesto que mi coche sigue aparcado debajo de un piso al que no recuerdo bien cómo llegar y me había dejado la cartera en algún lugar de mi casa.
Nada más entrar me encuentro a Rachel viendo la televisión tumbada en el sofá. Creo que son las cuatro o cinco de la tarde. Al tirarme a la piscina el reloj se me estropeó y el móvil se me quedó sin batería a mitad de los ensayos así que no lo sé con exactitud.
Nada más oír mis pasos Rachel levanta la vista de la tele para mirarme.
-Oye putón - suele referirse a mi de esta forma con frecuencia. Sinceramente, creo que usa muchas más palabrotas que verbos a la hora de formar oraciones -¿Dónde estabas?
-Bah- le hago un ademán de desdén con la mano- no lo entenderías. Son cosas de famosos.
-Eres idiota- me responde Rachel riéndose mientras me tira un cogín. Sin embargo falla y le da a un baso de cristal que hay en una estantería cercana. Yo me río.
-Admiro muchas cosas de ti Rach, pero ten por seguro que tu puntería no es una de ellas- le digo burlona.
-Tú ríete- me responde- pero te toca recogerlo.
-No lo voy a recoger- le digo levantando la voz. Ahora estoy en mi cuarto cambiándome de ropa- Lo has tirado tú.
-Pero tú has sido la idiota que ha provocado que lo tirase. Hanna cero, Rachel un millón.- Dice como si acabase de ganar la batalla.
-Tus argumentos son una mierda- le digo llegando de nuevo al salón ya con el pijama puesto y el pelo suelto.
-Tu cara sí que está hecha una mierda. Tienes unas ojeras tan oscuras que parecen la entrada de un portal interdimensional. ¿Te pasaste mucho ayer en la fiesta?- me pregunta y yo me siento en el sofá.
-Bueno- digo y ruedo los ojos.
-Así que te cogiste una borrachera igual de gorda que la vecina del cuarto ¿verdad?.
-Eres cruel- le respondo.
-Y tú evasiva, eso sí que es cruel.-yo me río- Venga dime, ¿qué tal ayer? ¿Te liaste con alguien?- dice Rachel con una entonación muy particular mientras me da codazos. Yo no lo puedo evitar y me sonrojo.
-No puede ser- dice Rachel al percatarse del colo rojo de mis mejillas- ¿Con quién? Sabía que no había hecho mal al llamarte putón antes.
-Con Calum- le digo con rapidez. Como si soltarlo lo antes posible me fuese a ahorrar la vergüenza.
-¿¡Con Calum?!-dice con voz chillona.
-Sí, con Calum- le vuelvo a repetir.
-En calidad de amiga- dice Rachel mientras levanta la palma de la mano extendida hacía mi- Chócala- Yo me río y le hago caso- Pero en calidad de mánager- dice y me estira de la oreja con fuerza- Eso es lo que te mereces.
-Oye, eso ha dolido bastante- Le digo con el ceño fruncido mientras me froto el lóbulo de la oreja. Me arde.
-Hanna en serio, tendrías que ser más lista. Vas liándote por ahí con un tío que podría hacer que te despidiesen. Incluso aunque hayas firmado un contrato, si quiere hacerlo, lo hará.- Yo pongo los ojos en blanco.
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ON TOUR
Romance"¿Hanna Harris? Enhorabuena, me complace informarla de que la hemos seleccionado como la nueva telonera de 5 Seconds of Summer en su tour mundial" Y pensar que todo esto comenzó con una sola llamada.