Solo Serás Mío (Budo x Taro)

Semana 2 - Día 1 Parte 2

Mientras Taro y Ayano disfrutaban de su almuerzo en la azotea, un escalofrío recorrió el cuerpo de Taro, sentía que alguien lo estuviera espiando, el chico miró a los lados y no vio a nadie, esa sensación le pareció aterrador, a lo cual Ayano lo notó y preguntó:

Ayano - ¿Qué sucede?, parece que viste un fantasma

Taro - No lo sé, fue como que alguien me estuviera viendo fijamente - explicó

Ayano - No hay muchas personas alrededor, pero no me sorprendería que alguien te estuviera viendo o escuchando - exclamó con seriedad

Taro - ¿A qué te refieres? - preguntó con curiosidad

Ayano - No puedo explicártelo, pero aquí pasan cosas muy extrañas - explica en voz baja

Ayano se guarda lo que tiene en mano y se levanta para marcharse

Taro - ¿Te vas tan pronto? - Preguntó

Ayano - Si, tengo unos asuntos que atender - menciona en pocas palabras

Taro - ¿Te puedo acompañar? - sugiere

Ayano - Lo siento, trabajo sola - dice cortante mientras se va

Taro - Bueno nos vemos... - menciona entre dientes

Taro, al quedarse sentado solo en la azotea, siente cómo el viento le refresca el rostro. El lugar está desierto, solo se escuchan los ecos lejanos de las risas y conversaciones de los estudiantes en el patio, sus pensamientos comienzan a divagar, pensando en los eventos recientes que han marcado su vida. Al recuperar el sentido se muestra con una sensación de vacío y desconcierto, se siente perdido y sin una dirección clara. Su círculo de amistades al ser reducido, por no decir inexistente, sólo puede contar con Budo, siendo un "amigo" cercano. Sin embargo, la duda lo invade ya que no quiere ser una molestia para Budo, quien probablemente esté disfrutando de su almuerzo en compañía de sus compañeros.

Taro se pregunta si debería interrumpir a Budo, arriesgándose a sentirse intrusivo, o si sería mejor esperar hasta después de clases para hablar con él y encontrar alguna actividad que le distraiga. La indecisión lo consume mientras el tiempo avanza, cada minuto que pasa parece hacerlo como si fuera una decisión de vida o Muerte. Mira su reloj y se da cuenta de que el almuerzo está a punto de terminar, si decide no actuar ahora, podría perder la oportunidad de hablar con Budo y poder tener la compañía de alguien. Finalmente, se pone de pie, decidido a no dejarse vencer por la introversión, a pasos lentos se dirige hacia la escalera, y decide buscar al chico.

Al bajar las escaleras Taro choca con Budo, y mientras se separan ambos se toman el tiempo para hablar.

Budo - ¡Taro! Justo a quien quería ver - exclama Budo - ¿Qué haces por aquí solo?

Taro - Solo necesitaba un momento para pensar - confiesa

Budo - Entiendo, a veces, un cambio de perspectiva puede ayudar, ¿Has pensado en unirte a algún club? Podría ser una buena forma de despejar la mente y conocer a más personas - asiente comprensivo y le da una palmada en el hombro

Taro baja la mirada, considerando la idea ya que desde la semana anterior se había visto a sí mismo como una persona de clubes, pero la compañía de Budo lo hacía sentir reconfortante.

Taro - No estoy seguro... no sé si encajaría en algún club - responde sintiéndose vulnerable

Budo - Podrías probar con el club de artes marciales. Digo, es un buen lugar para liberar el estrés y mejorar la concentración, además, siempre estamos buscando nuevos miembros, tal vez podrías venir a otra sesión y ver si le das otra oportunidad, pero no tienes que decidir nada ahora - dice mientras sonríe, aprovechando la oportunidad

Taro - No lo sé, Budo no soy muy bueno en cosas físicas - menciona avergonzado

Budo - No te preocupes por eso, todos empezamos desde cero y yo estaré allí para ayudarte ¿Qué dices? Solo una sesión y si no te gusta, no hay problema - expresa con una sonrisa inocente

Taro - Está bien, Lo intentaré - contestó mientras asiente con un leve gesto de la cabeza

Budo - ¡Genial! Te espero en el dojo después de clases, te prometo que no te arrepentirás - celebra mientras sonríe ampliamente y le da otra palmada en el hombro

Taro siente una mezcla de ansiedad y expectativa mientras continúan bajando las escaleras, Budo sigue hablando con entusiasmo sobre el club de artes marciales.

Budo - ¿Sabes, Taro? el club no es solo para aprender a pelear, es mucho más que eso, aprendes disciplina, respeto, y sobre todo, autoconfianza. Cuando yo empecé, era igual de inseguro - confiesa con un leve rubor en su rostro

Taro - ¿En serio? Yo te veo tan seguro de ti mismo - admitió con vergüenza

Budo - Sí, lo era, pero las artes marciales me ayudaron a encontrar mi centro, a tener más confianza en mí mismo, empecé a ver los desafíos como oportunidades en lugar de obstáculos, y ahora, quiero compartir eso contigo - declara mientras ve a Taro

En ese momento ambos se ven por un instante y apartan la mirada, mientras Taro reflexiona sobre lo que dice Budo, la idea de ganar autoconfianza suena atractiva, pero todavía tiene sus dudas.

Taro - ¿Y si no soy lo suficientemente bueno? ¿Y si hago el ridículo frente a todos? - cuestiona

Budo - No te preocupes por eso - responde mientras ríe suavemente

Budo - Nadie espera que seas un experto desde el primer día, todos en el club saben lo que es ser principiante, te apoyaremos y te ayudaremos a mejorar, además, no tienes que demostrarle nada a nadie, solo a ti mismo - aclara con sinceridad

Taro - ¿Y si no me gusta? ¿Si después de intentarlo, no me siento cómodo?

Budo - Entonces no pasa nada, no estarás obligado a quedarte - responde de manera comprensiva

Budo - Solo quiero que lo pruebes, a veces, salir de nuestra zona de confort nos lleva a descubrir cosas que realmente nos apasionan, pero si no es lo tuyo, al menos habrás tenido la experiencia y sabrás que lo intentaste - añade mientras lo mira a los ojos

Taro - devuelve la mirada y menciona - Gracias, Budo, aprecio mucho tu apoyo.

Budo - Para eso están los amigos, ¿no? Nos vemos en el dojo después de clases. No te preocupes, todo saldrá bien - expresa mientras le da una palmada en la espalda mientras llegan al primer piso

Con una última sonrisa, Budo se retira, dejando a Taro con un sentimiento de determinación renovada.

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