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Una cyberdanza peculiar, sentimientos encontrados, palabras que no pudieron ser dichas, el polvo estelar fluyendo en el aire...
Será real?
-Mi vida ha sido una mierda desde que tengo uso de memoria- Un chico de aproximadamente unos 16 años de edad caminaba por las calles de una moribunda ciudad, se lo veía cabizbajo, a sus alrededores se podían apreciar escenas cotidianas de este retorcido lugar...
Personas mayores metidas en cyberdanzas sexuales, personas vomitando después de tomar demasiado, gente drogada, Pervertidos acosando a chicas o incluso chicos... en resumen el infierno en tierra más conocido como:
El paraíso, Nightcity.
-Odio toda esta mierda, solo quiero llegar a casa y olvidarme de todas las molestias- El chico continuo caminando hasta llegar a un gran edificio de apartamentos y se dirigió a una puerta.
"Alguien en casa?" Pregunto al entrar al apartamento el chico pero no recibió respuesta.
"Demonios, parece que mamá tomará otro turno largo hoy, no me ha llamado, debe estar muy ocupada" el chico dijo sentándose en el sofá mientras su pierna se movía continuamente.
Su interfaz le mostró una llamada entrante.
"Hey doc, como esta todo? Que necesitas de mi?"
"Escúchame niño, necesito que pruebes unas cyberdanzas las cuales hackee y quiero vender, pero necesito comprobar que no freiran un puto cerebro" dijo una voz anciana entre risas sarcásticas.
"Y tengo que ser yo tu maldito sujeto de pruebas?" Dijo el chico a regañadientes.
"Deja de quejarte imbécil, soy yo el que te provee las cyberdanzas que me pides"
"Ya están en el buzón de mi apartamento?" Dijo el pelinegro.
"Así es, son dos, mueve tu culo y pruebalas, necesito saber si funcionan o no"
"No me jodas más, te llamare luego" corto la comunicación al levantarse hacia el buzón -Maldito vejestorio-
El chico encontró un paquete de no más de 10 cm que tenia escrito con rotulador rojo PARA JOEL.
Encontró un par de tarjetas de cyberdanzas, no tenían nombre ni ninguna indicación, simplemente eran dos chips simples de color rosado y rojo.
El chico decidió acostarse en el sofá y probo el chip rojo.
Una secuencia de colores y luces apareció en su cara y automáticamente despertó siendo otra persona, más alto, más musculoso y veía como estaba usando armas, podía sentir el poder de distintos cromos en su cuerpo y tambien la lluvia golpeando contra el, pero había un cromo en específico el cual sentía que le brindaba un gran poder, ignorando esto el solo camino inspeccionando el lugar, era la plaza principal de Nightcity, había dos hologramas de dos peces dando vueltas alrededor de la plaza.
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Al límite de la luna.
Action-Odio este lugar... Mi vida es siempre lo mismo, Odio la academia, Odio vivir aquí, Odio escuchar todo y a la vez sentirme tan sordo...- -Nightcity no es el paraíso que todos dicen, es el maldito infierno en vida.- -Porque te ves tan cerca pero está...