El terror y nerviosismo lo invadió.

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Solía ser normal el embarazo a temprana edad en aquella sociedad. Pocas explicaciones y educación sexual, a comparación de las grandes ganas que tenían aquellos jóvenes por experimentar, o solo, querer quitar ese calor de su cuerpo.

—Wow.

Observó la prueba, sorprendido. ¿Cómo le explicaba al chico que tenía en frente aquel resultado? debió de haber rechazado el acompañarlo.

—¿Qué dice?—preguntó, susurrando.

—Positivo.

Ken no era tan expresivo. Aunque dijera cosas importantes, su expresión aún seguía siendo lo mismo, pero esta vez, su boca fue abierta y sus cejas se elevaron un poco mostrandose sorprendido.
A cambio Takemichi, sintió como su cuerpo comenzaba a pesar. Este cayó por poco al piso, si no fuera por que Draken lo había afirmado antes de caer.

—Cuidado—dijo Ken.

—¿E-Es real...?—preguntó, temblando—Dame, dame.

Tomó la prueba.

—Dios... ¿qué haré?

—Abortar, ¿no? es lo mejor... más seguro—dijo Ken.

—No puedo, no me dejan. Necesito un adulto... ni siquiera sé si lo hacen de forma legal.

Draken pensó por unos segundos en silencio.

—Es verdad...—palmeó su cabeza.

Takemichi comenzó a sentir un pequeño ataque de pánico. Su mano se puso en su pecho y su respiración comenzó a agitarse con rapidez.
Su mano libre, comenzó a pasar por su propio rostro, pareciendo incluso que lo apretaba con algo de fuerza, cayendo lentamente al piso debido a la sensación de debilidad en sus piernas.

—Takemichi, Takemichi—lo afirmó apenas—Tranquilo, por favor.

Ryuguji no era el mejor consolando, e incluso sus manos parecían comenzar a temblar debido a su nulo conocimiento de cómo hacer sentir mejor al chico. Verlo llorar hacia que su mente se pusiera en blanco totalmente, pero suponía que un abrazo podría ayudar o eso esperaba.

Las palmaditas en la espalda comenzaron a calmar a Takemichi. De cierta forma, había creado un vínculo amistoso con aquel chico, por lo cual, ya estaba dentro de las personas las cuales consideraba parte de su familia. Era común que hubiera un tipo de vínculo amistoso, o al menos, crear aquel vínculo con alguien a quien consideraba cercano. Podía llegar a formarse con gente que conocía hace años, o gente que apenas estaba conociendo.

—¿Llamo a Manjiro...?

No era que Draken quisiera deshacerse de la situación, pero entendía al menos que su amigo era la pareja destinada de Takemichi, y a la vez, su alfa así que pensaba que estarían más cómodos, o al menos, Takemichi se sentiría más seguro.

—Ujum...—asintió Takemichi.

No quería llamarlo, o al menos, no aún pero su cuerpo parecía necesitarlo, fuera del ámbito sexual. Solo necesitaba su compañía, odiaba esa necesidad de tenerlo cerca siempre.

Aún en medio del abrazo, Ken tomó su celular para así hablarle a aquel chico.

"Tu. Casa de Takemichi, ahora".

"¿Para quee? estoy ocupado...".

"No me interesa. Es importante".

"Bien".

Manjiro por otro lado, apenas se levantó. Estaba a punto de dormir, y ciertamente le daba flojera levantarse, pero suponía que debía hacerlo. Era su deber, o al menos eso le repetía Emma constantemente, luego de saber lo que había pasado aquel día.

—¿Dónde vas?—preguntó Emma, curiosa.

—A casa de Takemichi... Ken-chin me habló—Frotó sus ojos—No sé que quiere.

—Debe ser algo importante, ¿no?

—Espero...—bostezó—era hora de mi siesta.

—¡Debes hacerte responsable de todo! es tu Omega, después de todo—palmeó su espalda con fuerza—Es tu pareja destinada, ¿no es genial? básicamente es encontrar tu hilo rojo... ¡adoro esa leyenda!

—No es lindo conocer a alguien de la nada... y sentirse así—Cubrió su rostro—ni siquiera siento el cómo es estar enamorado... es raro.

—Con el tiempo... las parejas destinadas, están destinadas. Se enamorarán en cualquier momento.

—Supongo...—murmuró.

—Solo debes pasar más tiempo con el.

Manjiro pensó en eso y solo asintió, para último, ponerse sus zapatillas.

Lo ponía algo ansioso el hecho de que su amigo era quien le había hablado, ¿había pasado algo importante? en todo el camino, sus pensamientos iban comiéndose su mente poco a poco, cayendo en una pequeña desesperación la cual terminó una vez vió a Ken abrirle la puerta.

—Está en su habitación. Allá—Apuntó—ve... suerte.

—¿Qué pasó?—Elevó su mirada.

—El te lo dirá. Yo... me voy, los dejo solos—rascó su nuca.

—No me dejes así... Ken-chin—abultó sus labios.

—No creo que deba de meterme.

Manjiro bufó, respirando de forma profunda para así dar el primer paso para entrar a la casa. Apretaba sus  manos suavemente, incluso llegando a rasguñarlas.

—Takemichi...—Tocó la puerta.

—Pasa.

—Permiso—Entró.

Takemichi estiró los brazos hacia el chico a quien le costó un poco procesar la situación. El aroma del lugar parecía hacerlo sentir reconfortado, sintiéndose cómodo, sin aquella incomodidad que tenía al no estar al lado del chico.
Segundos después, Manjiro se acercó al chico para poder abrazarlo. Este comenzó a soltar pequeñas lágrimas.

—¿Que sucedió, Takemichi?—murmuró.

—Es que... e-es que...—tembloroso—Estoy e-embarazado.

—¿Qué?—lo separó—¿Estás jugando?

—¿Cómo jugaría con algo así?—Lo miró a los ojos—T-Tendremos un bebé.

Manjiro en ese momento, se alejó y comenzó a retroceder hasta chocar con la puerta. El terror y nerviosismo lo invadió completamente.

Continuará...

Luego del tema de Takemichi y Manjiro, pasaremos a la pareja principal! luego de unos años. Recuerden que emma aún no tiene la edad para saber su casta y esop :333

quería tocar muchos temas en la historia peroo esop, chau💕 nos vemos en el próximo capítulo

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⏰ Última actualización: Jul 19 ⏰

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