ＭＩＮＥ || 𝙊𝙗𝙞𝙠𝙖𝙠𝙖

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Kakashi se despierta con un dolor muy marcado en el hombro izquierdo. Gime mientras se da vuelta y se toca el punto dolorido para frotarse y aliviar el dolor. Al mismo tiempo, intenta recordar qué sucedió exactamente el día anterior.

Recuerda haber salido en una misión, un equipo de cinco personas. Se suponía que debían eliminar a algunos ninjas desaparecidos de Iwa. No puede recordar cómo logró terminar la tarea o regresar a casa hasta que siente lo que puede reconocer como una marca de mordedura en su piel.

El pánico se apodera de su estómago y Hatake se sienta, con un sudor frío en la frente. Los recuerdos vuelven a invadirlo, cómo el calor lo golpeó y cómo el ninja de Iwa se lo llevó con la intención de usarlo...

Pero no hay recuerdos del enemigo desnudándolo. En cambio, Kakashi recuerda al extraño enmascarado que provocó un baño de sangre y al misterioso salvador que lo alejó aún más de su equipo. Aún así, eso no calma sus pensamientos acelerados cuando finalmente recuerda cómo se apareó.

No entiende por qué confiaría en un Alfa cualquiera. Kakashi maldice lo débil que lo hizo el calor y culpa a su naturaleza Omega por hacerlo someterse a alguien que no conoce. Aunque es inusual que quiera un vínculo mutuo, el extraño no lastimó al hombre de cabello plateado al final. 

Kakashi acerca sus rodillas al pecho mientras piensa en todo lo que sabe sobre su Alfa. Pero las únicas pistas que tiene son el pelo largo y oscuro y una máscara naranja que oculta su rostro. La voz no se parece en nada a las que conoce a pesar de la innegable sensación de confianza y familiaridad.

Hatake quiere sentirse seguro ahora. De hecho, por primera vez, no se siente presionado a tomar los supresores de calor. Acaban de controlar su calor, aunque todo su cuerpo se siente como si estuviera en llamas. Kakashi todavía no puede estar seguro de cómo será su próximo celo o, lo que es peor, cuándo exactamente podría atacar.

Se levanta lentamente de la cama y decide ducharse primero. Coge una de las camisetas negras de manga larga que tiene y se dirige al baño. Cuando su mirada se posa en el espejo, siente que otra oleada de ansiedad lo invade.

Tiene un moretón ancho y de un morado intenso en el hombro. No duele tanto como debería a juzgar por su aspecto. La marca de los dientes del Alfa es evidente y, si alguien la viera, sabría inmediatamente qué le ha pasado a Kakashi. Mientras deja la ropa a un lado, se siente agradecido por el cuello alto y la máscara que le cubrirá todo el cuello. 

El Omega pasa suficiente tiempo en la ducha para calmar sus pensamientos acelerados. No le sirven de nada, aunque se las arregla para encontrar una excusa que le dará a sus superiores. Todavía no está seguro de cómo ha vuelto a la aldea con un extraño sin que lo hayan visto. Hay recuerdos de haber presenciado algún tipo de jutsu espacio-temporal, pero no es suficiente para explicarlo. 

Kakashi intenta no sentirse inútil mientras se viste y se ata la cinta para la cabeza sobre el ojo izquierdo. Era el capitán del equipo y, sin embargo, está bastante seguro de que ya debe haber entregado todo el informe de la misión. Si tiene suerte, los miembros de su equipo ya le han explicado la situación.

Pero él no cree en la suerte, especialmente en la suya propia. Se prepara mentalmente para los susurros hirientes que surgen a su alrededor una vez más. Esta vez, sin embargo, el nombre no es "Hatake Sakumo", sino "Hatake Kakashi". Sabe que todos en ANBU ya deben saberlo. Y si no lo saben, pronto lo sabrán. Incluso si nadie tiene malas intenciones, Kakashi sabe que no se quedarán callados al respecto.

Desearía poder evaluar su olor, pero como es un Omega, no puede realmente notar cuál es la diferencia en su aura y no tiene un Alfa de confianza cerca. En todo caso, siente que ahora mismo solo hay un Alfa de confianza en su vida. Por mucho que lo odie, por ahora, el extraño no parece una amenaza.