🔷️Epilogo: azul🔷️

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4 Años después.
Pov. Jungkook.

- Junmin ¿quien le pinto las uñas a hershey?

-fue el Sir. Camleot oso III- la niña de rizos y piel aceitunada apunto al oso de felpa.

-¿ah si? ¿Entonces tu oso tomo los plumones permanentes de mi oficina y le pinto las uñas de azul al pobre hershey.

-shi- asintió fervilmente.

-Junmin...

-mande papá.

-sabes que no es bueno decir mentiras.

Ella se quedo viéndome con sus enormes ojos color miel.

-¿quieres que traiga a papí?

Sus ojos se ampliaron y un chillido salido entre sus chimuelos dientes.

-noo, papí no me va a dejar ver tele.

-¿entonces?

Ella suspiro rendida miro el suelo y su rizos color negro taparon su rostro y por un momento pense que comenzaría a llorar, pero levanto su rostro, sus puños estaban cerrados con fuerza, sus labios apretados, sus ojos determinantes y con toda su valentía admitió su fechoría.

-yo lo hice, fui yo papá, yo pinte las uñas a hershey- dijo un poco alto y bastante claro para una niña de 3 años- Sir. Camelot no hizo nada.

-esa es mi niña.

Ella sonrió.

-sin embargo.

Su sonrisa se borro.

-te dije que no te quería dentro de mi oficina, además y se que esto no lo sabias nena, pero no puedes ponerle cualquier cosa a hershey porque le puede hacer daño ¿okay?

-okay.

-bien, ahora te disculpas con Sir. Camelot Oso III.

-perdón Oso.

-buena niña- bese su cabeza y deje que siguiera jugando con su caja registradora de barbie.

Después de varios años intentando adoptar por fin lo conseguimos, al parecer y de suerte Jeongguk tenia contactos en un orfanato en Busan.

Junmin era claramente una mezcla entre asiatica y posiblemente latina y era la niña mas hermosa en la faz de la tierra sin duda.

Jimin y yo cumplimos nuestro sueño de ser padres por fin y no cabiamos de la felicidad, nuestra niña, nuestro rayo de sol, era simplemente perfecta y era nuestra.
Cada que con su vocesita nos llamaba "Papá" "Papi" no hacia increíblemente felices, cada vez sin falta era el efecto que tenia en nosotros.

La puerta de la entrada fue abierta y el super modelo Park Jimin entro por ella visitando de Channel y oliendo a Dior.

-amor quiero mimos- estiro sus brazos hacia mi.

Yo inmediatamente como un imán atraído a su alma gemela, lo tome entre mi brazos, mis manos tomando su pequeña cintura, y mis labios besando su tiernas mejillas.

-¿día malo?- pregunte antes de besar sus labios castamente.

-no, fue un excelente día, solo quiero mimos.

-que cosita mas caprichosa eres- le acuse.

El se encogió de hombros- no pueden culparme, mi esposo es hermoso, el mejor de todos, el me tiene muy malcriado.

-¿ah si?- bese su cuello dejando leves mordidas.

-sí, mi esposo me conciente en todo, me mima y me trata como a su dios... y como uno- suspiro dándome mas espacio para dejar mis marcas.

-mmh suena como un buen tipo ese tal esposo.

-el mejor- me corrigio.

Deje su cuello antes de hacer un collar de chupetones- ¿estas cansado? ¿te gustaría salir a cenar?

-uy ¿y a donde nos vas a llevar?

-es turno de Junmin de elegir- le recorde.

-ella siempre escoges los mejores lugares.

-cierto, el restaurante de cereal fue iconico.

El asintió riendo- Junmin, ponte los zapatos y ven a saludar a papí- Jimin hablo por el intercomunicador en la pared.

-¡Papí llegaste! No veas las patas de hershey ya bajo- respondió atraves del aparato.

-¿las patas de hershey?- me interrogó.

No alcance a contestar pues la ladradora  bajo las escaleras luciendo esa uñas azules.

-mañana la llevo a la estética- suspire viendo a la perrita.

-por favor, porque ese color no le queda muy bien- bromeo.

-papí- Junmin salto para abrazarle.

Jimin la sujeto en aire y la abrazo, beso sus cachetes mientras esta reía encantada.

-¡papí me llenas de saliva!- se quejo sin embargo se veia muy feliz.

-¿quieres salir a cenar?

-¡me toca a mi escoger!- recordó.

-¿y a donde vamos?- pregunte.

-¡por tamales!

Y fue así que terminamos comiendo en un food truck de comida latina cerca del río Han.

-mmmh que rico ponle crema sabe aun mejor.

Mire a mi familia y no pude sentirme mejor, lo tenia todo, no podia pedir algo mas y es que algo mejor no existía.

A veces pienso en lo que paso hace 4 años, en la distancia que puse con Jimin que fue lo equivalente a caminar con los pies rotos. En mi enfermedad y lo mal que lo pase, en lo asustado que estaba por morir, por la incertidumbre de dejar a Jimin, en como me sentí cuando vi la solicitud de divorcio que fue mucho mas horrible que cada que el doctor me decía que estaba empeorando.

Y luego estoy aquí, habiendo superando todo aquello, la pesadilla termino, el miedo se desintergo para dejarme junto a estos dos ángeles.

-papá quiero una empanda de carne también.

-yo igual- dijo mi esposo cubriendo su boca.

-lo que me pidan, pidanme lo que quieran.

Que ire al inframundo por ello de ser necesario.

-bueno también quello un dulce de leche, ¡no! 3 mejor- mi niña se aprovecho.

-yo también te amo- dijo Jimin entendiendo mi mirada.

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Bueno esta historia llega al final, un pequeño epilogo para cumplir el capricho de hacerlos padres.

Espero hayan disfrutado de esta historia, no tenia pensado subirla la verdad pero se dio por ciertas razones.

Gracias por leerme ♡♡♡
Recuerden que aun tengo en emisión
Haciendo lo ilógico.

Gracias por leerme ♡♡♡Recuerden que aun tengo en emisión Haciendo lo ilógico

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